19. Regreso Bailey

Start from the beginning
                                    

— ¿El Ares violento iba a salir?

—Muy seguramente —admite con ligera vergüenza. Se lame los labios mostrándose arrepentido, sus facciones están contraídas de la pena, de lo avergonzado que se siente y, tal vez de lo impotente que debe estar por contenerse tanto tiempo —. Si vas a ir al hospital deja que te lleve, no quiero que vayas caminando sola por ahí y con Phoebe, no quiero cargar en la conciencia que les pasó algo malo —le lanzo un manotazo en el hombro que lo hace reír —, ya, en serio, Ava. No quiero cargarlo en la conciencia.

—Tengo que hablar con Max. Al igual que tu no quiero cargar en mi conciencia algo que me atormente —reconozco en un balbuceo mirando en dirección a la entrada de la feria.

Familias, individuos, niños, niñas, entre otros más han venido a la feria. Cada uno con un problema diferente pero disfrutando de la feria, y cuando yo tengo un problema el cual trato de aliviar con la feria este se hace más grande más apretado, más sofocante.

—Max parece un toro, si tan solo te le acercas va a sacar todo lo que tiene albergado en el interior. No va a ser agradable lo que sea que vaya a decirte si intentas entablar una conversación con él.

—Es mi amigo, Ares, enojado o no siempre voy a estar ahí buscando remediar los problemas que lo frecuentan.

—Siempre queriendo enmendar las cosas por ti sola, es una de las cosas que te hacen ser tú —me dedica una sonrisa que no toca sus ojos —. Estaré aquí esperándote, no me moveré hasta que vuelvas.

—Si Phoebe viene a preguntar por mí, díselo —instruyo caminando hacia atrás —. Si no vuelvo en cinco minutos… Espérame un poquito más —Ares rueda los ojos al cielo por lo broma. Sacude la cabeza en una negativa suave que al culminarla se pone en marcha en busca de su auto.

Vuelvo sobre mis pasos a la feria buscando a Max, muy a mi pesar no conté con que estoy en una feria y dicho parque está lleno al tope por lo que encontrar a mi amigo de la infancia se ha vuelto una tarea difícil. Luego de unos cuantos minutos buscando montada en bancas y puestos de comida —pues Max come cuando está enojado— no obtengo un resultado conveniente así que emprendo mi caminata al estacionamiento para abordar el auto del español y que me lleve al hospital sin titubeos de por medio.

No obstante, cuando estoy acercándome veo a Ares hablar con alguien de su misma altura. La iluminación del estacionamiento me permite saber que la persona con quién habla tiene el cabello negro y la sudadera que trae es amarilla. La conversación no dura lo suficiente cuando el recién llegado se despide de él. Yo hago acto de presencia en el instante que Ares queda solo.

— ¿Encontraste a Max? —me saca de mis cavilaciones.

—No —murmuro derrotada — ¿Phoebe vino?

—No.

Tampoco le doy muchas vueltas al asunto, le envío un mensaje a Phoebe diciéndole que ya me voy con Ares. Ella sí encontró a Max y se irá con él por lo que el español y yo nos vamos.

Mi conciencia tiene paz una milésima de segundo por saber que Phoebe está con Max.

Mas, muy dentro de mí todo es una revolución.

☀️

Apenas bajo del auto de Ares en el hospital él también lo hace.

— ¿Te busco para ir al instituto?

—No, tranquilo, papá me llevará —aseguro soltándome de su mano cuando estoy por entrar al hospital. Me detengo en la puerta mirándolo sobre ni hombro —. Gracias.

— ¿El qué? —cuestiona con una sonrisa y el ceño fruncido en confusión.

—Por hacerme pasar los mejores treinta minutos de mi vida antes de que Max nos descubriera.

High School Pyrex ✓Where stories live. Discover now