𝑅𝐸𝐷 𝐿𝐼𝐺𝑇𝐻𝑆________𝑾𝒊𝒍𝒍 𝑩.

𝑪 𝒂 𝒑 𝒊 𝒕 𝒖 𝒍 𝒐:𝗨𝗡𝗢.

❝LA PATRIA RUSIA ES UN ASCO.❞

      Mí cabello castaño ya se encontraba por la altura de mis caderas, en este asqueroso lugar no era obligada a cortarlo. Era lo único bueno de este lugar. Han pasado tres largos años desde el día que el laboratorio fue atacado, desde entonces me tienen encerrada en una base militar aquí, en Rusia.

Este lugar es sombrío, y me causa repulsión. Únicamente puedo salir cuando soy necesitada en alguna misión, La mayoría del tiempo me encuentro en la sala de entrenamientos, donde estoy obligada a practicar varias horas la capacidad de mis poderes, defensa personal, y manejo de armas. La otra parte del tiempo me encuentro en mi "habitación" la cual más bien vendría siendo una celda, solo que un poco más cómoda. Aunque en el laboratorio tenían la gran amabilidad dé ofrecerme libros, los cuales hacían el encierro más agradable. Tres años sin pisar mi país, tres años sin saber de Ce.

Cuando llegué aquí, me informaron que los demás números fueron asesinados el día del ataque, En muchas ocasiones he deseado volver en el tiempo, y morir con ellos. Los extraño, realmente lo hago. Eran la única familia que tenía, me quejé tantas veces de ellos que no puedo evitar sentirme estúpida por no valorar la poca normalidad que me ofrecían mis hermanos.

El general Kandhis, el cual es el mismo bastardo qué vi antes de desmayarme el día del ataque, La mayoría del tiempo me dice "No te asesine porqué eres más especial, aquí tienes un propósito, somos tu familia". Sus palabras me producen repulsión, conocía sus verdaderas intenciones. Manipularme, él quería que logrará sentirme parte de su jodido juego ruso. Vendiendo la idea de lo que más deseaba, una familia. Jamás me conmovió, mi única familia era con Ce, junto a mis difuntos hermanos.

En cuanto a mi personalidad, era un jodido pedazo de hielo. No cruzaba palabras con nadie, solo lo estrictamente necesario, evitaba cualquier interacción con estas personas. 

Solo logré abrirme con alguien durante mí estadía aquí, y fue un error.

Trataba de qué mis ganas de asesinarlos y volver a mi país no salieran a flote, cosa que es más difícil de lo que creen, estos sujetos están locos. Los días siempre eran iguales, el bucle en el que vivía ya había logrado hartarme.

Las cosas en la base parecían un campo de explosivos, muchos viajaron a Estados Unidos para un intento de movida Comunista. Ni de broma pensaron en llevarme, sabían que mi lealtad no estaba con ellos. Todo cambió cuándo los aviones empezaron a llegar con el personal, entre ellos se encontraba un sujeto. El cual reanimaría mi esperanza sucumbida, aunque yo aún no lo sabía.

Fue el faro en la tormenta.