Todavía seguía torturándose internamente por haber cagado su relación con Misha, y el hecho de que recordó cuando se enamoró de Louis. Las cosas no pudieron ir peor para ella, quien siempre fue alguien amable, generosa y callada. No entendía qué fue lo que cambió.
──¡Hola, preciosa! ¿Tienes alguna de estas noches libre?
¿Por qué había cambiado de esa manera? ¿Realmente era por Haru? ¿Hubo algún otro factor que afectara su decisión? Quizás, y solo quizás, era lo que realmente quería. Si ella siempre se sentía menos por ser una carnívora, todos lo hacían resaltar, cuando la miraban, y veía en sus ojos un “tengo miedo” al estar cerca de ella. Pero, estando los dos, coqueteándose, es como si la mirada expresara que los dos son iguales. Son enfermos que quieren una sola cosa: sexo. No la hacían sentirse superior o inferior cuando ambos se faltaban el respeto mutuamente, y la sensación de por fin sentirse bien era lo que tanto le agradaba.
──¿Cuándo pasas por el pan?
Estando con un herbívoro que quiere con ella, nunca le importó cómo la viera, ya que sólo eran las ganas de follar las que tenía. El que ambos por fin digan “somos uno mismo”.
Pero, ¿y si llevaba esa sensación al límite? ¿Y si se atrevía a dar el siguiente paso con un animal? ¿Qué pasaría? ¿Acaso terminaría arrepintiéndose? ¿O llegaría a sentirse incluso mejor que cuando normalmente hablaban? Incluso temía que por error terminase comiendo a su presa en pleno acto, y tampoco quería perder su virginidad tan pronto. Tenía miedo de muchas cosas, ¿cómo fue que Haru pudo vivir así? Haru no era virgen, y no fue precisamente con Louis con quién dejó de serlo. ¿Acaso estaría bien si ella decide tener sexo casual? Y aunque no había nada de malo el que una mujer llevara una vida sexual activa, no quitaba que hubieran estúpidos que creerían que eso estaba mal.
El camino al club de teatro no había sido tan largo en realidad. Más bien sólo caminaba de manera lenta tras haber tenido ese peculiar recuerdo y esos pensamientos bizarros. El tiempo pasaba lento para ella si se ponía a pensar demasiado las cosas. Y hacer eso era algo común para ella. Lo hacía muy a menudo cuando estaba aburrida, y le ponía confusa, ya que reflexionaba sobre lo que hacía, y si estaba bien siquiera hacerlo. No podía sentirse más mierda.
Miró al techo del pasillo, ya en la entrada del club de teatro, dado que aún no entraba al aula. Ya se encontraba en el lugar, sí, pero tenía pena de entrar allá, sobre todo por las ideas que cruzarían por la mente de todos los que la vieran. Todo el mundo sabía ya de la reputación de ____ T/A, y quizás todos allá malinterpreten las cosas y traten de faltarle el respeto.
Y recordó a Louis.
Se sentía un asco por haber mentido a todos el haberse acostado con él. Lo hacía (mentir) por Haru, para que ella pudiese ser feliz con Legoshi sin necesidad de que la tachen de puta. Quiso ayudarla, y ahora era su oportunidad. Pero Haru creía que habían otras maneras de cooperar.
Y fue muy cobarde de su parte el haber fingido tener sexo de quienes no sabrían las mentiras en las que se veían involucrados. Incluso de Tem, con quien no había hablado y que sabía que antes tuvo una chica que le gustaba. ¿Fue muy malo haber mentido con él? No podía detener las mentiras. Y también con Legoshi, ella dijo a todos que lo hizo con él, y todos le creyeron de inmediato.
Legoshi no admitía nada, pero todos ya creían que ambos canes habían tenido relaciones. Y ello quitaba al lobo la etiqueta de “Virgen”. Pero lo peor y lo que más dolía a la fémina, era el haber usado a una alpaca muerta y a un ciervo desaparecido en sus sucias mentiras.
Si Louis seguía vivo, ¿qué iba a pasar cuando él regresara? Todos le harían la pregunta, solo para que él responda:
──No sé de qué mierda me están hablando.
La zorra se apoyó en la pared del lugar, mientras tapaba su boca. No pensaba en las consecuencias que podían traer sus mentiras. Y todavía debía buscar a la zorra de las fotos, que claramente no era ella.
Podía ayudar, sí, a que Haru tenga mejor reputación, pero de todas maneras era demasiado que cualquier enfermo viera esas nudes e imaginara sucias fantasías con ella.
──Oh, mierda... ¿¡Qué voy a hacer?! ──Exclamó en un susurro, mientras de sonrojaba y tomaba su cabeza ──Si viene Louis de regreso, todos le preguntarán sobre mí... Qué pena...
──Uh... ¿Está todo bien? ──Miró con suma sorpresa al lobo gris, quien iba a entrar al club, se hallaba a pocos centímetros de ella ──¿Qué haces acá? ¿Te perdiste, ____-chan?
──Ah... ──alzó la vista, calmándose. Uno de sus mejores amigos, Legoshi, estaba frente a ella viéndola con sorpresa. ____ sonrió un poco más relajada ──Misha me mandó a cuidar y vigilar el club de teatro ──Respondió, y posó sus brazos detrás de su espalda tratando de no verse muy nerviosa ──. Los de periodismo dicen que ustedes necesitan quedar bien con la escuela, dado que... Bueno, con todo el rollo que está sucediendo.
──Pero... ¿no en todo caso necesitas tomar fotos para el periódico escolar? ──Su tono de voz sonaba peculiarmente preocupado y angustiado. Como si le dijese indirectamente a ____ un “no entres, por favor”
──Le estoy haciendo el paro a Misha ──Respondió, y se acercó más al mayor ──. Así que, los ayudaré en lo que pueda. Si necesitan que haga de actriz, estaré encantada. Todo sea por estar en mi club un tiempo más. Gracias a mi estupidez igual estamos alejando a los nuevos miembros, y me sigo sintiendo mal por que es mi culpa, umh...
──Ah, entiendo ──dijo, y miró al suelo unos momentos ──De acuerdo, gracias por la ayuda. Creo que serías buena tramoyista, pero igual necesitamos más actores. Espero tu timidez no vaya a ser un problema ──Dijo el lobo, mientras ambos entraban, captando la atención de todos los miembros del club.
Sobre todo de aquella loba que miró con cierto grado de ira a la roja, quien tragó saliva por los nervios. Todas las vistas clavadas en el par, ¿así se sentía Haru cada que iba a hacer algo? Por eso le daba tanta pena que la vieran con Legoshi. Menuda suerte la de ella no tener un enamorado cuya reputación pueda verse afectada por ella. Ah, cómo extrañaba a Louis en esos momentos. Solo él podría hacerla sentir mejor, aún con palabras de desaliento y sermones.
──Porque Legoshi y ____ llegaron a tener sexo en, ¡los baños de hombres! ──Exclamó Bill en un susurro, susurro que todos oyeron a la perfección. Se tapó la boca después de ver la mirada asesina de la zorra.
Todo quedó en un silencio incómodo, y más porque Tao le había golpeado con el codo al tigre. Fue muy estúpido haber dicho eso tan de la nada justo cuando ellos llegaron. Bill era el tipo de animales que decían las cosas así de directas, pero incluso para él fue una idiotez haber hecho esa “declaración”. Aunque internamente igual quería cogerse a ____.
Legoshi miró a su amiga antes de que la misma fuese a pasar en frente, el sonido de su tacón, el único ruido del lugar, y ver su cabello ondear era simplemente hipnotizante. Pero Legoshi solo la veía como una amiga. Él ya tenía ojos solo para Haru, aunque ninguno de los dos se gustara entre sí. O eso creían.
──... ¿Estás segura que no quieres que desmienta todo esto? ──Preguntó el lobo a su amiga, refiriéndose a la mentira que involucraba a ambos. ____ negó. soltó un pesado suspiro antes de posarse frente a todos los miembros.
──No, gracias. Te ruego que no digas nada ──Susurró la fotógrafa, mientras que el lobo se iba a sentar algo dudoso por la respuesta y la contraria aplaudió dos veces para llamar la atención, aunque tenía ya la atención de muchos, no había necesidad de hacer eso ──... Amh... Buenos días. Como sabrán, el club de teatro ha tenido mala reputación desde el año pasado... Y, sé que no soy quién para hablar, pero he venido para poder ayudarles, he sido enviada por parte de la coordinadora del club de fotografía y asimismo, del líder del club de periodismo. Me quedaré acá y semanalmente mandaré informes al periódico escolar. Los ayudaré en todo lo que sea posible mientras tanto ──Hizo una reverencia, algo avergonzada. Todos la veían de manera muy extraña y forzosa, y no le gustaba sentirse así.
──Disculpa que lo pregunte ──Aquella loba de color marrón alzó la mano, pidiendo palabra, que fue concedida por la zorra cuando la señalo y asintió otorgando el permiso ──, ¿pero puedo saber quién eres y por qué precisamente tú eres quien nos ayudará?
──Mi nombre es ____ ──Respondió, y no se percató de que por primera vez no estaba nerviosa. Hasta Legoshi ignoró esto por alguna razón, aunque el lobo más bien estaba perdido en su mundo. Estaba demasiado distraído ──. Vengo del club de fotografía, sí, pero... Uh... La coordinadora de fotografía tiene muchos trabajos por hacer, y bueno, los de periodismo deben cubrir otros temas. Así que bueno, lamento si llego a arruinar algo, je je. Pues... ──La campana sonó, todos miraron al techo como si de allá proviniera ──Bueno, obviamente debemos volver a clases. Yo debo de estar en mi club. Así que si alguno tiene alguna duda no lo piensen y vayan a verme allá. En serio, también desearía que algunos me apoyaran.
Todos empezaron a quejarse y balbucear, ahora sí, poniendo tensa a la muchacha, quien trató de calmar el ambiente.
Además, quería irse pronto a su salón, no soportaba mucho estar allá. ¿Por qué nadie se iba si la campana había sonado?
──B-b-bueno, no soy alguien que pueda ayudarles de otra forma ──dijo, aún más nerviosa y a punto de gritar de desesperación ──. P-p-pero los de periodismo están ocupados, quise ayudarles, y-y-y... Necesitamos regresar a clases, b-b-bueno, yo debo, ustedes deben estar acá un tiempo más, c-c-creo...
──Cállate antes de que arruines las cosas ──Habló alguien, llamando la atención de todos.
La protagonista frunció levemente su ceño al ver de quién se trataba. Aquel carnero hizo aparición, mientras movía sus manos de una forma bastante coqueta, llamando la atención de todos. Estaba causando revuelo, ¡había un nuevo miembro en el club! La de pelajes rojos rodó los ojos, cruzándose de brazos y mirando a Legoshi concentrado en su mundo, sentado en otro lado.
Bufó, mientras recordaba la primera vez que lo vio. No creía que a final de cuentas haya aceptado entrar en teatro, le tomó por sorpresa.
──E-esperen... ¿¡Por qué tenemos un nuevo miembro?! ──Exclamó el tigre, ciertamente furioso ──No estarán pensando que pueda hacer de reemplazo a Louis, ¿Verdad?
──Ni de coña va a funcionar ──dijo ahora la pantera, cruzándose de brazos igual. El albino rió levemente, acercándose a la protagonista hasta quedar delante de ella, y ahora, ser el centro de atención.
──Esto no debería ser cuestión de apariencia, supongo ──Comentó el albino, echando una mirada a la zorra ──. No es que quiera reemplazar a Louis, no. Se necesita de un buen actor estrella para eso... Pero si así fuera, vale la pena mencionar que, día tras día, los ojos de los carnívoros pierden cierto brillo gracias a sus deseos. En pocas palabras, no son hermosos...
──... ¿Disculpa? ──Preguntó la protagonista algo indignada, mirando al carnero quien prosiguió:
──Eso, es un hecho científico ──Guiñó un ojo. El resto de carnívoros mostró ira.
──... ¿¡QUÉ?!
El carnero miró a ____, guiñándole un ojo nuevamente mientras que la contraria mostró ira en su rostro. ¿Cómo se atrevía a decir eso? ¡Legoshi sí era hermoso siendo un carnívoro! Jadeó de desesperación, antes de sentir como, de nuevo, su falda era alzada por aquel carnero.
Era la segunda vez. Quería hacerlo su cena a como dé lugar.
──Veo que vas a ayudar al club de teatro. Oh, Dios, qué amable eres ──Dijo de forma sarcástica el carnero provocando que ____ sonriera en falso ──. Bueno, no me molesta que estés acá... Al contrario, me gusta la idea de poder verte todos los días, guapa.
──¿Necesitas algo...? ──Forzó una sonrisa, mientras que arañaba con fuerza su brazo por la ira. Aunque se lastimaba de forma disimulada.
Él sonrió ──Escuché por allá que has tenido... Aventuras con Legoshi. ¿Es eso verdad? No me lo pude creer la primera vez que lo escuché... Bueno... Son tú y Legoshi, no puedo creer cosas así de ustedes dos, sobre todo sabiendo sus extraños fetiches con herbívoros. Eso sí es atrevido.
──Creo que tú, más qué nadie, deberías saber que todo es falso ──dijo, y cerró sus ojos aún sonriente. Enterró las garras con más fuerza ──. Y, deberías tener más respeto por nosotros, estúpido carnero. Ahora si me disculpas...
Se posó de nuevo al frente, de nuevo palmeando para llamar la atención, más de los carnívoros que se habían alterado gracias a Pina.
Ella no debía perder el control o Pina saldría ganador, eso era obvio. Al contrario, debía de dar su mejor esfuerzo y ayudar al club de teatro, esa era su meta allá.
──Muy bien, basta ──Se tomó las caderas una vez todos la volvieron a mirar ──. No sé nada de este club, y debo de regresar inmediatamente a mis clases. ¿Quién es, después de Louis, el encargado o representante?
Todos miraron de inmediato a la loba, quien se sonrojó levemente antes de levantarse, y hacer una reverencia en gesto de saludo.
──Soy Juno, de primer año. No soy representante, pero para muchos soy la más capacitada. ¿Necesitas algo? ──Forzó una sonrisa, que se veía muy sincera a simple vista. La zorra la analizó, y ladeó la cabeza a la par que suspiraba.
──Para el receso necesito que me veas en el club de fotografía ──dijo, con cierta seriedad. Era la primera vez en mucho tiempo que no estaba tan temerosa ──. Quiero que me des detalles acerca de la obra, y en qué puedo ayudar... Debemos de hacer de este evento perfecto, para poder hacer ver al club en todo su esplendor. Todos demos lo mejor, ¡hay que hacerlo! Se ha hecho en años anteriores, ¿cuál es la diferencia si Louis no está ahora? Al final, el club no era todo sobre Louis, es estar los unos con los otros, y mientras estemos juntos en este nuevo obstáculo, todo saldrá bien.
Todos se animaron con las palabras de la cánida, quien se sonrojó al ver que su frase motivó al club. Era una sorpresa, incluso para el carnero que sonreía mirando a la muchacha. Tal vez y no era tan tímida como creía serlo.
La loba asintió, y la menor suspiró, prosiguiendo:
──No tengo mucho por hacer, disculpen. Pero si alguien pudiese colaborar para darme detalles, estaría más que agradecida. Ahora, por favor, vuelvan a lo suyo. Legoshi...
El lobo por fin reaccionó, saliendo de su trance para mirar a su amiga. Todos veían con atención la escena.
──¿Necesitas algo?
──... Acómpañame de regreso a mi salón, por favor.
Se escucho el clásico uhhh por parte de los miembros del club, menos por parte de Juno, quien seguía viendo algo enfadada a la zorra.
Y era algo gracioso que ahora todos veían la escena de esa forma cuando apenas hacia segundos todos celebraban las palabras dichas por ____.
──Bueno, no queda mucho más por hablar ──dijo Pina, dando media vuelta a la vez que ambos carnívoros salían del club ──Muchas gracias por todo, Amh... ¿Riona? Bueno, no importa. Es un gusto trabajar contigo.
──Ah, sí ──Forzó otra sonrisa, y tuvo un pequeño espasmo con su rodilla, que de nuevo controló con un pellizco ──. Espero... Amh... Todo resulte bien, Pina-san. Y, por favor, llámame ____.
──¿Qué te llame? Oh, sí, con gusto lo haré cuando pueda ──Guiñó un ojo, sorprendiendo a la prota ──. ¿Me das tu número?
──Wow, qué directo. No ──Sonrió ──. Ahora, con permiso. Tengo clases ahora mismo-...
Dio media vuelta, y de nuevo le levantaron la falda.
Empezaba a considerar la idea de empezar a llevar pantalón a la escuela, todo sea por que ese estúpido carnero no le haga nada más de eso.
──¡Legoshi! ──Gritó la chica, mientras que salía. El lobo tardó en reaccionar antes de levantarse y seguirla, caminando a un lado suyo.
──¿Ahora qué pasó? ──Preguntó, mirando a su amiga que estaba demasiado furiosa.
──¿No te diste cuenta? ──La menor frunció el ceño, sorprendiendo a su amigo ──Ese tal Pina me ha faltado el respeto. No lo toleraré...
──Disculpa, estaba centrado en otra cosa, no pude ayudarte ──dijo, apenado ──. En serio, lo lamento, ____. Prometo que no volverá a pasar de nuevo, no si puedo evitarlo.
──Gracias ──dijo aún con una expresión preocupada ──. Y... ¿Qué te ocurre? Te noto muy... distraído. Me estás poniendo nerviosa, sabes que no me gusta ponerme nerviosa.
──Ha... surgido algo ──Dijo, rascando su nuca ──. ¿Has oído del fantasma que según acecha la escuela?
──Legoshi, no me digas que crees en fantasmas ──Rió por lo bajo, con una mueca de burla ──. Es más que obvio que es falso... No me preocupo mucho por eso, ¿sabes? Hasta no ver no creer.
──Uh... Sí, era algo más ──dijo, antes de callar ──. Perdón, no quiero hacerte perder el tiempo. ¿Te cambiaron de cuarto, por cierto?
──... Sí ──Contestó, mirando al techo con una notable mueca de disgusto ──. Yo... Umh... La zorra blanca y la pastor alemán que estaban compartiendo cuarto conmigo ya pasaron a la universidad. Le cedieron ese cuarto a un par de nuevas chicas, y me mandaron en el piso más alto, sola, y sin vecinos de cuarto ──se encogió de hombros ──. La vieja bodega, en otras palabras. Quería invitar a Haru a compartir, pero no permitían que una carnívora y una herbívora durmieran juntas. Así que, bueno, ahora... Es eso.
──Lo siento.
──No, no ──negó con las manos ──. No te preocupes. Está bien para mí... Ese par era muy ruidoso. Y, me siento mejor sola. Así evito hacerle daño a alguien.
──No creo que sea razón para sentirse mejor ──Mencionó el lobo con cierta amargura en su tono ──. Al contrario, es... triste...
──Nah, es normal ──Giró la cabeza hacia atrás, para ver mejor a su amigo ──. Te acostumbras... Aunque, igual estar sola mucho tiempo me aburre y a veces me aterra la idea de estar en donde fue la vieja bodega, sola, sin nadie...
──¿No era mejor que compartieras cuarto con Misha, la de tu club? ──____ sintió un escalofrío por su espalda, y mostró una sonrisa apenada ──Digo, se conocen.
──Ah, sí... creo que no le agrado. ¡Cambiemos de tema! ... A-a-además, igual quiero que me digas qué pedo con el club. ¿Por qué Juno me miraba con tanto odio?
Buena salvada, ____.
──A-ah, bueno... Pues... ──Se veía tenso, como si la menor hubiese abierto una vieja herida.
Suspiró, conocía a Legoshi y tardaría en contestar. Además, ya estaban muy pero muy cerca de su salón.
──Sí, no es necesario que me expliques ──Se detuvo, mientras daba media vuelta y alzaba la mirada dado a la estatura ──. No sé ni para que te pedí acompañarme. ¿Ha pasado algo...? Hoy estas... muy distraído.
──... No es nada ──dijo, y dio media vuelta ──. Buena suerte organizando lo del club, supongo. Te veo más tarde.
La menor bufó algo alterada, mientras seguía su camino a su salón.
Le costaba soportar la mirada de los animales machos que por allá pasaban. Inhaló y exhaló aire, calmándose. Aceleró el paso hasta que entró al aula, sentándose hasta el fondo, aprovechando que habían muy pocos de sus compañeros y de que no había llegado ningún docente.
Nadie la vería en el fondo, y eso le hacía calmarse, solo un poco.
🦊
Ya era de noche. A la luz de la luna, miraba con cierta pena el estrellado cielo nocturno. Tenía las luces apagadas, y estaba reposando su cabeza en el balcón. Miró hacia abajo, aguantando las fuertes ganas de llorar.
Seguía extrañando a Louis, y le seguía preocupando el cómo se comportaba Legoshi. Y, también, se sentía tensa con el tema de ser el centro de atención últimamente. Desde que empezó a usar ropa más coqueta, hasta fingir tener más de un novio, se habían vuelto muy incomodas sus conversaciones con cualquier animal. En más de una ocasión le habían hecho propuestas, pero, si era tan zorra, ¿cómo coño decía que no podía tener una noche? Cerró sus ojos, secando las lágrimas, jugando con una enredadera que bajaba por su ventana.
──... ¿Eres ____? ──Miró con sorpresa a aquel perro de color amarillento, quien sin más había entrado a su cuarto sin tocar. Se levantó algo asustada.
──¿Disculpa?
──... ¿Eres ____...? ──Volvió a preguntar, y la contraria temió lo peor, tragando saliva y buscando alguna excusa.
──¿Qué... necesitas...? ──Intento no titubear. El contrario le tomó la muñeca, cosa que asustó a la fémina, quien le iba a golpear hasta que escuchó sus palabras.
──¡No sé dónde está Legoshi! Oí una llamada de él, y no quiero creer que está mal, ¡Pero he visto que las luces del fondo están encendidas! Sé que se llevan muy bien, ____, ¡por favor, ayúdame!
Abrió sus ojos a la par ──¿L-L-Legoshi está en problemas?
El contrario asintió, mientras que ____ tomaba su mano para salir de las habitaciones de mujeres, bajando las escaleras con tanta prisa y corriendo a cuatro patas hasta el fondo del instituto. Fue rápido, demasiado, más porque la menor usó sus cuatro extremidades al andar. Llegó hasta al fondo, temiendo lo peor y rogando por que nada malo hubiese ocurrido.
Tardó en frenar, provocando un drift con el que rodó, solo para sujetarse de sus muñecas en el piso y que ambos miraran a un Legoshi a punto de morir en el suelo.
──Oh, mierda ──Susurró la menor, acercándose hasta su amigo, y desatando sus manos.
──¿_-____? ──Preguntó el lobo, la menor le tapó la boca con su otra mano, usando las garras de la otra para cortar la cuerda..
──Estás malherido, no hables ──Dijo, suspiró ──. No respires demasiado, provocarás una hemorragia.
──¡Oh, no! ¡Legoshi! ──El can se acerco a él ayudando de igual forma a la muchacha a desatarlo ──¿Q-qué te pasó? ¿E-estás bien?
──Sí, estoy bien... ──El lobo se levantó, dejando a sus dos amigos en el suelo ──No sé qué me haya atacado...
──Legoshi, nunca te has metido en problemas ──La contraria sacudió su uniforme al levantarse ──. Por favor, si necesitas algo, dímelo-...
──Sí, creo que tendré que irme ──Ambos canes abrieron sus ojos sorprendidos ──. Es peligroso para mí y para ustedes que yo siga acá...
──... No me jodas. ¡Dime qué coño pasó! ──Exigió ____, azotando sus pies en un berrinche como si de una niña se tratase ──Si podemos hacer algo, ¡no dudes que lo haremos! ¡Pero ten los huevos para decirnos tus problemas!
Jack estaba en un costado, aguantando las lágrimas sin prestar mucha atención a lo que decía la mujer. Solo pensaba en Legoshi. Solo en él.
──Quizás no vuelva dentro de mucho ──dijo, con mucha seriedad ──... ____... Umh... Me da pena pedirte esto específicamente a ti, pero... Cuida de Haru por mí, ¿sí?
──¿D-d-disculpa...? ¡N-n-no seas cobarde! ──Lágrimas empezaban a salir por su rostro ──Odio que hagas esto... Es como si... no quisieses que formase parte de tu vida. ¿No te importo?
──____, Jack ──Les miró de manera seria, ignorándola ──. Son... lo mejor que me ha pasado. Por favor, díganles a todos que fui a ver de un familiar lejano. No quiero meterles en problemas...
Dijo, para salir de allá subiendo la barda y empezando a correr. Jack se acercó, tratando de alcanzar a su amigo en un intento fallido.
____ analizó el lugar. Sea lo que fuese que haya pasado, sabía que tenía que ver alguien del club de teatro.
¿Ahora cómo le explicaba las cosas a Haru?