estan en el corazon

25 4 0
                                    

Nico abrió los ojos lentamente, le ardían de tanto llorar, aun sabiendo que su padre estaba muerto aun esperaba que le diera el abrazo que le daba al despertar, tendría que vivir con eso, vivir para cumplir la promesa.

-primero: comer-se dijo a si misma lanzándose a la orilla del río.

Se hundió ligeramente para tomar dos rocas, las llevo hasta donde creía que había peces escondidos, empezó a chocarlas, los peces alarmados huyeron directo a la red que había puesto Nico.

Poco después se dedico a encender una fogata como le había enseñado su padre. Empezó a comer cuando vio que estaba medio crudo como a ella le gustaba, miro las katanas.

-itakashimas…-murmuro.

Cuando era más pequeña olvidaba bendecir la mesa, su padre siempre le recordaba hacerlo…

Al terminar de comer apago la fogata y arrojo las cenizas al lago, tomo las katanas y camino por la orilla del lago, sabiendo así que podría llegar algún lado o morir en el intento.

Un ruido seco, sordo y estruendoso, reventó sus orejas. Inmediatamente se arrincono a una saliente, el temor invadió su cuerpo e intento con todas sus fuerzas ser aquella saliente.

-ku-bachan fallaste no tendremos almuerzo hoy-se quejo la voz de una niña.

-cállate maki, estoy mareada eso es todo- refuño una mujer.

-debe ser que te intoxicaste con tu propia comida-se burlo un hombre.

-¡callate baka!-grito ella, luego se oyo un golpe y seguidamente un chillido.

-ku-bachan das miedo-la voz de un chiquillo se oyó.

-podria…-murmuro un niño.

Se oyo un disparo, aqeul pájaro había caído a sus pies, su corazón dio un vuleco, temblando y sudando frio alzo la vista.

-¡hola!-una pequeña rubia sonriente la miraba colgada de aquella saliente.

-¡ah!-grito y u fantasmita salió de su boca.

-todos reacionan asi…-dijo mientras de una voltereta terminaba de pie frente a ella.

-¡baka!-grito el hombre-¡¿Por qué será?!

-cállate viejo-mascullo sacándole la lengua.

-tu… ¡demonio!- empezó a perseguirla.

Nico se había recobrado y no sabia que sucedia.

-gomen…tengo...esto…que…ellos…¡bakas!-grito la mujer y empezó a perseguirlos.

-¡wow! Case uno grande…-un pequeño de cabello marron empezó a examinar aquel pájaro muerto.

-gomen, son muy escandalosos-se acerco un pequeño rubio- soy shino.

-¡yo león!- rugió imitando a un león de verdad.

Nico, por primera vez en días rio.

-¡yo soy maki!-grito la pequeñacon una  sonrisa que hizo sentir una sensación calida a nico.

-nico-dijo.

-ellos…ser…abuelos…inmortales-dijo león que se había puesto a hacer una fogata.

-ku-bachan y…-maki interrumpió a shino con un estruendoso grito.

-¡viejo senil ka!-se escondió detrás de nico- nee-chan ¿tienes hambre?

Su estomago trono.

-si- respondió tocándose la panza.

-¡no enciende!- se alarmo león.

-tranquilo león-san, es realmente fácil-dijo ka sentándose a explicarle a los 3 pequeños.

Nico apartada observo aquella explicación, algo sucedió y todos se rieron, una sensación de vacio se apodero de ella, laas ganas de llorar le entraron de una forma inimaginable, algo en su coranzon crujió, como papel desgarrado.

-tranquila nico-chan-ku la abrazo por el hombro- fuieste hija de yuki y de A, esas katanas son la prueba de cuanto te aman.

-¿pero estoy sola?-murmuro encogiéndose sobre si misma.

-no lo estas, ellos siempre estarán en tu kokoro-le toco el corazón- además, nos tienes a nosotros.

Nico alzo la mirada hasta su rostro, una sonrisa pura estaba dibujada en el rostro de aquella mujer rubia.

-¡ku-bachan!-grito maki-¡nee-chan! ¡A comer!

-vamos, creo que nos llaman-ku movio la cabeza en dirección a la fogata.

-¡hi!-asintio sonriente.

 ------

1/4 continuemos...

saki-chan fuera...

Tan solo una guerra.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora