Dímelo entre besos [COMPLETA]

By KhylAnderson

161K 19.8K 6.9K

Arturo desearía que su corazón no se acelerara cada vez que mira a la malhumorada Ludmila. Ludmila desearía q... More

Sinopsis
AVISO IMPORTANTE
1|Equis, somos chavos.
2|No es muy Rockstar.
3|Momento de brillar.
4|Tamaño perfecto.
5|Portarnos mal.
6|Anonymous
7|Fuckboy.
8|Baño de chicas.
9|Maravillosa jugada.
10|De cero.
11|Planes.
12|Mister Cupido.
13|Olor a éxito.
14|Me importas.
15|Sobre mí.
17|Almohada.
18|La propuesta.
19|La Regia.
20|Dame un besito.
21|Tortura deliciosa.
22|Más de ti. 🔞
23|A la orden.
24|Irresistible.
25|Fuga.
26|Juntos, pero no tanto.
27|Caníbal.
28|Modo espía.
29|El primo Carlos.
30|Provocar.
31|Escultura humana.🔞
32|Increíble. 🔞
33|Cucaracha.
34|Razones.
35|Locura.
36|Mi complemento.
37|Adrenalina.
38|Sin pantalones.
39|Más que eso. 🔞
40|Completo.🔞
41|Nalgas de acero
42|Un día más.
43|Metida de pata.
44|Decisiones.
45|Mala influencia 🔞
46|Almohadas.
47|Hecho en México.
48|Bomba de tiempo.
49|Sustos.
50|Felicidad.
51|Quesadillas sin queso.
52|Perdidos.
53|Llegar de un chasquido
54|Pichula triste.
55|Cada parte de ti. 🔞
56|Ingenuos.
Epílogo|Destino Las Vegas.

16|Objetivo logrado. 🔞

3.8K 408 181
By KhylAnderson


⚠️Advertencia de contenido explícito.

No puedo creer que esté pasando y no, no es sueño, lo comprobé al llegar al edificio departamental dándome un fuerte pellizco en el brazo.

Debo admitir que nunca se me había planteado por la cabeza salir a altas horas de la noche para reunirme con la chica que me gusta, pero se trata de Ludmila González y quiero salir de mi zona de confort que me ha atado bastante. Se supone que ambos estamos bien. El alivio que se acumula en el pecho me da esperanzas de tener una oportunidad con ella.

Admiro su atrevimiento.

Sonrío contra sus labios mientras siento sus manos deslizarse por debajo de mi camisa, va tirando del dobladillo hacia arriba en un intento de apartarme la prenda de encima. Hago un esfuerzo por mantenerme paciente entre besos y caricias.

La estoy besando y me derrito por dentro.

—Quítate el pantalón —sisea contra mi oído y me da escalofríos —vamos a divertirnos.

—¿Ya?, ¿directo al grano sin hablar? —suelto una risita.

La morena me mira a los ojos enarcando una ceja, antes de que pueda averiguar lo que quiere transmitirme.

Abandona el colchón deslizándose hacia abajo donde queda arrodillada frente a mí, formo una «o» con labios al captar el mensaje. Mi visibilidad es casi nula al estar envuelto en penumbras dentro de la habitación.

—Hablas mucho, Arturo, no es que me moleste, pero ahora mismo quiero escucharte gemir —comenta llevando sus manos al botón —. Hace mucho que he querido hacer esto.

Ahora es mi turno de alzar las cejas.

Esta noche todo son fuertes declaraciones. Me siento abochornado.

Sonrío como un estúpido. Mis pantalones se transforman en un charco bajo mis pies.

—Bueno..., todo tuyo —señalo.

Su mano traviesa me masajea sobre la tela donde ya comienzo a ponerme duro, duele, ahogo un jadeo sin apartar la mirada de sus movimientos. Me observa con deseo ansiosa por probarme como si fuera un dulce o yo que sé, siempre me parece extraño comparar el pene con una paleta.

—Me veo con la obligación de decirte que tienes buenos dotes —comienza a decir con picardía al bajarme los boxers quedando expuesto —bendito sea lo que hay entre tus piernas.

Comienzo a reírme llevando una mano a la boca. Soy consciente que no estamos solos en el apartamento.

Lo que viene a continuación, es su mano tomándome desde la base, doy un leve respingo y tomo un puñado de las sábanas con ambas manos, Ludmila no espera un momento mágico, su mano comienza deslizarse de arriba abajo con lentitud. Todo mi sistema sufre un colapso de cosquillas.

Echo la cabeza hacia atrás entre abriendo la boca y sin más, siento sus labios húmedos lamer la punta como lubricante.

—Oh, por... —las palabras se quedan atoradas en mi garganta.

Me obligo a bajar la mirada poniendo atención, es una vista gloriosa. No tengo idea de donde poner las manos por lo que aprieto con más fuerza las sábanas mientras mi corazón late con desenfreno y comienzo a sufrir de espasmos.

Mientras su boca me envuelve, su mano sube y baja con lentitud una vez que está lubricado.

Oh por... sí... justo ahí... aaah.. santos cuervos, se siente tan... aah, me va a dar el soponcio aquí... joder se siente tan tibiecito su lengua.

Su mirada se encuentra con la mía poco después, jadeo sin poder resistirlo moviendo mis caderas al ritmo, su mano izquierda toma la mía llevándola encima de su cabeza.

—¿Quieres que...?, oh.

Envuelvo su cabello con mi mano. Doy otro respingo y gimoteo al sentir su boca tratando de llegar hasta el fondo, hay no, no quiero que se me ahogue por brindarme una buena mamada. Lame y chupa, esta vez aumenta la velocidad provocando sonidos demasiado eróticos.

—Ludmila... me es... yo... —presiono los ojos con fuerza.

—Espero que lo estés disfrutando.

—¡Claro que sí! —gruño con emoción —demonios, se siente bien.

—Y apenas estoy comenzando —me guiña un ojo.

—Lu, me va a dar un ataque al corazón si... oh, mierda —ni siquiera me da tiempo para seguir hablando, su mano me envuelve moviendo de arriba abajo con velocidad.

Ya no aguanto más, comienzo a gruñir mientras sufro de espasmos.

Si me encuentran muerto sería gracioso ver en al pie de las noticias recitar «murió a causa de una exitosa mamada».

No hay que ser expertos para disfrutar del momento, mi mano le guía en los movimientos. Ella está igual que excitada.

—Voy a correrme... repito... voy a correrme —jadeo dejando caer mi espalda en el colchón. Maldición, siento un dolor recorrerme la columna vertebral que baja hasta mi entrepierna listo para disparar —apártate, Lud..., demonios.

—No —gruñe.

Su mano sigue encima ayudándome a obtener un orgasmo lo más rápido, gimo con fuerza al sentir el líquido caliente cubrirme junto con sus manos. Alzo la cabeza, primero pienso que le va a dar asco, sin embargo, noto satisfacción en su sonrisa.

—Objetivo logrado —se relame los labios.

Joder, eso ha sido demasiado sexy y erótico. Ludmila me vuelve a subir los boxers después de limpiarnos. Con la fuerza que me queda, tiro de su brazo aterrizando sobre mi pecho, mis labios se estampan con los suyos y mis dedos se enredan en su cabellera.

El beso se vuelve más necesitado, se aparta para retirarse la blusa quedando en sostén.

Sin embargo, cuando intenta pasar su pierna al costado de mi cintura, pierde el equilibrio y termina enterrando su rodilla en mi entrepierna, ahogo un grito de esos que piensas que es el final de tus días, termino rodando por la cama sin darme cuenta que he quedado en la orilla y me doy un putazo en la frente al caer al piso.

—¡Arturo!

Me retuerzo llevando ambas manos en mi entrepierna donde siento una punzada horrible.

—Por un carajo, por un carajo —le escucho murmurar a mi lado —dime, ¿te puedes levantar?, ¿del uno al diez que tan fuerte es el dolor?

—Un millón —siseo adolorido.

El Windows se me ha vuelto a reiniciar.

—Esto es grave.

Es imposible calmarme, así que me encorvo mientras Ludmila sisea cosas que no entiendo al abanicarme la cara.

—Lo siento, lo siento, lo siento.

Entonces como arte de magia, la luz se hace presente seguido de:

—Pero, ¿qué está ocurriendo?

Samantha ha despertado y ya me imagino la lluvia de preguntas que vienen después. 

Auch.

¿Qué tal el capítulo?

Continue Reading

You'll Also Like

4.5K 326 33
Segunda parte de: A dónde vos vayas,yo voy Al empezar la universidad de Harvard, Alison tubo muchos problemas en el trayecto del año ya que Marco se...
97.6K 6.2K 28
Libro #3 de la trilogía Las reglas del deseo. Existen personas correctas en el momento incorrecto. Existen amores que se entre más cerca, más lastima...
59.6M 1.2M 15
Sinopsis Kaethennis ha disfrutado de los placeres de la vida, mucho, casi se puede decir que demasiado. Un alma libre, al menos así se definiría el...
23.9K 5.1K 45
Dicen que los colores tienen significado, yo lo veo todo gris, Wilson Walter lo ve todo naranja, él es de rock, yo soy de baladas, yo lo quiero aleja...