CONNOR
—Mañana regresas a casa—comenta mi prima para sonreírme amablemente— es solo por esta noche.
Me encojo de hombros.
—No pasa nada—bajo la mirada a mis piernas las cuales se encuentran tapadas por la cobija blanca— creo que es mejor estar acá.
Eso último la hace fruncir el ceño.
—¿Por qué lo dices?
No digo nada.
No debí haber dicho eso en voz alta.
—Nada, nada.
—Connor..
Bufo con la boca para agarrar el control remoto y poner un canal cualquiera en la pequeña pantalla que está al frente de mi. Hago que le estoy prestando atención y me doy cuenta que ella no dice nada mas, por el rabillo del ojo veo que agarra su cartera y comienza a dirigirse a la salida de la habitación. Esta vez decido verla.
—No te preocupes, cris—doy una leve sonrisa— será solo una noche.. estaré bien.
La pelirroja pecosa asiente con la cabeza para después despedirse con la mano y cerrar la puerta detrás de ella. Suelto aire de mi boca y dejo caer por completo la cabeza en la almohada para mirar el techo.
Me siento muy confundido y eso me molesta tanto.
Y con confundido no me refiero a que no sepa que es lo que me gusta y quiero, porque eso lo sé desde que tenia 11 años. Cuando mi familia lo supo no me dio miedo ni el por qué sentirme avergonzado. Yo he salido con chicas y solo he tenido una novia en mi vida, y la verdad que en su momento si la quise y le tuve mucho cariño. Yo me sentía bien, me sentía bien al estar en una relacion con ella. Abby me hizo muy feliz y me enseño muchas cosas, pero, todo tiene su final.
Ella se enamoro de alguien más.
Dolió como la mierda pero pude dejarla ir. Era lo mejor para ambos.
Meses después iba a fiestas y me liaba con chicos, no tenia nada que perder. La pasaba bien, muchas veces se me venia ella a la cabeza y decaía, pero de a poco fui alejándola hasta que ya no me hacia sentir nada mas. Por supuesto que siempre será alguien especial para mi, quedamos como buenos amigos. Yo no la culpaba por haber terminado nuestra relacion, ella jamás me fue infiel, simplemente que conoció a alguien más y las cosas cambiaron.
No podía exigirle a su corazón.
Como dice la maravillosa Selena Gómez: The Heart Wants What it Wants.
Desde Abby no me he enamorado otra vez, de ninguna otra chica y de ningún chico.
Así que, me molesta sentirme confundido porque yo no soy así. Yo siempre tengo las cosas claras y se perfectamente que es lo quiero hacer, la mayoría del tiempo me entiendo a mi mismo y no dudo. Pero esta vez.. claramente no me está pasando eso.
Yo a Nick siempre lo he querido. A ver, somos amigos desde muy pequeños y nuestra amistad siempre ha sido real y fiel. Siempre nos hemos apoyado y estado ahí el uno para el otro, él y yo siempre hemos conectado bien. Jamás tuve ninguna otra intención con él, es que ni siquiera se me pasó alguna vez por la cabeza.
Como dije antes, yo andaba en otra, y él.. también. Nicholas tuvo un momento de su vida en que se la pasaba saliendo con chicas de allá para acá, me las mostraba en fotos y algunas veces hasta sus conversaciones íntimas. Iba a fiestas y regresaba muchas veces ebrio o golpeado, Ángeles y yo lo sanábamos algunas veces ya que él mismo no podía por los dolores de las heridas y así continuaba la historia. A él en ningún momento lo noté distinto hacia mi y eso me dejó claro que nunca me vió y ni me ve de esa manera.
Igual yo no quería tener algo con él, pero sin embargo su actitud me dejaba claro las cosas.
Además, sería muy extraño ser más que un amigo para él ¿no? Eso más bien podría joder nuestra amistad. Y no quiero que eso llegue a pasar, no lo puedo perder.
¿Y entonces por qué cada vez me importa más? ¿Por que me molesta ver a Margaret hablando con él? Si siempre me ha dado igual el verlo hablando con otras chicas. Margaret nunca me cayó bien, desde que es amiga de mi hermana e iba a nuestra casa. Todo ese tiempo la ignoraba y me iba de ahí, no soportaba escuchar sus chismes. Puedo sonar como un viejo amargado pero simplemente estoy siendo sincero. Esa Chica no me da buena vibra y se lo he dicho a Ángeles, pero ella no lo ve así.
En fin, es muy raro cómo estoy reaccionando por Nick.
No puedo ponerme así.
No puede pasar nada entre nosotros.
No va a pasar nada entre nosotros.
Creí que este viaje sería mucho mejor.. pero no, pasan miles de cosas y son más malas que buenas.
Nick.
Nick joder.. se que en el fondo está mal por la amenaza que le hicieron esos tipos. Lo quiero ayudar y lo voy a ayudar, solo que no se cómo.
Es una situación tan delicada.
Maldición.
Mañana tengo que hablar con él respecto a ese tema, cada vez se acerca más el 4 de julio y necesitamos tener una estrategia para que todo salga bien y todos estén sanos.
¿Por qué todo es tan complicado?
Necesito dormir, no puedo pensar tanto ahora.
Apago la Tv y cierro los ojos.
(...)
Mike abre la puerta y se adentra a la casa. Ya me dieron el alta y en estos momentos nos encontrábamos llegando a casa. Esta mañana el doctor dijo que yo ya estaba bien y en condiciones para continuar con mi vida básicamente. Me aconsejó en que me hiciera unas pruebas para ver a que cosas soy alérgico además del picante para estar precavido y no volver a repetir una situación como la anterior.
Michael sonrió con tanto alivio cuando me vió vestido con la ropa que su hermana me había traído la tarde anterior y ya levantado de la cama. En el camino escuchamos un poco a John Mayer, mientras veíamos cómo las calles estaban iluminadas por el sol.
Cruzo el umbral de la puerta para caminar hasta el living y verlos a todos ahí con una sonrisa mientras me ven. Hay en una mesita dos cajas de pizzas sin probar y unas cuantas latas de Coca-Cola. Ya era mediodía, por eso la comida.
Mis ojos se dirigen hacia él.
Nick se levanta del sofá y me observa con diversión.
—Quisimos recibirte con una buena pizza—dice.
Sonrío de lado y me acerco más. Mi hermana se lanza hacia mi para abrazarme, le recibo el abrazo pero sin embargo termino dándole unas palmadas en la espalda. Me cuesta demostrar cariño físico hacia los demás.
—Basta pitufa—la separo suavemente de mi— ni que hubiese vuelto de la tumba.
Ella frunce el ceño como siempre ante el apodo pero cuando pienso que va a responder algo, no lo hace, solo suelta un risita.
—Déjate querer bro—musita Dylan agarrando un pedazo de pizza para verme— todos aquí te queremos.
Levanto una ceja.
—¿Tú me quieres?—me señalo con el índice— ¿a mi?
El moreno se encoge de hombros.
—Te tengo aprecio.
Agarro también un pedazo de pizza para llevármelo a la boca.
Que hambre.
—¿Por qué?—pregunto con la boca llena.
—Porque haces feliz a mi amigo, y eso me hace feliz a mi.
Su comentario me hace tragar con dificultad pero intento disimularlo. Aunque creo que se dieron cuenta los demás que comen y nos escuchan con atención. Sin poder evitarlo, llevo mi mirada hacia Nick quien me mira rápidamente para después ver a su amigo.
—¿En donde estaba este lado cursi del señor Dylan?—inquiere con su sonrisa burlona.
Su sonrisa..
No.
Basta Connor.
—Siempre estuvo ahí, solo que no había salido—responde su amigo.
Me fijo de que Ángeles le da una mirada, una mirada distinta a las que siempre le da a él. Sus ojos lo miraron como con ¿ternura?
Mmmm.
—Gracias por la bienvenida, chicos.—doy una leve sonrisa para tomar un poco de Coca-Cola.
—¿No eres alérgico al maíz, o si?—pregunta divertida Cristina.
Miro el maíz en la pizza y rápidamente finjo como si recordara que si lo soy. Me llevo ambas manos al cuello como si me lo estuviese agarrando con desesperación.
Dylan y Nick me miran confundidos y eso enseguida me hace soltar una carcajada.
—Idiota—murmura mi querida hermana.
Al fondo oigo la risa de Margaret.
—No es gracioso eh..—dice Nick.
Levanto ambas manos en señal de paz.
—En vez de hacer tonterías, ¿podrías buscar servilletas en la cocina?—Mike me mira.
Asiento lentamente con la cabeza para dirigirme hacia la cocina. Una vez que llego a esta miro hacia los lados en busca del rollo de papel pero no lo encuentro. Abro unas gavetas pero nada.
—¿Donde rayos..?
—Está dentro de aquel estante.
Volteo para verlo señalar al estante con su dedo. Le hago caso y lo abro para ver al rollo ahí.
¿En que momento me siguió?
—Gracias.
Nick asiente con la cabeza y se queda ahí parado, sin decir nada. Su mirada está fija en mi y no se por qué, me pone un poco..¿nervioso?
Khe.
—¿Qué pasa?—pregunto para rodear la isla y acercarme a la salida.
—Solo quería saber si..—se aclara la garganta— si todo está bien entre nosotros.
—Eeh.. si, ¿por?
Mueve la cabeza y hace un ademán con su mano.
—Nada.
Doy tres pasos hacia afuera pero mis pies se detienen nuevamente. Me llevo una mano a mi capucha para bajármela y dejar a la vista mi cabello todo despeinado. Volteo a verlo nuevamente desde mi lugar. El sigue ahí, esta vez mirando por la ventana mientras varios rayos de sol caen en su rostro haciendo que sus ojos oscuros se vean un poco claros.
—Hey—lo llamo.
Gira su cabeza hacia mi.
—Gracias por haberme ayudado ayer.
Se encoge de hombros.
—Siempre te ayudaré.
Bajo la mirada a mis sucias Converse negras. De la nada siento su perfume cerca de mi y veo sus pies detenidos al frente de los míos. Aún sin subir la mirada me doy cuenta que no está tan lejos de mi.
—Yo también, Nick—suelto para encararlo.
Mi mejor amigo me mira con detenimiento para terminar dando una sonrisa boca cerrada.
Me paso una mano por el pelo.
—¿Al final que pasó con el dinero?
El bufa y se apoya del marco de la puerta.
—Ayer le conté a mi padre—dice esta vez con el rostro serio— es un..
—Idiota—termino de completar.
Asiente con su cabeza.
—Y.. ¿Qué te dijo?—me cruzo de brazos.
—Nada, silencio puro—sonríe con ironía.
Voy a hablar pero llega Margaret y sus ojos van de nick a mi.
—¿Por qué tardas para llevar las servilletas?
Ruedo los ojos y jalo ambas manos de ella para dejarle el rollo y cruzarme de brazos.
—Ahí tienes—sonrío falsamente— ya te puedes ir.
—Gracias—me devuelve la misma sonrisa.
Nick se acerca a nosotros.
—¿Que es lo que pasa entre ustedes dos?—pregunta con curiosidad.
Ella lo mira y niega con la cabeza.
—No lo sé,—se encoge de hombros— pregúntale a tu amigo.
La miro serio.
Esta chica me va a sacar las canas que aún no tengo. De inmediato se me ocurre una idea, sin evitarlo levanto una ceja divertido.
—Con gusto puedo responderlo—la sonrisa falsa regresa a mi. *se truena los nudillos en su mente* —Margaret quiere salir contigo y yo le dije que no, que tú jamás la verías así.
El pelinegro abre más sus ojos y se lleva una mano al cuello para rascarlo. Sé que se ha puesto incómodo. Al frente mío la castaña me fulmina con la mirada, sus mejillas se han puesto un poco rojas.
—Si me disculpan—dice ella para regresar por donde vino. Al fondo se escucha la risa de Dylan y mis primos que están hablando entre ellos.
Me quedo quieto en mi lugar y regreso la mirada hacia él después de verla desaparecer por la puerta del living.
—¿Qué fue todo eso?—me pregunta frunciendo un poco su ceño, esta vez se para en donde estaba ella antes. —¿por qué lo hiciste?
Oh vamos.
—¿Me vas a decir que no es la verdad?—lo miro obvio— se lo tenía que decir al frente de ti para que lo creyera de una vez.
Menea su cabeza. Sus ojos oscuros me miran con un brillo distinto al de hace unos minutos, esos minutos antes que llegara ella.
—¿Tú qué sabes qué es lo que yo quiero?
Suspiro.
—Te conozco, Nick— lo miro de pies a cabeza y sonrío de medio lado— y los he visto a ambos desde que llegamos. Se que te cae bien pero no la miras de la misma forma en la que ella te mira a ti.
El abre su boca pero nada sale de ella. La vuelve a cerrar y vuelve a entrar a la cocina para sentarse en una de las sillas del mesón.
Cierro los ojos unos segundos para terminar sentándome a su lado, sin decir nada. Puedo ver su mirada clavada en sus manos, las cuales están apoyadas al frente suyo en el mesón. Esa mirada me hace pensar que está pensando.. pero, ¿que tanto piensa?
—¿En que piensas?—le pregunto después de un minuto de silencio.
El se gira en su asiento para quedar al frente de mi y verme.
—Si, tienes razón—traga saliva— pero eso no quiere decir que tenías el derecho de hacérselo.
Lo sé, no debí.
—Después hablaré con ella—respondo girándome hacia él también.
—Connor..
—¿Si?—frunzo el ceño.
—Hay algo que quisiera decirte, —toma una respiración. Nick se ha puesto.. ¿vulnerable?— Es algo que lo saben muy pero muy pocas personas y no me siento bien al no decírtelo.
Su comentario ha hecho que se me ponga la piel de gallina. ¿Que mierda? ¿Por que tengo miedo a lo que me vaya a decir?
Al principio creí que tal vez habría una posibilidad de lo que sabemos, pero, ahora...
No tengo idea de que es.
—Dime.
Mi mejor amigo se levanta de la silla para hablar pero justamente llegan Ángeles y Dylan interrumpiéndolo. Ambos siguen riéndose de no sé qué chiste y se acercan a nosotros.
—Oh—habla mi hermana— perdón.
—¿Interrumpimos algo..?—dice el moreno.
Yo los fulmino con la mirada.
—Oh no—comienzo a decir con sarcasmo— solo estábamos aquí admirando las ollas.
Dylan ríe y ella rueda los ojos.
—No pasa nada—dice Nick viéndolos— después te digo—esta vez me mira a mí para darse vuelta y salir de la cocina.
Antes de salir yo también de la cocina, los mato con la mirada a ambos quienes me miran apenados y les digo:
—Muchas gracias.
-•-•-•-•-•-•-
Buenas buenas! ¡¡I'm back!! Espero que les haya gustado el cap. Me encanta escribir a Connor, lo amo.
¿Que opinan?
Nos vemos bebasss.
-P 💗