—¿Qué cosas hablas, Emma? —___ río—. ¿Sabes la fuerza que Draken posee? No va a pasar nada. Ustedes dos terminarán juntos. Estoy segura. —___ se recostó y observó el techo con la mirada perdida—. Te imaginas... Tú persiguiendo a Draken por toda la casa ya que le enseñó a su hijo alguna grosería y ahora el niño no puede parar de decirlo. —volvió a reír—. Sería gracioso.
—¡Basta, que vergüenza! —rió Emma—. Cambiando de tema, ___-chan... ¿Tú estás enamorada de Mikey?
—¿Enamorada? —preguntó ___—. Puede ser. —___ se detuvo a pensar—. Debes de ayudarme a escoger algún vestido lindo en doce años más. —sonrió—. Creo que sí me he enamorado de manjiro, hace dos largos años. ¿Y tú, desde hace cuánto tiempo estás enamorada de Draken?
—Se... Enamoró de mi. —Mikey permanecía espiando la conversación de las dos chicas—. Hace dos años se enamoró de mi. —Sonrió—. Doce años más, si, supongo que no es mucho.
—La verdad... Fue cuando recién había llegado a la casa de Mikey, verás... Hace un tiempo te dije que mi madre me dejo aquí, en ese entonces, Mikey y Ken-chan no se conocían, pero llegó un momento que Mikey dijo "he llegado". Y ahí estaba él. Me quedé viendo a Ken-chan, quien simplemente saludó. Desde ahí que no he pensado en nadie más que en Ken-chan.
—Mikey al escuchar todo lo que decía ___ estaba listo para irse, cuando Emma habló—. Hm... No me molestaría quedarme un rato más de todas maneras. —así que siguió espiando—.
—Ayudame con Ken-chan, por favor. —dijo Emma—. Realmente lo amo. Y no quiero que algo malo le pase.
—No pasará nada, Emma. —___ sonrió—. Se que Draken muere por dar el siguiente paso, pero si conservas la calma y esperas, será mejor.
—Ese es el problema... No puedo esperar. —bufó—.
—___ simplemente río para que ambas quedaran en un silencio absoluto—.
—Te ayudare con Draken. —finalizó ___—.
A la tarde siguiente...
—¿Qué pasa? ¿Por qué me has llamado aquí? —preguntó ___—.
—No vayas a la pelea de Moebius y tōman. —habló Mikey sin mirar a ___—.
—¿Y eso por qué? —preguntó sin darle importancia al asunto—.
—Será peligroso, Osanai... Osanai es capaz de todo.
—¿Eehh? ¡Que hablas! Iré de todos modos, también yo formó parte de Tōman, le di mi palabra a Pah. —___ frunció el ceño—. Últimamente has estado muy protector conmigo. ¿Hay algo que no me has dicho, Manjiro? —___ daba a entender su enfado cuando nombraba a los demás sin sus apodos—.
—Osanai, ___. Es Osanai el problema. —suspiró—. Estoy tratando de protegerte. ¿No te había dado mi palabra?
—Puedes protegerme cuando realmente lo necesite. Osanai solo es una pequeña basura molestando a manto. Si realmente estoy en problemas, lo diré. —sonrió—. Me haces enojar a veces, Mikey. —volvió a usar su apodo—.
—Hmph... Solo trata de evitarlo. Lo digo en general, si hay alguien que esté haciéndote daño, solo dilo y voy a acabar con el. —Mikey le devolvió la sonrisa—.
Año 2017, presente.
—¿Has averiguado algo, Takemicchi? —preguntó Naoto—.
—No... Necesito más información, Si Draken-kun muere el tres de agosto, eso significa que Mikey-kun caería en sus propias sombras... Producto de Kisaki. —habló Takemichi—. ¿Pero... Y ___-chan? ¿No hay nada de su información?
—Eso es lo que más sorprende. ¿Quieres averiguarlo por ti mismo? —Naoto apuntó hacia el computador—.
Takemicchi se acercó al ordenador con un mal presentimiento sobre ___. Vió la reciente noticia sobre ___ y sus ojos se abrieron a tope.
—¡¿E-ELLA ES...?! —pronunció con dificultad—. Ne... Necesito saber más. ¡¡NO PUEDE QUEDAR ASÍ!!
—Todo indica que el suceso partió hace dos años y medio. Desgraciadamente... Kisaki nuevamente lo hizo. Al parecer ___ estaba siendo manipulada por él y...
—Como... —habló Takemicchi apretando sus puños—. Como evitamos esto... ¡¡Debe haber una manera!! ¡¿QUE CLASE DE SUJETO MANIPULA A UNA CHICA PARA QUE AMBOS CONTRAIGAN MATRIMONIO... Y DESPUÉS LA OBLIGUE A ESCRIBIR UNA CARTA DE SUICIDIO?! ¡¡ES...!!
—Piensa, Takemicchi. —habló Naoto—. Mikey y Kisaki pertenecen al mismo grupo, Kisaki debió haber sido lo suficientemente inteligente para crear una pelea entre Mikey y ___, a tal punto que rompieran. ___ luego fue manipulada por Kisaki... Quizás diciendo que si obedecía sus órdenes ayudaría a ___ a recuperar el cursi amor que Mikey sentía por ella.
—Cla... Claro... —dijo Takemicchi—. ¿Pero... Y la carta de suicidio, por qué?
—Simple. ___ a la edad de quince años pasó un trauma, un trauma que... —Naoto dejó de hablar un momento—. Un intento de suicidio fallido, que la dejó con cicatrices. Al parecer, viéndolo del lado psicológico, ___ sufría de una depresión post-traumatica. Lo que la condujo a ser manipulada por cualquier persona. La causa de ese intento de suicidio fue nada más ni nada menos que la muerte de Ken Ryuguji, su mejor amigo. La muerte de ___ no fue un "suicidio" como todos dicen, si se unen los hilos, Kisaki la habría asesinado y lo hizo pasar como un suicidio.
—El tres de agosto... En cuatro días moriría Draken-kun. ¿Y en cinco días ___-chan trataría de suicidarse?
—Exacto. Para evitar que esto se desencadene, debes de salvar a Ken Ryuguji. Si mañana es la batalla de Moebius, no despejes tu vista de él. —Naoto extendió su mano—. ¿Estás listo para asumir la responsabilidad?
Año 2005, Treinta de Julio.
—Hey, ___. ¿Que haces aquí de noche? —Baji se dirigió hacia la banca donde ___ permanecía—.
—Ah, hola, Baji-kun. —sonrió—. Estoy pensando, hm... Reflexionando.
—¿Y eso por qué? ¿Otra vez peleaste con alguien?
—No precisamente... Mikey no quiere que vaya a la pelea de Moebius, dice que Osanai puede... Bueno, eso, ya sabes. —hizo una mueca de desagrado—.
—Hm... Ya veo. —pronunció Baji—. ¿No irás, verdad?
—¡Ah... No lo sé! —tapó su rostro entre su ropa—. Él ha estado protegiendome demasiado. ¿De cuántos años me veo acaso? ¿Once, diez?
—Ochenta.
—¡¡IMBÉCIL!! —golpeó su hombro—. ¡Estoy hablando en serio!
—Baji desvió la mirada y comenzó a hablar—. Mikey te quiere, es por eso que hace todo esto por ti. No cree que eres débil, solo está deseando que vivas. —frunció el ceño—. Tú nunca entiendes nada, eres demasiado mala para comprender indirectas.
—¿Es una ofensa o... Qué? —rió nerviosa—.
—Tomalo como una ofensa. —se burló Baji—.
—¿Qué hacías aquí de noche? —preguntó ___—. ¿Te rompieron el corazón?
—¿A mí? Yo soy el que rompe corazones. —habló orgulloso—. Solo... Pensaba algunas cosas.
—¿Si? ¿Cuales? —sonrió con malicia—. ¿Sobre tus secretos más vergonzosos? —rió ___—.
—No diré nada más. Ve a casa, hace frío aquí afuera. —volteó la mirada—.
—¿Te preocupas por mí? —rió ___—. ¿Qué pasa con todo el mundo? No saben disfrutar la vida. Ven. —___ tomó la mano de Baji y se dirigieron hacia un balancín de madera que estaba en el parque—.
—Que infantil. —Baji sonrió—. No iré a la pelea de Moebius. Creo que no vale la pena—. —habló mientras ambos se balanceaban en el juego—.
—¿Hmm? ¿Por qué no? Osanai merece un poco de tus golpes, no le vendrían mal. —___ ladeó la cabeza con expresión de confusión—.
—Osanai, Osanai, Osanai... Su nombre me harta, no dejan de hablar de ese rubio de mierda todos los días. Deberían preocuparse por reclutar más miembros en Tōman—.
—Blah, blah, blah. —dijo ___—. En serio solo sabes quejarte. —rió ___—.
—Oh, vamos a ese juego. —Baji salió del balancín para que ___ cayera desde arriba—.
—¡EEEH! ¡¡ESO DOLIÓ!! —habló ___ tocando su cabeza—.
—¿Que solo sabes quejarte? —baji extendió su mano para que ___ se levantara—.