Estaba molesto, estaba muy furioso. No había podido contactarme con él, no había podido contactarme con él para nada, todas las veces que llamé Taehyung no contestó el celular.
— Ay, ¿Ahora qué hago? — pregunté viendo la pista por la ventana
Estaba en un taxi, no pude esperar a Yoongi, tuve que salir cuando recibí la llamada de Hoseok, cuando me dijo que Taehyung no le abrió la puerta y que parecía estar con alguien.
— Maldito mocoso con cara de mono — dije volviendo a llamar a Taehyung, esperando que no esté con ese niño
Taehyung no es así, mi amigo no es así, todo es culpa de ese mocoso, es su culpa.
Mi amigo siempre fue alguien tranquilo, recuerdo cuando lo conocí, recuerdo cuando lo vi por primera vez, era un chico tan miedoso y torpe, era tan inocente, no conocía los dobles sentidos. Recuerdo que vestía algo muy simple y anticuado, recuerdo muy bien como era tan aplicado que a veces me daba cólera, se sacrificó en sus estudios.
También recuerdo que fue mi culpa arruinar su vida, yo los presenté, yo le presenté a mi maldito primo, yo hice que salieran, yo animé a Taehyung a que le diera una oportunidad, yo hice que ésto pasara, de no ser por mí ahora Taehyung tendría una carrera estable y una vida igual, todo es mí maldita culpa.
— Aish, como me odio — dije suspirando
Me gustaba verlo con Bogum, se veía tan ilusionado, recuerdo el día de la boda, recuerdo como los dos fuimos a escoger su vestido, recuerdo como Taehyung estaba tan feliz, lloró de alegría antes y después de la boda, fue tan lindo, incluso cuando su madre decía cosas fuera de lugar, nada borró la sonrisa de Taehyung.
Fue lindo un tiempo, fue lindo, Taehyung siempre era atento, le hacía cartas y compraba regalos, incluso cuando no tenía, mi primo era igual, ambos se demostraban mucho amor, pero luego cambió, de un momento a otro Bogum dejó de ser atento, la única explicación que dió fue que quería estudiar más, que quería ser el mejor y concentrarse en ello, una gran mentira, una de muchas, el principio de todo. Siempre mentía, decía que estaba en un lugar, decía que estaba ocupado o cosas así para no salir con Taehyung, yo sabía que Taehyung sabía que eran mentiras, lo veía en su mirada.
Así fue por tres años completos, Taehyung siempre intentó amoldarse a él, siempre buscaba alguna manera de estar junto a mi primo, siempre y cuando no estuviera en celo, cuando lo estaba se encerraba en su cuarto, yo tenía que ir a ayudarlo con su comida, Bogum solo se iba con sus amigos. Poco a poco se fueron separando, Taehyung intentaba acercárse, incluso le regaló un perrito, pero yo notaba como ya no lo hacía con la misma intensidad, aunque ese perrito sí le hacía compañía.
Bogum y Taehyung vivían juntos, pero no había nada más, solo dormían en la misma cama, pero no compartían más.
Nueve años de matrimonio, nueve años en los que tuve que ver todos los desplantes y malos tratos de Bogum, nueve años en donde Taehyung aguantó todas las malditas mentiras que le daba. Pero un día todo cayó, un día las mentiras de Bogum terminaron.
Fue hace un año y medio, recuerdo que estaba en mi casa, viendo una serie tranquilamente, era sábado y quería relajarme, cuando de pronto escuché una llamada.
— ¿Aló? — pregunté poniéndome de pie al escuchar los sollozos de Taehyung — ¿Tae, qué pas...? —
— Los-los vi Jimin —
— ¿De qu...? —
— Bo-bogum estaba en la casa con esa chica, con-con Suji, estaban en-en la cama... Jimin, los vi, ambos estaban en-en la cama —
Apenas escuché eso salí de mi casa, corrí lo más rápido que pude. Al llegar lo primero que vi fue a Bogum en la sala, se veía pensativo, el perro no dejaba de ladrarle.
— ¿Dónde está Taehyung? —
— En el cuarto — dijo sin dejar de ver la taza de café que tenía al frente, pude notar su camisa arrugada y mal puesta, también como había un celular rojo en su mesa, no era de Taehyung, ni de él
— Eres un asco — dije acercándome a él — te metiste con esa chica... tu alumna, ¿Qué mierda te pasa? —
— Jimin déjame en paz, lo mío con Taehyung no tenía futuro de todas formas —
— Pe... —
— Estoy por mis treinta y dos, Taehyung quiere pero no me da hijos, no voy a esperarlo, además siento todo aburrido a su lado... — dijo viéndome fijamente, pero en su mirada veía otra cosa, remordimiento
— Sabes lo que has perdido... te tengo lastima — dije viéndolo mal
— No necesito tus palabras — dijo volviendo a mirar su café
Yo solo subí, viendo como Taehyung empecaba rápidamente sus cosas, sin dejar de llorar.
— Taehyung... — dije acercándome a él, para abrazarlo
Fue duro, recuerdo como estuvo llorando un buen tiempo, recuerdo como lloró aún más cuando se enteró que la mocosa estaba embarazada, fue muy duro, pero mi amigo se repuso, él salió de todo y volvió a sonreír.
Pero siento que de alguna forma eso lo dañó, no lo sé, creo que todo lo que pasa es como un tipo de revelación, como que solo se mete con ese mocoso para saber que se siente.
— Pero no puede ser... — dije viendo como el taxi paró
— Llegamos —
Bajé sin pensarlo, bajé para irme rápidamente a tocar esa puerta, tocando con desesperación al no escuchar respuesta. Sintiendo el ligero olor de Taehyung desde adentro, también un olor más.
— ¡TAEHYUNG ABRE! — grité a todo pulmón
No hubo respuesta, nada, eso solo hacía que me desespere mucho más. Quería tumbar la puerta a patadas.
— ¡MALDITO JUNGKOOK!, ¡DEJA A MI AMIGO!, ¡DESGRACIADO MOCOSO! — grité sintiendo impotencia
No conozco tan bien a ese niño, solo lo conozco al nivel académico, pero puedo decir con certeza de que solo está con Taehyung por una cosa. Sexo.
— ¡MALDITO CALENTURIENTO!, ¡DEJA A MI AMIGO! — grité pateando la puerta, no sabía que hacer, por mi desesperación estaba pensando en llamar a la policía
Saqué mi celular desesperado, sabía que esto podía ser perjudicial para Taehyung, pero era más perjudicial que ellos estén juntos.
— Ji-jimin... — escuché la voz de Taehyung que me hizo alzar mi mirada, viendo de inmediato el rostro de Taehyung, bueno, solo una parte
— Taehyung — dije intentando abrir más la puerta
— Jimin, estoy bien — dijo sin dejarme pasar
— No, estás en celo, con Jungkook adentro de tu casa —
— Ji-jimin... — dijo cerrándome la puerta en la cara
— ¿Por qué eres así?, nunca dices no, ¿Por qué? — pregunté con desesperación — Taehyung... —
— Estoy bien, mu-muy bien —
— Taehyung, voy a intentar... —
— ¡Ahg!, ¡Ahg! —
No me estaba escuchando para nada, era inútil que diga algo. Solamente negué y me di media vuelta, debía de volver a mi casa, no podría entrar, quemar la casa para sacar a Taehyung no era una opción.
— Cuando salgan de ahí haré a Jeon JungKook papilla — dije mientras esperaba un taxi — voy a cubrirte amigo... no estoy de acuerdo con esto, solo espero que no pase nada malo después, espero... — dije viendo como el cielo estaba oscuro, eran las ocho, pero no dejaba de hacer calor