LA MALDICIÓN DE UN PECADO ⚜️ HOUSE LANNISTER

c a pí t u l o 10

Cersei mira a su hijo con los ojos brillantes. No precisamente porque la agonía de su esposo le pese, sino porque sabe que todos sus malos tratos causaron cierto daño en su primogénito.

— No hay nada que perdonar. Sé que hiciste lo que creías correcto.

En el momento en que Ned Stark entró a la habitación, pudo notar como la expresión de su madre reflejaba cierto temor. Recordó fugazmente la conversación que el norteño había mantenido con ella, su advertencia había sido clara. ¿Sería capaz de hacerlo, justo ahora cuando su amigo estaba al borde de la muerte?

— Demasiado vino. —carcajeó el ciervo. Luego Ned descubrió la herida, quizá si no era tan grave aún tendría posibilidades de sobrevivir. Pero su aspecto era terrible— Apesta a muerte. Pero pude vengarme del desgraciado, le atravesé los sesos con el cuchillo. Pregunta si no, pregunta.

Renly y Barristan Selmy asintieron lentamente.

— Quiero el mayor festín para mi funeral que los reinos hayan visto, quiero que todo el mundo pruebe el jabalí que me mató. Ahora déjennos solos, quiero hablar con Ned.

— Cariño... —alcanza a decir Cersei.

— ¡Fuera todo el mundo!

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Evan empezó a preguntarse si la suerte estaba de su lado como para que casualmente escuchará las conversaciones que podían ayudarle. Estaba consciente de que la muerte de su padre traería muchos cambios, aunque nunca espero que las conspiraciones se estuvieran llevando a cabo tan pronto, mucho menos por una de las personas en las que más confiaba.

— ¿Salvar los Siete Reinos de Cersei y entregárselos a Stannis? —inquirió Renly—Tienes una extraña noción de lo que es "proteger el reino"

— Stannis es tu hermano mayor. —dijo Eddard, con obviedad.

— Esto no es sobre la maldita línea de sucesión. Eso no te importo cuando te rebelaste contra el Rey Loco, no debería importarte ahora.

Para Evan, por mucho que no le gustara admitirlo, Joffrey no le importaba mucho. Si algo malo le pasaba era porque él mismo se lo había buscado. Lo que estaba sugiriendo Renly le aterraba más que nada por sus hermanos más pequeños, por su madre, y claro, por él mismo.

— Todos sabemos que Stannis no inspira amor ni lealtad. Él no es un rey, yo lo soy. —todo tenía más sentido ahora. La disputa por el trono recién empezaba, y si Ned Stark hizo correr la voz, su familia ya no estaba a salvo— Gianna está en camino a Winterfell. Tu hijo Robb puede encargarse de ella.

— No deshonraré la última palabra de Robert derramando sangre en su casa y sacando a niños asustados de sus camas.

Rechazando rotundamente la idea de una masacre, Stark se marchó dejando a Renly con la palabra en la boca. Evan ya estaba lo suficientemente furioso como para resistirse a enfrentarlo. Si Gianna hubiese estado con él, lo habría convencido de que se marcharan sin hacer frente al asunto, pero ella no estaba así que...

— Mi padre aún no ha muerto y al parecer tú ya te estás poniendo bastante cómodo.

Renly tensó los hombros, y lentamente se giró para enfrentar a su sobrino.

— Por favor, Evan. Ambos sabemos que Robert no es tu padre.

— Y eso es tan cierto como que tú nunca serás rey. —dice, apretando los dientes— Nunca creí que serías tú quien nos traicionaría.

El menor de los Baratheon soltó una risa que hizo a Evan cerrar las manos un puños.

— No es traición querer salvar al reino, Evan.

— ¿Matando a mi familia?

Renly por un momento comprende, y se pone e el lugar del rubio. Sabe que es difícil abrir los ojos para poder ver la verdad, y en ese momento, Evan estaba tan ciego como un anciano en la oscuridad.

— Amas a tu madre, lo sé. Pero algún día te darás cuenta de quien es ella en realidad. Sólo espero que cuando lo hagas no sea demasiado tarde. —dio un paso al frente con intención de retirarse, pero antes, lo miró nuevamente con una sonrisa ladeada— Aunque ahora que lo pienso, antes de que eso pase, ya todo el mundo sabrá la verdad de su verdadero origen. Lo lamento por ti y tu preciosa Gianna.

El asombro y el miedo se vieron reflejados en la expresión del rubio. Renly confirmó en ese momento todas sus sospechas, y supo, que había dado con el punto débil de su sobrino.

Créditos de esta hermosa portada a
-venusjackson