Capítulo 3|Límites.

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POV Vesta.

La brecha se...

Miré hacia el cielo. Se veía intacta, sin ninguna grieta. ¿Cómo pasaba esto?

—Esto iba a durar más años —musité y Dalai negó—. Es imposible que...

—Claro que no, y creo que tiene relación con el grupo de allá —explicó Dalai apretando sus puños—. Es una bruja quien lo encabeza.

—No hay nadie más —insistí.

—Al parecer apareció una nueva —respondió suspirando—. Hay que mantener la alerta naranja activada. Debemos tener precaución, si se abre lo suficiente comenzará a succionar todo a su alcance.

—¿Cuándo empezó? —me dirigí a Néstor.

—Hoy apenas.

Se supone que esa brecha tenía que seguir sellada, faltarían años para que algo así pasara.

—Tendremos problemas si ese grupo tiene poder de su lado —comenté a Dalai—. Y si una bruja los encabeza, entonces es más peligroso el pensar que quizá ella conozca de hechizos.

—Créeme, seguro que si. Probablemente hizo abrir la brecha más.

Bufé irritada.

—Hay que unir al consejo.

•••

—Son los reyes, búsquenla y acaben con esto —propuso Micaela.

—Hasta tú sabes que no podemos solo lanzarnos, ellos deben tener tácticas o planes para nuestra llegada —atajó Dalai.

—¿Por qué la brecha se abrió? —pregunté a Jordan, quien estaba mirando fijamente a la mesa. La alzó ante mi pregunta.

—La bruja debió hacer algo, no lo sé.

—Una bruja —completé apuntándole—. La última que apareció fue April.

Shawn apretó los labios viendo hacia otro lado pensativo.

Finn, Jordan, Micaela y Shawn no tenían idea alguna de qué movimiento hacer. Ni siquiera Dalai y yo... Atacar a ciegas sería imprudente.

¿Pero también cómo parar la brecha si no actuábamos?

Esa brecha se había creado hace 11 años. Al principio parecía inofensiva, pero después fue succionando y creando anomalías en el reino. Fue un caos enorme, una resultante de la energía que DarkBan dejó y la lucha por erradicarla de la energía pura.

Esa fue la marca de años de peleas.

Alguien irrumpió repentinamente en la sala. Fruncí el ceño al ver a Connor, quien se veía muy agotado apuntándonos con terror.

—¿Qué hicieron? ¿Qué pasó? —cuestionó—. Es cierto que no conté del grupo pero todo está...

—Para, no hicimos nada. ¿Qué ocurre? —preguntó Dalai.

Apuntó al techo.

—Su brecha ahora es nuestra brecha también —atacó y todos nos vimos velozmente.

No podía ser...

—El senador quiere verme y quiere respuestas. ¿Qué rayos le voy a decir? —cuestionó preocupado—. Las personas de la Tierra que estuvieron aquí cuando esa cosa emergió y después se pasaron a su casa de nuevo me han contado cosas. Necesito escucharlas de ustedes para saber hasta que grado alarmarme.

—Eso succiona cosas y personas por igual —respondió Finn parándose de su silla—. El radio parece no importar a medida que crece. Lo que entra ya no regresa, lo único que sale es energía oscura a su paso. Contamina e infecta cuando toca tierra —apreté los labios asintiendo—. Es algo que no tiene forma, y la purificación elemental parece no funcionar. No le afectan ataques físicos. Además de que la realidad empieza a alterarse, donde puede haber un edificio, quizá después haya un carro.

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