Ana me mira y sonríe.
-¿Qué pasó?
- Por tu cabezota te pusistes en peligro.
-¿Por mi cabezota?
- Si! Leila fue al departamento y allí estaba a punto de dispararme, pero la señorita Steele se interpuso.
Ella suelta una risita y me sonríe, así que como es de costumbre no puedo evitar y le sonrió.
- Soy tu eroína
- Sí, eres mi mujer maravilla.
Se acerca a mis labios y nos besamos.
- Oh nena, mañana tengo que salír a Portland a la Universidad y te tendré que dejar, pero trataré de no tardar mucho tiempo.
- De acuerdo mi amor no pasa nada.
- Gracias nena.
Se acurrua en mi pecho y yo la abrazó.
Entra a la habitación la doctora.
- Señorita Steele, como va mañana se podrá ir a casa.
-¿Enserio?
- Claro que sí, sólo necesitará de muchos cuidados.
- Lo que usted diga.
La doctora sale de la habitación dejándonos sólos a Ana y a mi. Ella se sienta cruzando sus piernas.
- Sabes cuando estaba inconsciente, de un instante a otro estaba en un lugar blanco sin nadie.
Qué!? El disparó le afectó el cerebro?
- Y podía ver todo lo que ocurría, te llamaba pero no respondías.
- Uau...
Me sigue contando sobre todo lo que vio cuando estaba inconsciente.
***
El motor del Charlie Tango se recalienta y comienza a hace ruidos extraños, uno de los motores se incendia así que no me queda de otra más que apagarlos por mi mismo.
-¿Qué demonios ocurre Christrian?
- Agarrate fuerte. Esto va a agitarse.
Mierda! Estamos a 200 pies. En lo uníco que puedo pensar es en Ana. Su bello rostro. Ella es mi luz, no puedo morir. No ahora. Voy a conocer al mismo viejo diablo. Es tu castigo Grey. Por enamorarte de un bello ángel.
Por alguna milagrosa razón caímos a tierra sanos y salvos, gracias a mis habilidades de volar en un planeador sin motor.
Ambos motores? Que Mierda! Es esto?!
Pov Ana
Estamos en el hospital, ya casi es hora de que me valla.
Dimitrio entra con la comida, una gelatina, un zumo de naranja y unas tortitas. Y huelen muy bien.
- Hola, muñeca.
- Hola y Romina?
- Se la han llevado a casa, se ha quedado dormida.
- Oh...
Su celular suena, salé para contestar.
Cuando entra no trae una cara de mucha alegría.
-¿Qué pasa Dimitrio?
- No quiero que te alteres, ¿Deacuerdo?
- Deacuerdo.
Toma un fuerte suspiró y trata de relajarse.
- El Charlie Tango a explotado.
-¿Qué?!
No, no puede ser, Christrian no!
Trató de salir de la cama, pero Dimitrio me atrapa, lloró y trato de salir de sus brazos, ya que trate bastante, recuesto mi cabeza en su hombro y el me abraza.
«El día que te conocí había más de mil personas a mi alrededor, pero mis ojos sólo querían verte a ti»
Esto debe ser una pesadilla, un mal sueño.
«Mis ojos lloran por verte, mi corazón por amarte, mi boca por besarte y mis brazos por tenerte en ellos»
- Hey! Vas a ver que todo va a estar bien, nos tenemos que ir.
«Cuando una alguien te hace mejor persona sabes que esa persona debe estar en tu vida »
-¿Qué las desgracias nunca se van a acabar?
- José está aquí vamos arriba.
Me levantó y me pongo la ropa que me han traído, ropa deportiva gris y una blusa de tirantes blanca. Me agarró el pelo en una coleta y me pongo los tenis.
Cuando vamos saliendo los estúpidos paparazzis están afuera haciendo estúpidas preguntas. Así que como ya me tienen arta les muestro mi dedo que está en medió en señal de grosería y todos se quedan sorprendidos. Ja.
- Annie eso no se hace.- me regaña mamá.
Yo sólo me río bajito.
***
Cuando llegamos a la Escala todo se siente sólo y triste, ahí está la familia de Christrian en la sala esperando noticias. Saludamos y nos sentamos con ellos, aquí está José y yo no paró de llorar desde que llegamos.
Pov Christrian
Conocimos a un trailero Dan, nos ha contado de su vida y su esposa, perdió un hijo, también creo que es bueno contratarlo para algunos transportes en GEH.
***
Después de que Dan nos dejará en Seattle le di mi número para que me llamará en casó de que acepte mi propuesta.
Llegó a la Escala y lo primero que me encuentro son a los periodistas. ¡Ni rascarte el trasero te dejan hacer en paz!.
Entró y me encuentro con la familia de Ana y la mía reunidas en la sala.
Todos se acerca a regañarme, que por que no les llamé y que los había asustado. Mi madre me abraza.
Buscó a Ana por la sala ya que hoy la dan de alta. La veo se ve igual de hermosa que siempre en unos instantes creí que no volvería a ver su bello rostro.
Ella se acerca a mi y yo la acuno en mis brazos, comienza a sollozar y yo beso su cabeza y sobo su espalda.
- Yo creí que...
- Shhh nena...
La llevó conmigo a la sala y nos sentamos juntos, ella recuesta su cabeza en mi pecho mientras yo cuento la historia de lo que pasó. Mi padre y Ray no terminan de creer que los dos motores se incendiaran al mismo tiempo.
Escuchó que Ana comienza a llorar de nuevo.
-¡Hey! No llores.- le susurro.
- No vuelvas a desaparecer...
Todos se despiden de mí y ahora estamos sólo Ana, José y yo. Así que José se da cuenta de que esto es muy incómodo y va a cenar.
Ana y yo vamos a nuestro cuarto y nos sentamos en la cama, me da una caja y la hago sonar.
- Puedes abrirlo, te lo iba a dar el día de tu cumpleaños en una semana, pero después de lo que pasó, abrelo...
Abro la caja y ahí un llavero de Seattle y un "SI" ella si se quiere casar conmigo. Va hacer la Señora Grey, será mi esposa!
-¿Te vas a casar conmigo?
Asiente con la cabeza.
- Dilo.
- Sí, me casaré contigo.
La tomó en mis brazos y le doy vueltas en el aire haciéndola reír. Ahora sí, a conseguir flores, por que mi corazón ya lo tiene.
***
Ana y yo estamos en la ducha. La tomó de su presioso culito y ella enreda sus piernas en mi cadera y lo mejor de todo esto es que no tengo que usar condón ya que cuando estaba en el hospital pidió que le pusieran la inyección.
Entró en ella despacio disfrutando cada pedacito de ella, está vez no follamos, hacemos el amor, dulce y tierno amor. Por que nos amamos.
Le besó su cuello y luego llegó a sus labios.
- Te amo.- murmura en mis labios.
- Yo te amo más!
Sigo haciéndolo despacio para poder disfrutar todo de ella. Cada lugar de ella.
***
Me despierto y buscó a Ana y no está así que supongo que debe de estar abajo atendiendo a la mierda de José.
Me pongo mi pantalón de pijama sólo hasta un poco abajo de las caderas, se que eso provocará a Ana y también le quedará claro a José Mierda Rodriguez que ella es MÍA Y SÓLO MÍA!
Bajó a la cocina donde se escuchan murmurós, me detengo a escuchar.
- Segura, que no es por todo esto.
Señala el departamento. Enseñale nena, que me amas que no es mi dinero.
- Claro que no, José yo lo amo, además si quiero algo yo trabajaré duró por ello, con mi sudor y esfuerzo.
- Está bien, está bien. ¿Cuándo ibas a decirme ehh y a Christrian?
- Oh eso jaja, es algo confuso, bueno no. Me voy hoy en la tarde, creó que ya le había dicho y a ti lo siento se me olvidó, casi nadie sabe.
Entró a la cocina, saludo José y llegó a Ana la abrazo por atrás, le doy un besó, aquí comienza el show José!
Hago el besó más profundo y apasionado. Ana se sonroja.
- Ya quiero recibir mi otro regaló.
Ana se pone más roja que un tomate. José nos mira con cara de asco. Si, así es follamos mucho.
-¿Qué es lo que tienes que decirme?
- Que hoy en la tarde me voy a Amsterdam, ya te había dicho, al festival me han invitado.
Asiento con la cabeza y ella nos sirve el desayunó. Platicó con José, lo cual es muy raro.
AQUÍ EL DOS. JEJE. CREÓ QUE YA NO TENGO CEREBRO. UPS!
DEJEN SUS ESTRELLITAS Y COMENTARIOS.
SE LES QUIERE.
«MIMI» :) :) :3 :)