II. Los ojos astutos en la distancia

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Al amanecer BaekHyun fue incapaz de levantarse tan enérgico como solía ser, estaba tan cansado que por un momento olvidó que cada hora importaba. Es más si podía recabar la suficiente información podrían irse antes de lo acordado y esa idea le pareció lo suficientemente buena como para levantar sus miembros y ducharse. Para cuando dejaron la habitación BaekHyun se desprendió del único sitio seguro y cada pasillo, cada paso que daba lejos le devolvía la sensación fría y extraña que no abandonaba su cuerpo. Se pregunta mentalmente si KyungSoo es capaz de percibir tal cosa o sólo son alucinaciones de un miedoso y quejica como él.

"Es delicado, por eso debemos tener cuidado. Sólo sígueme la corriente". Dice KyungSoo en un susurro muy bajo que sólo alcanza a escuchar él. No dice nada y sólo camina a su lado, van a una que parece taberna. KyungSoo se vuelve todo sonrisas, se dirige al mostrador y con un encanto inusual pide recomendaciones. "Somos forasteros y queremos probar algo exótico pero no tan exótico como para sacrificar nuestros estómagos o baños". Y la mujer que atiende se ríe un poco antes de recomendar algunos platillos, BaekHyun decide no participar para no arruinar la magia. Son llevados a una mesa y de camino atrapan unas cuantas miradas curiosas, que pronto dejan de ser hostiles en el momento en que son encantados por lo radiante y confiado que luce KyungSoo y lo tímido que él luce. BaekHyun supone que esto les hace saber que son personas inofensivas lo que hace que les dejen de prestar tanta atención. KyungSoo estuvo hablando en voz alta sobre distintos sitios de España, cordilleras, ciudades y sobre unos cuantos datos culturales que un apasionado turista encontraría encantadores, BaekHyun asentía y hacía unas cuantas preguntas de vez en cuando.


Cuando llegó la comida, simplemente KyungSoo comenzó a ser una máquina de chistes y anécdotas que hicieron que BaekHyun se relajara genuinamente. Para cuando pagaron y salieron del sitio pudo sentir que ya no era esa clase de miradas de un desconocido sino de una cierta indiferencia y confianza. KyungSoo camino por la calle continuando con un muy pintoresco monologo sobre la importancia del contacto con la naturaleza mientras intercalaba en ello datos sobre animales exóticos que se podían encontrar alrededor de la península ibérica. El encanto en su voz y la confianza con la que hablaba le hice reconocer en aquel joven la razón por la que era tan reconocido en la organización. Las personas en el pequeño pueblo pronto reconocieron en él un turista interesado en los viajes y la adquisición de conocimiento y no un peligro para su integridad. BaekHyun encantado con la charla comenzó a sentir sobre su nuca una mirada fija, atrapó unos ojos celestes a la distancia. El joven apartó la mirada rápidamente pero para entonces BaekHyun ya era capaz de grabar en su memoria su rostro y lo extraño de su comportamiento. La única forma en que podría acercársele era solo una y aunque detestaba ese método no tuvo más elección.

Él y BaekHyun se sentaron en unos bancos que quedaban relativamente cerca de donde el joven rubio de ojos celestes curiosos estaba. Era la locación perfecta para su plan, quizá KyungSoo era capaz de encantar con lo soberbio de su lenguaje académico, el conocimiento amplio y la sensación encantadora que ejercía en los demás pero BaekHyun era un experto en el muy poco comprendido arte de la seducción y la aparente inocencia peligrosa.


Mientras KyungSoo continuaba con su monólogo biólogo, BaekHyun no despegó sus ojos del joven rubio y cuando este no pudo soportarlo alzó la mirada y sus miradas se conectaron. Una sonrisa coqueta y los ojos del joven rubio se iluminaron y un leve rubor en sus mejillas se asomó. No le despegó la mirada y aunque el joven comenzó a sentirse tímido, BaekHyun no cedió y cuando menos lo creyó el joven comenzó a acercarse mientras ocasionalmente veía a los lados. Para cuando estuvieron cerca, BaekHyun entendió que se avecinaba la parte más complicada: atrapar su completa atención.

"Me parece que no los he visto por aquí nunca". Menciona con un tono de voz muy encantador, KyungSoo detiene su charla y le dedica una sonrisa juvenil, mientras niega con la cabeza. "Por alguna razón siento que te he visto antes, sólo que no sé dónde". Ahora se dirige a BaekHyun, este no piensa demasiado en sus palabras, está más que acostumbrado a esa clase de frases. Ha escuchado exactamente eso una innumerable cantidad de veces, y sabe exactamente que responder.

"Yo por el contrario no lo creo, digo, me sería imposible olvidarme de alguien como tú" y el joven se sonroja con fuerza, antes de frotarse un poco el cuello. Mientras aleja la mirada. KyungSoo un poco confundido decide invitarlo a sentarse junto a ellos, quizá el método de su compañero sea extraño pero fue efectivo a la hora de conseguir el primer informante.

"¿De dónde vienen?" preguntó con interés y para entonces BaekHyun decidió que era hora de que KyungSoo pudiera encantar al joven a su lado, mientras cruzaba las piernas y veía atentamente cada facción del chico. Era muy lindo y alto, pero no era realmente su tipo. KyungSoo lo maravillo con relativa facilidad, le contó sobre sus viajes por Europa, por el este sur de América y sus profundo interés en el descubrimiento de nuevas especies. "Ah ya entiendo, eres un biólogo" afirma luego de un momento y KyungSoo cuenta sobre su tesis posgrado que consistía en la investigación de alguna nueva especie y establecer todos los parámetros científicos que le permitan estudios posteriores.



BaekHyun pronto vio una sombra a lo lejos, que se movía entre ventanales de una construcción ni tan refinada ni tan simple. Sus muros altos eran quizá igual de altos que los demás locales, lo distinguible eran los ventanales protegidos y la extraña sensación de que los muros estaban más reforzados que cualquiera de los demás lugares. Casi podía ser una fortaleza, casi como si hubiera algo que estuviera siendo ocultado dentro. Y la sombra que se movía de un sitio a otro con cierta lentitud por alguna razón le hizo sentir que podría encontrar algo. Por eso se apresuró a maquinar una buena razón por la que podría ausentarse e investigar por sí mismo, sin despertar sospechas ni del joven rubio ni de KyungSoo.

"Dios santo, debo ir al baño, iré a la habitación y vuelvo enseguida", menciona con vergüenza y urgencia fingida. El tono y la mirada con la que lo dice le confirman a KyungSoo que se trata de una necesidad genuina por lo que no tiene reparos en permitir que se aleje a pesar de que no es permitido y menos en un sitio como ese. Pero KyungSoo no cree que BaekHyun se encuentre en problemas y además ya había pescado un pueblerino que podría ser de mucha ayuda. Vuelven a la charla y decide no preocuparse demasiado.


BaekHyun que siendo precavido decide ir en dirección a la posada por si en algún momento a KyungSoo se le ocurre voltear a verlo, cuando está seguro de que es imposible que siguiera sus pasos, toma otro rumbo y haciendo rodeos estratégicos logra acercarse cautelosamente a la edificación. Camina casualmente mientras trata de no ver muy detenidamente el sitio, logra rodear el lugar, detrás de él no hay muchas personas por lo que logra asomarse en una de las aberturas bajas de una puerta, ve un par de botas negras, pesadas, anchas que caminan con paso militar. Deja de caminar y se detiene justo dando la espalda, supone esto pues no ve los cordones, y gusto cuando frunce el cejo, se voltea repentinamente y la puerta se abre. BaekHyun finge que busca algo que se perdió en el suelo.

"Rayos, era tan costoso" se murmura a sí mismo, como reprimiéndose a sí mismo, casi convencido de esto levanta la cabeza cuando escucha un carraspeo. Encuentra efectivamente a un tipo con toda la pinta militar que imaginaba, el corte de cabello muy bajito, casi calvo, una mirada fría y una respiración muy lenta. "Estaba buscando un anillo que justo se me cayó aquí", menciona con una mirada de absoluta pena. El hombre lo ve como si no creyera nada de lo que decía. BaekHyun estaba muy nervioso, casi arrepentido de dejarse llevar por su propia curiosidad.

"Señor, había alguien espiándonos. Espero sus órdenes". Menciona a la nada, e inmediatamente después se escuchan unos pasos, se acerca y una alta silueta aristocrática, de elegancia y ojos astutos lo ven con tranquilidad.


La respiración de BaekHyun se detiene por un segundo. Es él, el hombre del retrato.

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⏰ Última actualización: Oct 10, 2020 ⏰

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