✨ Capítulo 29. ✨

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—¿Cuándo nos dirán lo que tenía mi papá?

—El doctor dijo que en un par de horas, le harían la autopsia y en cuanto lo supieran, vendrían a decírnoslo —dijo él sentándose en el sillón.

Anna asintió y se recostó en el sillón, sin importarle que alguien pudiera decirle algo. Después de unas horas más, salió el doctor, con una mirada muy seria.

—Listo, hemos terminado —dijo llamando la atención de los chicos.

—¿Qué pasó doctor? ¿Qué encontraron? —preguntó Logan.

—Bueno, cuando revisamos, vimos que su sangre estaba de un color muy extraño, tomamos unas muestras y vimos que...

—¿Qué...? ¿Qué cosa vio doctor? —preguntó Anna.

—Había toxina botulínica en su sistema.

—¿Cómo? —dijeron los chicos al unísono.

—Así es... eso fue lo que encontramos.

—Pero... ¿Cómo fue que...?

—¿Qué haya pasado? —el doctor termino la pregunta de Anna—. No lo sabemos, le pediré al director del hospital que nos dejen ver las cámaras de seguridad, ahí veremos que pasó y quien fue.

—Espere... ¿Piensa que alguien le inyectó eso? —preguntó Logan.

—Es lo único que se me ocurre, ayer estaba muy bien el señor Parker y de la nada pasa esto, ¿Qué más pudo haber sido?

—¿Cuándo podremos comenzar el velorio? —preguntó Anna.

—Bueno, de aquí se lo van a tener que llevar a un lugar especial para eso, ahí mismo los arreglan y pueden velarlo.

—¿Cuándo nos lo podemos llevar?

—Mañana, tenemos que prepararlo para que se lo puedan llevar.

—Bien, estaremos aquí por la tarde —dijo Logan.

El doctor asintió, los tres caminaron saliendo del hospital.

—Logan, llévate a Anna a tu casa, yo iré con mi mamá, ella debe saber lo de Max —dijo Jocelyn.

—Claro, cualquier cosa no dudes en llamar.

—Tranquilo, lo haré —dijo y se fue a su auto.

—No tengo ganas de llegar ahora, si quieres vete tú, quiero caminar un rato —dijo Anna.

—Oh niña, estás muy mal de la cabeza si crees que te dejaré irte sola, conociéndote, te pierdes por ahí.

—Necesito estar sola un momento.

—Mira, ya sé, ven vamos al auto —subieron al auto y este comenzó a manejar.

—¿A dónde vamos?

—Vamos a un lugar donde puedas estar un rato sola, pero yo vigilándote de cerca, aunque no estaré contigo.

Anna suspiró.

—Está bien, vamos.

Después de un rato, llegaron a un lindo parque, él estacionó el auto y bajaron.

—Mira, tu puedes estar ahí quédate el tiempo que necesites, yo estaré aquí en el auto.

—De acuerdo.

Anna comenzó a caminar y llego a una pequeña banca, se sentó y comenzó a pensar, todas las cosas que había pasado junto a su padre, en todo lo que había pasado cuando despertó de aquel accidente.

⭐⭐⭐

—¿En dónde estoy? —preguntó ella mirando confundida el lugar.

—Estás en un hospital —dijo una voz masculina a su lado.

Ella lo miró, él le sonrió.

—¿Quién es usted? —su sonrisa se borró.

—¿Cómo que quien soy? Soy... tu papá.

—¿En serio?

—En serio... no... ¿No me recuerdas?

—No, lo lamento.

—Bueno, yo soy tu padre y siempre te voy a proteger.

Por alguna razón ese hombre le dio confianza, podía sentir un buen sentimiento de su lado.

⭐⭐⭐

—Ese día... no te separaste de mí ni un momento, ni siquiera cuando me puse mal, siempre estuviste conmigo —dijo y comenzó a llorar—. Nunca te alejaste de mí, a pesar de que me metía mucho en problemas, siempre estuviste ahí para mí, ¿Cómo se supone que pase mis días sin volver a verte? No puedo acostumbrarme, no puedo —sollozó—. ¡DIJISTE QUE SIEMPRE ESTARÍAS CONMIGO! ¡QUE NUNCA ME ABANDONARÍAS! Pero no... no es verdad, y no sé como salir sola en hora de adelante, ¿Cómo podré vivir sin ti ahora papá? ¿Cómo?

Logan miraba desde atrás la escena, de sus ojos caían lágrimas, esta situación era muy dolorosa para los dos, ambos estaban sufriendo muchísimo y no le cabía en la cabeza como es que les estaba pasando todo aquello. Después de unas horas, ya iban de regreso a la casa de él, Anna se había quedado dormida en el auto, cuando llegaron él estaciono el auto en el garaje, bajó del auto y luego sacó a Anna. Entro a la casa con la chica en brazos y se dirigió a la habitación de su hermana, donde la recostó en la cama.

—¿Dónde estuvieron todo este tiempo? —preguntó Tani.

—Pasaron un par de cosas Tani.

—¿Y no piensas decírmelo o que? —preguntó seria.

—No creo que sea el momento de decírtelo, además no es algo que deba decírtelo yo, esa será Anna, cuando este lista.

—Bien.

—Ahora duerme niña.

—Aún es temprano.

—Bueno, es que yo si tengo sueño, buenas noches —dijo y salió de la habitación.

Tani suspiró, ¿Qué estaba pasando?

Logan caminó hasta su habitación, una vez llegando se encerró, se recostó en su cama y comenzó a llorar, todo aquello le dolía demasiado, no sabía como sobrellevar aquello, además... ¿Cómo le diría a su mamá? Ella también sufriría, pero... ¿Qué más podía hacer? Era lo mejor, decirle, ya que en algún momento lo sabría.

⭐⭐⭐

Al día siguiente, se levantó muy temprano, bajo hasta la cocina y se preparó algo para desayunar, espero a que su mamá bajara, él mismo le daría la noticia. Después de unos minutos, escuchó que alguien bajaba de las escaleras, supuso que era ella, hasta que la vio entrar a la cocina.

—Oh Logan, ¿Qué haces levantado tan temprano?

—Mamá, tengo que decirte algo —dijo serio.

—¿Qué pasa hijo? —dijo ella.

—Es sobre lo que pasó ayer en el hospital.

—¿Qué pasó? ¿Es algo sobre Max?

—Si mamá, es algo sobre él.

—¿Qué pasó? —dijo ya comenzando a asustarse—. ¿Qué paso Logan?

—Mamá, Max... Max falleció.

Pamela abrió sus ojos a tope.

—¿Cómo? —dijo sintiendo un agujero en el estomago.

—Así es mamá... Maximiliano está muerto.

Y entonces Pamela cayó al suelo inconsciente.

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© Querido Hoyuelos por Fanny Frías. Todoslos derechos reservados.

Toxina botulínica. Más famosa como «Botox» y por utilizarse en tratamientos estéticos. Es una sustancia completamente toxica si se ingiere o se inyecta en la sangre, es completamente mortal. Basta una dosis de 10-7 gramos para matar a un hombre de 70 kilos de peso.

Querido Hoyuelos © ⭐Logan Henderson⭐| #FannyFríasWhere stories live. Discover now