Camine lentamente. Sabiendo exactamente qué era lo que estaba a punto de hacer.
Ha sido solo un año.
No podía seguir soportándolo.
Observe a la lapida que estaba enfrente de mí, leyendo las letras grabadas en ella.
Sherlock Holmes.
Ignore las lágrimas que parecían estar permanentemente en mis ojos y estire mi brazo hacia mi bolsillo.
El peso de la pistola se sentía inmensamente más grande de lo que usualmente lo hacía.
Respire profundamente.
Aún si él no podía oírme, tenía que decir las palabras que había planeado cuidadosamente.
-“Hola Sherlock, tiempo sin verte. Necesito decir algunas cosas antes de que me vaya. Acabo de mandarle un mensaje a Greg, así que no tengo mucho tiempo. En la azotea dijiste que la gente deja notas, así que eso es lo que estoy haciendo.” Escuche un golpe en alguna parte detrás de la lapida, pero lo ignore. “Yo siempre negaba cuando las personas decían que nosotros éramos pareja porque yo era hetero. Lo era. Ahora no estoy seguro…¡Ja! Caí enamorado de la persona que no puede amarme de regreso. Maldita ironía. Como sea, yo solo quería que supieras que te amo, Sherlock. Joder, siempre te ame y ahora voy a unirme contigo. ¡Soy un maldito cachorro! Siguiéndoteatravés del infierno y de regreso. Oh bueno, ¡el amor hacequehagamos locuras!”
Cerré mis ojos, eleve la pistola hacia mi pecho y jalé el gatillo, pero algo empujo la pistola el último segundo y fallé.
Abrí mis ojos y vi a Sherlock, lagrimas corriendo por su rostro, gritando cosas frenéticamente mientras que hacia presión en mi herida. No podía ori lo que él estaba diciendo, pero mis parpados se sentían muy pesados…
Me sentía tan pesado, tan soñoliento…
-“Adiós Sherlock…”
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Enrede mis brazos alrededor de mis piernas y las junte con mi pecho mientras lloraba. Sollozos atormentaban mi cuerpo.
El no recordaba.
El no podía recordar.
Tal vez el nunca recuerde.
Tal vez el nunca vuelva a ser mi John.
Llore más fuerte.
Sentí que alguien tocaba la puerta del armario donde me estaba escondiendo y me senté derecho mientras se abría.
Era John.
-“Hey, ¿Estás bien? Te seguí cuando vi que te fuiste y, estúpido seré, pero te veías, oh…” Miro hacia mis ojos y noto lo rojo que estaban.
-“Estoy bien.” Mentí mientras me levantaba en mi altura completa y observaba al pequeño hombre que estaba frente a mí.
-“No me mientas Sherlock.” Me dijo con su voz que tanto había extrañado.
Me rompí.
Lloré y lloré y lloré.
John se quedo allí mirándome boquiabierto por unos segundos antes de jalarme en un abrazo.
Cuando deje salir todas mis lágrimas las seque y mire hacia John quien tenía sus propias lágrimas.
-“¿Qué está mal?” Le pregunte, con un tono de voz que detonaba pánico.
-“¿Qué es lo que te he hecho?” Murmuro mientras que las lágrimas caían por su rostro,
-“John, tú no has hecho nada. Es lo que yo te hice de lo que me arrepiento.” Le dije mientras que resistía la urgencia de quitar las lágrimas de su cara.
-“Sherlock…¿Por qué estoy aquí?” Preguntó John curiosamente. Aun no le había dicho acerca de su…(me estremecí), suicidio.
-“No lo entenderías…”Me fui callando poco a poco. El ya no me conocía, ¿Cómo entendería el hecho de que se suicidaba por mí? ¡Demonios, ni yo lo entendía todavía! Bueno, en realidad eso un poco mentira…
-“Explícamelo de todas maneras.” Me dijo más que preguntando.
-“Necesitamos regresar a tu habitación.” Le dije mientras que abría las puertas del closet y caminaba con el de regreso a su habitación.
-“¿Entonces me dirás?” Me pregunto mientras que caminábamos, atrayendo miradas extrañas de las enfermeras que pasaban a nuestro lado.
-“John…No puedo.” Le dije tranquilamente mientras que nos deteníamos fuera de su habitación. Me acerque para abrir la puerta, pero el bloqueo mi mano.
-“Por favor…” Me susurro mientras que me miraba con esos ojos…esos malditos ojos de cachorrito que eran tan amables y cariñosos…no. ¡Detente! Aparte la vista y mire mis pies, que de repente se volvieron MUY interesantes.
-“John, yo…John por favor…no me hagas…No puedo…John por favor…” Tartamudeaba en busca de las palabras que podrían detenerlo de que me hiciera contarle. Era muy difícil…Yo solo…¡NO podía!
-“Bien.” Dijo el moviéndose de la puerta. Libere el aliento, que no sabía estaba conteniendo y abrí la puerta.
La habitación estaba vacía así que senté a John en su cama y le pase la portátil que había sido olvidada.
-“Si quieres que te diga…Necesito que leas estos primero.” Dije, apuntando hacia nuestros antiguos casos. No nuestros antiguos casos, míos y de John, este no era John, mi John.
-“¿Por qué?” Pregunto, ciego como siempre.
-“Te ayudara a entender, y esperemos a que traiga de regreso tu memoria.” Conteste mientras me sentaba en la silla al lado de él, mis dedos debajo de mi barbilla en mi “posición de pensar”.
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Busque en mi bolsillo y saqué la llave.
Desbloqueaba la puerta del gran cuarto marrón que estaba frente a mí.
Era mi palacio mental
Era más como una casa, solo utilizaba un palacio porque…Mycroft estaba…en lo correcto. ¡Amaba ser dramático!
Entre y di una rápida mirada a la realmente-muy-familiar habitación.
Era un pasillo blanco realmente grande con puertas a ambos lados. Parecía no terminar, al contrario se extendía al infinito.
Pero cuanto más avanzaba más cerca me parecía ver una puerta al final.
Pero no podía alcanzarla.
Oh, bueno. Yo estaba aquí por una razón diferente.
Pase frente a docenas de puertas y me detuve en la que yo estaba buscando.
La manija estaba oxidada por el poco uso y prácticamente tuve que estamparme contra la puerta para abrirla.
No había estado aquí en…veamos tengo 30 así que…22 años.
Observe al letrero que colgaba de la puerta antes de entrar.
Emociones.
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-“¿Sherlock?” dijo la voz que me saco de mi palacio mental.
-“¿Si John?” Conteste automáticamente, aún estaba un poco preocupado por el estudio sobre mis emociones por él y todo.
-“¿Todo esto realmente ocurrió?” Lo observe a él y alrededor del cuarto. Un día completo debe de haber pasado porque tenía ojeras bajo sus ojos como si hubiera estado leyendo todala noche, lo cual hizo. Demasiado atrapado en las historias de muestras vidas como para dejar de leer.
-“Si.” Conteste simplemente. Si entraba en detalles él podría comenzar a dudar.
-“Y-yo acabo de leer umm…-Reichenbach Fall.” Susurro en voz baja. Le di una mirada preocupada, ¿Acaso él recordaba?
-“John-“ él me interrumpió.
-“¿Cómo es que estas vivo? ¿Por qué volviste? ¿Por qué saltaste? ¿Dónde te estabas escondiendo?” Me bombardeo con esas preguntas en una voz de curiosidad. No la rota de…mi tumba esa mañana.
-“Pelotilla debajo del brazo, los francotiradores te hubieran matado en un árbol cerca de mi tumba.” Conteste respondiendo 3 de sus 4 preguntas.
-“¿Qué hay acerca del porque volviste?” Me pregunto otra vez.
-“John…No puedo…” La culpa que había tratado de controlar en mi palacio mental surgió en cuanto el me observo. ¡Él no tenía idea de lo que esto me estaba haciendo! ¡No había estado en casa en días, el casi muere, él no sabíaquién era yo, él dijo que me amaba y no lo recordaba y yo apenas había caído en cuenta de que lo amaba y no podía contarle!
-“Por favor Sherlock.” Dijo más que preguntando.
Me rendí.
-“John, lo que estoy por decirte…desearía que tu pudieras escucharlo. Me estaba escondiendo en un árbol cerca de mi tumba todo este tiempo. Moriarty tenía francotiradores sobre ti, las Señora Hudson y Lestrade. Si no hubiera saltado él te hubiera matado, pero si tu morías entonces yo nosería capaz de seguir viviendo por mi cuenta. No podía dejar que me vieras, pero yo no podía soportar no verte, así que yo estaba ahí cada vez que tu visitabas mi tumba. Sobre ese tiempo vi lo roto que te volviste, lo que sin saber te había hecho. Entonces, hace un par de días viniste a mi tumba…con una pistola. Tú me dijiste esto:
“Hola Sherlock, tiempo sin verte. Necesito decir algunas cosas antes de que me vaya. Acabo de mandarle un mensaje a Greg, así que no tengo mucho tiempo. En la azotea dijiste que la gente deja notas, así que eso es lo que estoy haciendo.” Escuche un golpe en alguna parte detrás de la lápida, pero lo ignore. “Yo siempre negaba cuando las personas decían que nosotros éramos pareja porque yo era hetero. Lo era. Ahora no estoy seguro…¡Ja! Caí enamorado de la persona que no puede amarme de regreso. Maldita ironía. Como sea, yo solo quería que supieras que te amo, Sherlock. Joder, siempre te amé y ahora voy a unirme contigo. ¡Soy un maldito cachorro! Siguiéndote a través del infierno y de regreso. Oh bueno, ¡el amor hace que hagamos locuras!”
“Entonces pusiste la pistola en tu pecho y cuando estabas a punto te jalar el gatillo, yo trate de empujar lejos la pistola, pero tú ya habías jalado el gatillo. ¡No pude detener la bala…y ahora tu amnesia es mi culpa!” Me atragante un poco al final, lagrimas corrían libremente por mi rostro.
John estaba observándome, confuso y triste. Él no sabía que hacer desde que no sabíaquién era yo, o al menos no realmente, pero él estaba triste porque yo acababa de romperme frente a él. En los últimos días mis paredes, que yo había construido para protegerme, se habían venido desmoronando, y yo necesitaba alguien que viniera y me sacara de entre los escombros.
Pero la única persona que podría hace eso, mi único verdadero amigo, no sabía quién era yo. Parece que me he quedado atrapado debajo de las piedras caídas.
-“Sherlock lo siento tanto…” Dijo John mientras su voz se apagaba, no realmente seguro de que decir.
-“No John, yo lo siento. Yo hice esto, y ahora yo no puedo arreglarlo. No creo que puedas recordar. Los doctores dijeron que si tu no recordabas después de un par de días nunca lo harías. Tal vez yo yo no soy la persona que puede ayudarte.” Le susurre en voz baja. Él no sabíacuánto dolor me causaba decirle eso. Nadiesabía lo mucho que dolía, y la única persona que podía tener una idea no podía recordar, y él debe tomar eso como una bendición.
-“Sherlock por favor… ¡estoy tratando de recordar! Existen cosas ahí que yo sé, es solo que todo está…borroso.” Dijo más para él mismo que para mí.
-“¿Qué necesitas de mi John? Hare cualquier cosa, yo solo…quiero que recuerdes.” Mire abajo, hacia mis pies.
-“Sherlock…no lo sé.” Contesto categóricamente.
Suspire y me levanté.
-“Voy a hacer algo de té, ¿quieres algo?” Estaba saliendo más porque necesitaba algo de espacio, pero el té era una buena excusa.
-“Umm…café, negro, 2 de azúcar.”