A veces, todo lo que es necesario
después de un día muy malo,
es un buen libro como aquellos
y revisar mensajes antiguos
para percatarte de algo;
aunque la vida sea un caos
y pensar te cause sufrimiento,
merece la pena seguir viviendo
porque hay buena gente en el mundo
...aunque estén al otro lado del océano
y todo lo que necesitas es un abrazo,
al final vale la pena todo el tiempo
que has pasado llorando.
¿Sabes la razón de eso?
Que cuando tienes miedo,
y cuando sientes llanto,
cuando quieres acabar con todo,
alguien te escribe con tu apodo
y recuperas las ganas y el aliento.
No sé si me moriré pronto;
pero sé que quiero más momentos
con libros y amigos como estos.
No sé si el mundo es incierto,
no sé si como dice Pris, todo es blanco
o es negro,
no sé qué va a pasar mañana o pronto,
lo que sí sé es que quiero vivirlo.
No sé si voy a llorar de pánico,
o todo se solucionará de algún modo.
Solo sé que como dice Napoleon
Hill, lo que la mente esté pensando
es lo que se está creando,
y que hay que mantenerse en positivo.
Para eso, yo hablo y escribo.
No lo sé, pero quiero deciros a todos
que voy a seguir leyendo, escribiendo
y llenando de mensajes los chats hoy.
¿Porque sabéis qué? Que para eso yo
sirvo,
aunque sea inútil para todo el resto.
Voy a mejorar mi día, te quiero,
escribiendo poemas que no
se lleve el viento.
Quizá sirva de algo para dar solución
a mis conflictos internos
y, por lo tanto, brindar paz y respeto
en todo lo que está pasando externo.
Espero que así paremos.
Y sepamos ahora o luego
que nos amamos
y es un amor
que puede con la discusión
y nos hace estar mejor
que al principio.
Gracias por todo ello,
y por los beneficios ocultos.
Porque el presente es un regalo
y el futuro será más armonioso
después de todo lo que hemos
(sido)
(y del) pasado.
Para mí y para nosotros
para que como familia estemos sanos.
Sempiterno.
Está hecho.