DRAIDER [DRACO MALFOY] PAUSADA

17. a labyrinth?

17. ¿UN LABERINTO?

_________________________________________❖ ── ✦ ──『✙ - ✙』── ✦ ── ❖

Eider Blishwick.

Corrí rápidamente hacia Cedric quien se encontraba de espaldas. Me paré de puntillas y le tapé los ojos.

Rió. — Hmm, huele a lluvia. — fijo antes de volver a reír. — Eres mi mejor amiga.

Quité mis manos de sus ojos y bufé por lo bajo.

— Es que tu olor es fácil de reconocer, And.

Giré los ojos. Cedric y Draco eran los únicos que me decían diminutivos de mis otros dos nombres. Lo odiaba.

— ¿Cómo estás? — pregunté sentándome junto a él.

— Cedric está enamorado. — uno de sus amigos habló. Mi mejor amigo le dió una mala mirada.

Alcé una ceja — ¿Ah, sí?

— Sí, solo que no quiere que nadie lo sepa. — siguió diciendo otro de ellos.

Cedric le tiró uno de los libro que tenía en la mano.

— Está enamorado de Cho Chang. — dijo el otro.

Abrí los ojos con sorpresa — ¿Es en serio?

Cho Chang era una chica de quinto año, su casa era Ravenclaw, era linda. Era justo la chica que se había acercado a mí aquel día en la biblioteca.

Mi mejor amigo asintió — Pero creo que se trae algo con Potter. No lo sé muy bien.

Miré hacia un grupo de chicas, en éste estaba ella mirando fijamente a Cedric.

Arrugué las cejas — No sé, yo no creo que sea así.

Me levanté de dónde estaba sentada y le sonreí al chico antes de empezar a caminar hasta el pequeño grupo.

— ¡Eider! ¿a dónde vas? — preguntó con temor. Reí y seguí mi camino.

Ellas reían pero pararon al verme frente a su grupo. Rápidamente cambiaron su cara a una de nerviosismo. Sí, podía jurar que yo era la única Slytherin que se les había acercado. La chica no me agradaba, pero le gustaba a mi mejor amigo.

— Ven conmigo. — le dije sin expresión alguna. No tenía ganas de poner una falsa sonrisa.

Ella me miró con confusión y después volteó a ver hacia una de sus amigas. Ésta miró hacia Cedric quien nos observaba fijamente y asintió.

Me dí la vuelta y Cho me siguió.

— Aquí la tienes. — pasé junto a él mientras le susurraba en el oído. — Agradece mi esfuerzo.

Él me lanzó una mirada tipo «Me las pagarás», pero después rió.

Le hice señas a sus amigos de que los dejaran solos. Por mi parte, caminé hacia mis amigos. Ellos se encontraban en la sala común.