-Monedas de Cobre- Libro 2 Sin Nombre

33 Cantero Zhang (I)

La habilidad artesanal en estas piedras era realmente buena, los grabados eran exquisitos y realistas. Estas bestias eran tan altas como una persona y las más pequeñas llegaban hasta la cintura. Miraban hacia abajo o al frente y sus ojos estaban medio abiertos o completamente abiertos, todos mirando hacia la puerta de entrada. Además, en los pies o en la espalda de estas bestias, en cualquier parte que hubiera un espacio libre, había esculturas de Xuangui o Tiangou En resumen, había tantas que era casi sofocante.

En cuanto una persona ordinaria entrara a esta casa, quedaría completamente aterrada por la vista en este patio.

No podría decirse si realmente funcionaba su efecto de repeler el mal, pero de todos modos, eran suficientes para ahuyentar a la gente.

Esto era un poco extraño...

Era entendible que un cantero confiara en apilar esculturas en su patio para demostrar sus habilidades, pero era interesante que hubiera puesto creaciones tan terroríficas. Xuan Min miró con cuidado las losas del suelo debajo de los pies de las estatuas y luego levantó la mano para tocar la escultura más cercana...

Juzgando por el musgo que había crecido en las juntas de las losas, estas esculturas habían sido colocadas hace no mucho tiempo en el patio, probablemente en los últimos dos meses. Algunas de estas esculturas habían sido labradas recientemente y, aunque era muy sutil, se podía ver que las cinceladas habían sido hechas con prisa.

Si realmente quería atraer visitantes, no habría puesto esas esculturas incompletas en lugares tan vistosos.

"¿Por qué estás parado como tonto y no avanzas?" Xue Xian murmuró. "Me voy cocinar hasta la muerte..."

Xuan Min ni siquiera lo miró, jugueteó con la cabeza de dragón con su pulgar y dijo. "Hay varios arreglos en el patio, si levantó el pie y camino, me temó que no encontraras un lugar para acomodarte antes de sofocarte."

"Habla lo que quieras, pero no juguetees con mi cabeza." Xue Xian se quejó débilmente. "Ya me siento lo suficientemente mareado, deja de sumarle al caos..."

Xuan Min lo miró, este ancestro tampoco había dicho algo incoherente y no era una exageración decir que su piel de dragón estaba a punto de consumirse por el calor. También era afortunado de que fuera Xuan Min el que lo sostenía, si fuera reemplazado por alguien más, como Jiang Shining o Lù Nianqi, lo habría aventado llorando y temiendo por su vida.

Se sentía como si hubiera derramado una taza de café hirviendo en su mano y resultaba que incluso se había escurrido en la piel tierna entre los dedos.

No sabía cómo esta criatura malvada no tenía fiebre, pensando que siempre buscaba los lugares más fríos, no pensaba que otra cosa sería mejor, por lo que simplemente cubrió las escamas de Xue Xian con los dedos de su otra mano.

El desorientado Xue Xian dejó salir un suspiro bastante confortable y volvió a mover su cuerpo automáticamente, poniendo su cabeza en la punta de los dedos de Xuan Min.

No odiaba que el otro tocara su cabeza en este momento.

Xuan Min se quedó sin palabras, levantó el píe y caminó alrededor del círculo de esculturas del patio.

No había puesto atención antes cuando habían entrado, pero ahora que estaba más cerca descubrió que, dispersas esporádicamente entre esas bestias aparatosas, había unas piedras del tamaño de un dedo.

A simple vista y por la distancia, parecían como restos de escombros, pero realmente eran pequeñas estelas de piedra. Las piedras labradas de esta área eran famosas, no sólo por su artesanía excelsa y meticulosa, sino también por la habilidad de atreverse a tallar cualquier forma. Incluso cuadros pequeños de piedra podían ser labrados meticulosamente.