ᴠᴀᴍᴏs ʜᴀᴄᴇʀʟᴏ ᴊᴜɴᴛᴏs • ᴛᴇᴡᴋᴇsʙᴜʀʏ.

|ᴏɴᴇ|

Es raro pero podre resolverlo pero necesito ir a donde ella murió.

Londres.

Me puse unos guantes blancos a combinación de un vestido celeste muy claro pero sin sombrero.

Agarre mi maleta y salí de mi casa sin despedirme.
Sabía que no me dejarían marchar así que me debo ir sin que sepan.

Me encontré con Enola en la estación de trenes pagando el boleto y la asuste.

-¡Holmes!- Exclame mientras que esta ponía una cara de horror.

-¡Jane!- Me reprocho esta mientras que yo reía.

Las risas cesaron cuando se escucho a una señora enojada.

-¡Es mi hijo el que esta en ese tren, no puedes avanzar!- Dijo esta señora mientras que una señora mas mayor se disculpaba.

Nosotras estábamos ya en el tren cuando vimos a un hombre de sombrero marrón mirándose cómplice con la señora mayor.

No prestamos mas atención y fuimos a nuestros asientos.

Usualmente Enola era la mas cuidadosa con lo que hacía y decía pero yo... Bueno yo simplemente hacía las cosas en el momento y eso fue lo que paso.

Nos encontrábamos hablando cuando de repente un bolso arriba de nosotras se movio repentinamente.

-Enola, Esa cosa se mueve y por mucho que lo ignore es raro.- Solté pero luego note como una navaja sale de la tela del bolso y de este sale un muchacho con el cabello un tanto largo, Un traje blanco y adorable rostro, aunque bueno ignoren eso.

-¿Quien eres?- Pregunto Enola cuando este se sentó 

Esto fue así, le dijo a Enola que era un caballero muy raro y saco a la conclusión de que no lo era ademas menciono un parecido entre Enola y su tío, fue divertido.

Yo permanecía callada hasta que escuche su presentación.

-Soy El Vizconde Tewkesbury Marqués de Basilwether.

-Lo que eres es un tonto- Dijo Enola haciendo que yo soltara una risa.

-Pude realizar un ágil escape...

-No escapaste, Un hombre de sombrero marrón esta buscándote por todo este tren y si te ve aquí nos  meteras en problemas

-Y por eso abandona el vagón- Luego no escuche nada mas de este Marqués ya que se fue dandose pequeños alimentos a el mismo

Aunque no fue mucho ya que volvió con una rostro horrorizado diciendo que el hombre que lo perseguía estaba cerca

-Esta revisando cada vagón y me va a encontrar- exclamó este

Enola y yo salimos del vagón ella muy exaltada.

Yo solo pensaba en ese muchacho de cabello color miel y labios finos.
Hasta que escuche un grito en el vagón a lo cual fui sin pensar con una castaña detrás mio que me decía que no debía meterme.