Wilhelm.
El ver el mismo cuarto donde hicieron la fiesta de mi iniciación me hace recordar esa noche, recuerdo perfectamente las sensaciones que sentí al ver llegar a Simon, no es mentira que él despertó mucha curiosidad en mí en el primer momento que lo vi, nunca creí en el amor a primera vista hasta que lo conocí a él.
El lugar está totalmente oscuro a excepción de las luces de colores que decoran todo el cuarto, hay máquinas que lanzan gas, globos por todos lados, varitas de luz, mesas con bebidas, la música hace está a todo volumen que siento como vibra sobre mi piel, la gente se mueve al ritmo de la música, unos bailan solos y otros están pegados, todo el mundo está divirtiéndose que me siento cómodo por primera vez en el día, el alcohol hace que las mentes vuelen de nuestras cabezas y así poder estar concentrados en absolutamente nada.
Ventajas del alcohol.
Volteó a ver a Simon que parece igual de ansioso que yo, lo cojo de la mano y lo hago entrar. Su mano hace roce con la mía y puedo notar lo mucho que ha estado sudando, todo esto es algo nuevo para ambos y sé lo preocupado que estaba por venir aquí, miedo al rechazo, nunca te entendí tan bien hasta ahora.
Sé que no necesito del alcohol para estar en confianza con él, pero ¿por qué no beber un poco?, quiero pasar un buen rato y más si es al lado de él, después de todo esta noche pueda cambiar lo horrible que fue nuestra mañana.
- ¿Quieres que bebamos algo?.- Le hablo al oído, sería casi imposible que me escuche con toda esta música.
- Claro, vamos.- La voz de Simon es alegre y me anima escucharlo así.
Caminamos entre toda la gente que está bailando en medio del cuarto, varias personas se pegan demasiado a nosotros tratando de ¿bailarnos?, Simon ríe al ver a todos los estudiantes así, al llegar al otro lado hay una barra donde August está acompañado de todos sus amigos, quiero evitarlo, pero se podría decir que estos días ha tratado de ser amable y aparte es la persona que está repartiendo los tragos.
- ¡Chicos! ¡Vinieron!, sabía que no se perderían esta fiesta.- August grita a través de la música, se lanza a nosotros mientras nos acoge en un abrazo. Definitivamente esta ebrio, y mucho.
- Aquí nos tienes, puede que sea un mejor comienzo.- Simon responde, me sorprende que no haya sido grosero como hace un rato, creo que él también quiere dejar a un lado todo por esta noche.
- Vengan, vengan, tómense un trago conmigo.- Nos jala hacia él y parece que le pide a uno de sus amigos que prepare unos shots, nos entrega unos pequeños vasos con un líquido color rosa.
- ¿Qué es esto?.- Curioseó preguntándole a mi primo lo bastante cerca.
- Es vodka de cereza, es rosa porque le pusimos colorantes.- Él responde gritando meneándose sobre su asiento.
- Creo que esto sabrá a rosa.- Simon da una sonrisa burlona. August se echa a reír a carcajadas.
- A la cuenta de tres conmigo.- Gente alrededor de nosotros alza su bebida al aire, nosotros hacemos lo mismo.- ¡1,2,3!.- August grita y todos nos llevamos el vodka a nuestro sistema, el líquido quema mi garganta, hago un par de muecas al saborearlo un poco, pero a los segundos se va, es un sabor muy delicioso.
Quiero otro.
Simon y yo estuvimos ahí un buen rato con mi primo y sus amigos, nos estuvieron dando una gran variedad de bebidas que la mayoría eran shots de vodka con sabor como uva, tamarindo, fresa, sandía e incluso había uno que tenía brillantina.
Podía sentir como el alcohol empezaba a apoderarse de mi ser, a medida que bebía era menos el ardor en mi garganta, después del cuarto shot ya los bebíamos como si fueran un vaso de agua, la tranquilidad que sentía era enorme, la música era tan pegadiza que me hacía querer bailar, quería bailar con él.
- ¡Ven!, vamos a bailar.- Tomó a Simon de la mano y lo arrastró conmigo a donde todos están.
- ¡No!, Wille estoy muy ebrio y no sé bailar.- Él exclama a medida que llegamos.
- ¿Y eso te importa?, yo tampoco sé bailar.- Quedamos frente a frente.- Y también estoy muy ebrio.
- Estás loco.- Me susurra al oído, ¿es el alcohol el que me hace querer besarlo?.
- ¡Por ti!.- Le gritó, él se burla mientras pone sus manos sobre mis hombros.
Veo a Simon mientras me mira directamente, lo hermoso que se ve bajo las luces que decoran, humedezco mis labios y el ó hace lo mismo, pero no nos besamos ¿a esas estás jugando, Simon?, muero por besarlo.
Pongo mis manos sobre sus caderas y lo pegó aún más a mí cuerpo, comencé a moverme al ritmo de la música, él comienza a mover sus caderas suavemente.
Con todo el alcohol encima y el tenerlo así pegado a mí me hace desearlo de todas las maneras, es imposible no querer besarlo. Así que si él no me beso, yo lo haré.
Agachó mi cabeza hasta quedar a su altura, nuestras narices están rozando y las respiraciones se mezclan entre sí, puedo sentir su respiración pesada al igual que la mía, sé lo mucho que nos estamos deseando el uno al otro.
Doy un pequeño roce sobre sus labios y en cuestión de segundos los separó, quiero tentarlo, al momento que me quite él me mira confundido y yo le doy una sonrisa de satisfacción, pero mis ganas me vencen. Junto mis labios a los de él y rápidamente se adaptan perfectamente, pequeños jadeos salen de nuestras bocas y la música es tan alta que es imposible que los escuchen, nuestros labios se mueven en sincronía que hace que encajen perfectamente.
Saboreo cada movimiento, el beso sabe a los tragos y es delicioso, siento todos los sabores que tomamos a través de su boca, muerdo levemente su labio inferior y el ahoga un gemido, con cada roce mi piel se va erizando más y más, no me importa quién esté viendo y quién no, lo único que pienso es en lo bien que esto se siente.
A falta de aire nos separamos y seguimos bailando al ritmo, giro su cuerpo al otro lado haciendo que quede a espaldas de mi cuerpo, él se mueve contra mí haciéndome sentirlo tan bien, nuevo mis caderas detrás de él sin quitar mis manos de su pecho, me hundo en su cuello y comienzo a besar su cuello en repetidas ocasiones, al momento que mis labios tocan su piel él se mueve más y me hace querer besarlo más.
Estoy amando esto, el poder sentirlo tan cerca.
La música movida se detiene y comienza una canción lenta, todos abrazan a sus parejas haciéndolos bailar más lento, volteó a Simon contra mí y pongo mi cabeza sobre su hombre, me muevo lentamente tomando de sus caderas, él hace lo mismo.
Yellow - Coldplay.
Todos comienzan a cantar la canción casi susurrando, pero en la única persona que me importa ver la tengo frente a mí, todo el mundo alrededor desaparece y me hace sentir que solo somos él y yo en medio de la pista, menéalos nuestros cuerpos lentamente, disfrutando del momento.
Your skin oh yeah, your skin and bones turn into something beatiful you know...
- You know i love you so!.- Simon canta a mi oído, en el momento que escucho eso sonrió sobre su piel.
- You know i love you so!.- Terminó de cantar y él choca sobre mis labios, dejando un beso lento mientras sonríe en él.
For you i'd bleed myself dry!