Migajas de tu paso por mi vida siguen reproduciéndose en bucle en medio de mi rutina... Y por mas que intento huir de ellas, a veces se convierten en una lluvia que me baña sin dejarme escapatoria.
Cada día te siento un poco mas lejos y a veces me asusta que todo termine convirtiéndose en un recuerdo difuso de un presente que no llegué a sentir demasiado.
Lo peor es que se que ocurrirá. Algún día dejaré de ser consciente del sabor de tus labios, de la forma de tu sonrisa, del brillo de tus ojos, del calor de tu piel... Algún día eso será tan lejano como un sueño que apenas recuerdas al despertar. Y me asusta. Aunque deteste admitirlo.
Ya no somos y ya no seremos. Es lo correcto. Es lo mejor. Pero aun así temo dejar de saber de vos, que algún día pierda incluso la ubicación de tu existencia y terminemos siendo dos entes totalmente ajenos y desconocidos.
¿Las uniones que alguna vez fueron permanecen en algún rincón del universo? Lo nuestro, ¿seguirá existiendo en alguna realidad paralela? ¿Hay algún universo en el que realmente seamos nosotros así como alguna vez lo soñé? ¿O verdaderamente nunca fuimos mas que una ilusión unidireccional?
Tengo tantas preguntas y solo una certeza: que nuestros caminos seguirán alejándose a pesar de todo. Y esa certeza me da paz, pero también me moviliza todos los sentimientos. Es increíble lo mucho que me haces sentir incluso a la distancia, en el silencio y sin verte. Y supongo que esto no es mas que rezagos de lo que fue nuestro amor.
Que locura todo esto y que locura haber cambiado tanto desde el adiós. Que locura y que mágico haber crecido tanto lejos de ti. Supongo que estoy en el camino correcto así que seguiré andando rogando que este recuerdo se haga cada vez mas difuso y que de a poco deje de molestarme incluso no recordar tu mirada.
Ojalá también sigas caminando.
Ojalá tambien encuentres tu camino.
Y ojalá sea el correcto.