Camila pov
Ya han pasado 2 semanas desde aquel encuentro íntimo que Lauren y yo tuvimos, su declaración me envolvió más a ella. Las cosas entre nosotras van estupendamente bien, siempre que podemos tenemos contacto íntimo, todavía no nos hemos dado el primer beso y ya estoy desesperada por hacerlo.
Lauren y yo no hemos formalizado, sólo estamos disfrutando de nuestra compañía y de lo mucho que nos queremos aparentemente. No quiero forzar las cosas con Lauren, sé que ella tampoco, por eso dejo que todo fluya y mientras tanto disfruto de todo.
He pasado mucho tiempo estudiando, la universidad se está poniendo intensa y es una de las razones por la cual casi no estoy teniendo encuentro con Lauren, ella es paciente y no me presiona, y estoy agradecida por eso.
Mi padre por otro lado, quiere que yo tenga una relación con el hijo de su socio, Austin, dice que es por el bien de la empresa, que eso nos conviene y no entiendo mucho en qué si a mi no me interesa los negocios, no sé qué decir respecto a eso, no me gusta Austin, me siento incómoda cuando estoy con él, pero aún así mi padre quiere que esté con él.
Mi padre dijo que asistiríamos a un evento donde los ricos donan dinero a fundaciones benéficas y nos estamos preparando para ir.
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Ya todos estábamos listos, íbamos saliendo de la casa, todos estábamos vestidos formal, mamá tenía un precioso vestido azul marino ajustado de las caderas para arriba y la otra parte holgada, yo tenía un vestido negro que se ajustaba perfectamente a todo mi cuerpo, con un escote en la espalda, si, me encanta el escote en la parte de atrás, Sofía tenía un hermoso vestido rosa pálido largo y un bonito peinado, papá llevaba un smoking negro, se veía guapo.
Al llegar a los autos ya Tomas tenía las puertas abiertas para nosotros, no iríamos con Tomás, papá en el asiento del copiloto y nosotras en la parte de atrás, Lauren, por su puesto, estaba preciosa en su traje azul marino, le quedaba perfecto, era ajustado y se le veía muy bien, Lucas vestido igual que ella también se veía guapo. Ellos irían en el otro auto.
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Llegamos al evento, en la entrada había una alfombra roja y muchos periodistas tomando fotografías de los invitados. Lauren y Lucas estaban en posición, y Lauren abrió la puerta de atrás para que mamá, Sofía y yo bajáramos del auto, ya papá nos estaba esperando, al bajar Lauren me tendió su mano para ayudarme, la cual tomé y me dió una caricia leve.
Lauren y Lucas nos escoltaron hasta la entrada y de ahí la perdí de vista, el lugar era hermoso, en el centro del techo había un hermoso candelabro de diamantes, todo se veía lujoso, las personas tenían trajes y vestidos aparentemente caros. Papá a lo lejos pudo ver a su socio el señor Paterson y a su familia, nos dirigimos hacia allá y papá lo saludó con euforia, el señor Paterson cortésmente nos invitó a sentarnos en su mesa, su hijo Austin estaba ahí, me tocó estar al lado de él, y él buscaba todo los medios para conversar conmigo, yo lo ignoraba, estaba irritada, papá hablaba de negocios con el señor Paterson, mamá con la señora Paterson hablaba sobre algunos vestidos de señoras que estaban en el evento, Sofía estaba distraída en su celular. La molestosa voz de Austin retumbó entre la música.
-Camila te ves bien en ese vestido- dijo con una sonrisa torcida y comiéndome con la mirada.
Rodeé los ojos y dije -Gracias.-
La noche avanzaba y el evento no tenía pinta de terminar ahora, ya estaba cansada y aburrida, Austin ya estaba un poco ebrio, y por varias ocasiones él llegó a tocarme bruscamente sin que los demás se dieran cuenta.
-Mamá me iré a casa, ya no quiero estar aquí y tengo que estudiar- fue más una excusa para no estar cerca de Austin.
-Está bien hija, yo le diré a tu padre- dijo con una media sonrisa, papá estaba con unos socios del otro lado del salón y no quería molestarlo.
Salí y duré unos minutos buscando a Lauren hasta que la vi recostada del auto y mirando algo en su celular con el ceño fruncido.
-Lauren, te estaba buscando- dije cuando por fin llegué a su lado.
-Te pasó algo?- dijo guardando su celular en el bolsillo.
-No, solo me quiero ir de aquí- dije con una sonrisa de lado.
Lauren de una vez se encaminó a las puertas y abrió una para mi.
-No, no quiero ir atrás, quiero ir a tu lado-.
Lauren sin decir nada la cerró y me abrió la del copiloto y yo me subí. Una vez que Lauren ya estaba dentro y asegurada dije:
-No quiero ir a casa, llévame a otro lugar-.
-Tienes algo en mente?- dijo mirándome a los ojos.
-No, y tú?-
Pensó por unos minutos y finalmente dijo.
-Si, creo que sé donde-
***
Me la pasé el camino entero insistiéndole para que me diga cual ese lugar a lo que ella respondía que era una sorpresa, la curiosidad me invadía y estaba ansiosa. Cuando llegamos mis ojos escaneó todo el lugar, tenía una vista increíble, se veía toda la ciudad y el enorme letrero de Hollywood.
Aparcamos en un lugar tranquilo y privado, estaba perfecto para mi. Al bajar del auto respiré el aire fresco, era una zona un tanto silvestre, por lo tanto el aire era puro.
Lauren se quitó su saco y se recostó en el bonete del auto, yo la seguí y me recosté a su lado.
-Esto es hermoso Lauren- dije fascinada por la vista.
-Sabía que te iba a gustar- dijo sonriéndome.
-Tú sonrisa es hermosa Lauren- dije sonrojándome por el cumplido que le había dicho.
-Gracias- y soltó una risita, -La tuya es más hermosa que la mía- colocó la palma de su mano en mi mejilla y sus ojos tenían un brillo intenso.
Hubo un rato de silencio, estábamos deleitándonos con la vista de media ciudad.
Noté como Lauren me miraba y después volteaba, como si quiera decirme o hacer algo, yo solté una risita y le dije.
-Hay algo que quieras decirme Lauren?- Ella me miró esta vez sin voltear.
-No-
A continuación tomó mi mano en silencio y me atrajo hacia a ella, poniéndome enfrente de ella entre sus piernas, yo llevé una de mis manos a su hombro y fui subiéndola lentamente hacia su cuello, para acariciarlo y seguir subiendo hacia su cara, ella cerraba sus ojos disfrutando el contacto, sus manos estaban en mi cintura. ella recostó su cabeza en mi pecho mientras acariciaba su nuca y pasaba mis manos por sus suaves mechones de pelo.
Ella me acercó más a ella, una de sus manos subió por mi escote y acariciaba mi espalda, sus movimientos era suaves pero con un poco de presión, se sentía delicioso, ella bajó su mano hacia mi culo pero no lo apretó, solo lo acarició.
Sus manos otra vez se posicionaron en mi cintura, ella repartió besos húmedos por el centro de mis senos, yo me arqueé contra ella y solté algunos gemidos bajo, ella apretó su agarre en mi cintura y me pegó más a ella, besando más y más alrededor del pecho. Yo gemí su nombre y al escucharlo ella gimió, era un gemido ronco y presionó su erección contra mi. Podía sentir lo húmeda que yo estaba, estaba necesitada, necesitaba de Lauren, ella me torturaba. Dejó de besarme para mirarme a los ojos, luego mirar mis labios, yo los tenía entre abiertos mirándola con excitación. Ella se remojó sus labios y dijo con voz ronca:
-Te puedo besar?-
-Pensé que nunca lo dirías- dije mordiéndome los labios.
Ella sonrió y presionó sus labios con los míos, al principio era un roce, pero luego se intensificó, la agarré del cuello como si no quisiera que se separara de mi, ella me agarró aún más fuerte y mordió mis labios.
Era un beso lleno de pasión, necesitado, intenso. Agarró mi culo ferozmente y yo gemí, aprovechó para entrar su lengua en mi boca, explorando mi boca con su lengua, sus labios eran suaves y exquisitos, las caricias que me daba mientras me besaba me tenían al borde de la locura, Lauren era una locura. Rocé nuestros cuerpos y pude sentir como se arqueaba y soltaba un gemido ronco, sentí su erección en mi pelvis, estaba dura y palpitando entre sus pantalones, era un gran bulto, Lauren era grande, estaba ansiosa por verla y tocarla.
Nos separamos por falta de aire, sus labios estaba hinchados, sus ojos brillaban de pura lujuria, sé que los míos también. Mi zona estaba hecha un desastre, los pantalones de Lauren tenía una humedad Justo donde está su miembro, se vino? Probablemente si. Lauren era un mar de jadeos, no dejaba de presionarme contra ella, su cara enterrada en mi pecho, su respiración caliente chocando en el centro de mis senos, mis manos acariciando su nuca, y yo con la boca entre abierta respirando pesado.
Eso fue increíble.
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