-Monedas de Cobre- Libro 2 Sin Nombre

22 Niño ciego adivino (V)

Xuan Min se puso en cuclillas y miró con detenimiento el lodo estancado del suelo que estaba lleno de hojas secas.

Lu Nianqi se puso en cuclillas a su lado para ver lo que hacía. Este niño no era muy grande, pero era claro que era un niño solitario, probablemente debido a su infancia y a su convalecencia. Estaba acostumbrado a resolver las cosas solo y no depender de otras personas para que lo ayudaran. Incluso si no supiera como hacer algo, se quedaría mirando el proceso para prender, como si de esta manera se sintiera un poco más aliviado.

"¿Qué estás mirando?" Jiang Shining miró al niño caprichoso y no pudo evitar preguntarle.

Lu Nianqi no levantó la cabeza y habló con rigidez. "No lo sé." Sus ojos de perro estaban casi ciegos y no veía ninguna pista.

Xuan Min estiró su mano y tocó unas cuantas hojas secas enfrente de sus pies, como había envuelto sus manos cuidadosamente con el lino de sus ropas, realmente era imposible que tocara las hojas muertas directamente. Lu Nianqi también tocó una hoja seca en secreto, pero no sintió nada excepto el lodo. Miró sospechosamente el perfil de Xuan Min, mientras se limpiaba los dedos con la orilla de sus ropas en silencio y se levantaba.

En sus ojos, las acciones de Xuan Min eran realmente un poco misteriosas y no bastaba con imitar su postura. Estaba acostumbrado a cuidarse y estar a la defensiva, y también tenía unos cuantos problemas de rebeldía adolescente. Siempre pensaba que había muy poca gente creíble y confiable en el mundo, la mayoría de las personas eran villanos egoístas o grandes tontos con agua en la cabeza.

El villano era como él mismo y el gran tonto era como su padre que había muerto joven.

Admitía que era una persona desalmada. Antes, le había gritado a Xuan Min y a los otros para que lo acompañaran, pero en este momento, empezó a preguntarse si Xuan Min era un farsante, incluso miró hacía el bote techado que estaba en la costa, planeado regresar a él si las cosas no resultaban y esperar hasta que la neblina se dispersara antes de adentrarse en la isla.

Como resultado, cuando retiró la mirada, se encontró con la mirada de Jiang Shining.

Después de todo, todavía era joven y, por un momento, Lu Nianqi se sintió culpable, pero rápidamente miró hacia atrás y recuperó su confianza. Jiang Shining ya había desviado la mirada, esperando que Xuan Min hablara.

Xuan Min se había puesto de pie en silencio, desempolvo suavemente su ropa de monje, que realmente no se había manchado, y sacó un talismán de su manga.

"..." '¡Otra vez!'

Lu Nianqi no pudo evitar poner los ojos en blanco. '¿Acaso este monje planea usar sólo este talismán hasta que se muera?'

Inesperadamente, esta vez Xuan Min no intentó manipular algo con el talismán, cuando sacó el talismán, también sacó un cerillo largo. Cubriéndose del viento, la neblina y la nieve helada, encendió el cerillo.

Jiang Shining y Lu Nianqi estaban parados a su lado y los dos lucían confundidos mientras él prendía el talismán con el fuego.

A los ojos de estas dos personas, este talismán amarillo brillante no era diferente del papel amarillo que se usaba como ofrenda para los muertos. Se quemó excepcionalmente rápido y, pronto, se retorció hasta formar un rollo de papel carbonizado.

Xuan Min agitó su dedo y el rollo de papel comenzó a caer instantáneamente convertido en polvo fino, que fue volado hacia adelante por el viento.

Jiang Shining y Lu Nianqi lucían como dos codornices, una grande y una pequeña, con los ojos fijos en sus mangas y mirando como las cenizas caían en el bosque. Conforme el polvo del papel cayó al suelo, una hilera de huellas de pasos apareció de pronto en el suelo lodoso donde antes no se veía ningún rastro.