FINAL PARTE 1/2
Hoy es el gran día, por fin Sheyda se convertirá en mi esposa y no puedo estar más feliz por ello. Supongo que después de tanto esperar por mi elegida, llegó la indicada, llegó la que no solo sería mi pareja destinada, si no también se convertiría en el amor de mi vida.
Aún recuerdo lo frustrante que era pensar que tenía 30 años y aún no la encontraba. Pero ahora lo entiendo, supongo que la vida estaba preparando a la mujer más increíble y maravillosa de todas.
Y ahora verme aquí parado frente al altar me hace saber que toda la jodida espera ha válido cada segundo.
Mis emociones cada vez son más fuertes, mis padres y la madre de Shey están hasta el inicio. Carlo y mi hermana están sentados en la segunda fila, acompañados de Ross y Alexander, Harley y Landon están en la misma banca. Hay muchos amigos de mi familia al igual que la de mi elegida. Observo como el hermano de Sheyda me hace una señal, esto quiere decir que ya vienen.
El sacerdote que está detrás de la mesa principal me sonríe, tratando de tranquilizarme.
Comienza a sonar la canción que mi pequeña y yo elegimos como la entrada nupcial. "Kiss me" de Ed Sheeran.
La veo venir hacia mi tan hermosa y perfecta como siempre. Sonriendo y mostrando sus perfectos hoyuelos mientras les sonríe a todos. Es tan indescriptible lo que estoy sintiendo en este preciso momento que, sin darme cuenta, siento como mis mejillas se humedecen.
Mi futura esposa viene muy bien acompañada, al lado izquierdo tiene a su padre el cual sonríe con orgullo, y al lado derecho viene Alessandro, el cual también sonríe, pero como si le doliera despedirse de su hermanita. Mi pequeña Amori viene de pagesilla, alzando la cola del vestido.
—Zarek, te entrego lo más valioso que tengo, por favor cuida de ella, pero sobretodo hazla feliz para toda la vida —pide el Enzo al entregarme la mano de su hija.
—Esa será mi misión —contesto tomándola.
—Zarek, mi hermana es lo más importante que tengo en la vida, te ruego que cada día te tu vida la hagas sonreír. Es necesario que saque a relucir esos preciosos hoyuelos —habla su hermano depositando un pequeño beso sobre su mano.
—Te lo prometo. —Mi visita no se dirige hacia él, mi vista está en la castaña de ojos ambarinos junto a mí —. Estás hermosa. —Susurro por lo bajo.
—Gracias, cariño, tú estás más que hermoso —guiña el ojo.
—Hoy estamos aquí reunidos para unir en matrimonio a, su, majestad Zarek Floros Loannidis, y a su, majestad Sheyda Bianchi Greco, ¿Vienen por su absoluta voluntad? —Pregunta mirándonos a ambos.
—Claro que sí. —Contestamos al unísono.
La ceremonia continúa hasta que se llega el momento importante.
—Por favor digan sus votos —pide amablemente.
—Yo Zarek te tomo a ti, Sheyda, como mi esposa. Prometo esforzarme todos los días de mi vida por verte feliz. Convertirme en lo que tú desees con tal de verte sonreír. Prometo ver todas las veces que sean necesarias "Orgullo y prejuicio" contigo. Leer juntos todos los libros de amor que quieras. Serte fiel, estar juntos en la pobreza y en la riqueza. En la salud y en la enfermedad. Y lo más importante, ayudarte a escribir nuestra propia historia de amor.
—Yo Sheyda te tomo a ti, Zarek, como mi esposo. Prometo cantarte todas las noches, hacer una pintura de ti. No obligarte a ver "Orgullo y prejuicio" para aprendernos los bailes. Prometo estar contigo en momentos difíciles, serte fiel, en la riqueza y en la pobreza. En la salud y en la enfermedad. Y lo más importante, a superar cualquier tipo de maldición que caiga sobre nosotros. —Ambos ya tenemos nuestros anillos puestos.
—Si alguien que tenga algún impedimento para que esta boda no se llevé a cabo, que hable ahora o calle para siempre —nadie habla—. Que lo que Dios a unido que no lo separe el hombre. Puedes besar a la novia.
—En esta vida y en las que siguen. —Comienzo la oración
—Estaremos juntos sin importar nada. —Termina mi esposa.
Se pueden escuchar los aplausos por toda la iglesia, pero en este momento solo somos ella y yo. Poco a poco nuestros rostros se van juntando, y es así como decido acabar con la separación, uniendo nuestros labios en un profundo beso. En nuestro primer beso como esposos.
Después de recibir todas las felicitaciones por parte de la familia y amigos, nos dirigimos al salón principal, en el cual se hará la recepción.
—Con ustedes, sus majestades reales —escucho a un hombre decir al mismo tiempo que entramos.
—¿Estás lista para bailar nuestro primer baile como recién casados? —Pregunto tomándola de la mano.
—Más que lista, cariño, además te tengo una sorpresa.
—¿De qué se trata? —La tomo por la cintura.
—Ya lo sabrás —se separa de mí. Me jala ligeramente y me acerca a la pista.
Comienza a sonar una canción que desde hace mucho Sheyda ponía, si no me equivoco se llama "Crazier" de Taylor Swift. De pronto escucho como mi pequeña comienza a cantarme al oído.
—Te juré en el altar cantarte canciones todas las noches, y bueno hoy es la primera —explica.
—No sabes cuánto te amo —cierro los ojos para seguir disfrutando de su voz. De alguna manera es muy tranquilizante.
—Y yo a ti, ojos bonitos.
A esto se le llama felicidad, me siento totalmente pleno.
Siento un golpecito en la pierna, al mirar hacia abajo me encuentro con mi hija. La tomo entre mis brazos y hago que baile con su madre y conmigo.
—Creo que ahora somos una verdadera familia. —Comento mirando a los ojos a la mujer de 1.60 frente a mí.
—Lo somos, amor, lo somos y así será hasta el final de nuestros días.
Ahora solo falta la coronación de mi Sheyda y por fin estaremos comenzando nuestra propia historia, sabemos que este no es el final, si no el inicio de toda una vida por delante.
Hola!!! Cómo pueden ver el final se va a dividir en dos, y aquí está la primera parte. Mañana será el final.
Por cierto el epílogo será publicado el día sábado.
Espero que les guste y lo disfruten.
Les mando puras vibras bonitas ✨✨❤️.
Evelin C.