Mi Mejor Amigo #1

Extra 2

Cass se aproximó a nosotros, alegre y despreocupada, mientras todos los hombres de alrededor se hipnotizaban con su figura.

-¡Amor mío!- me saludó con una espléndida sonrisa y un cálido abrazo. Necesitaba un abrazo de mi mejor amiga, me sentía triste últimamente.

-¿Qué hay Cassie?- preguntó mi amigo, corriendo su cabello hacia atrás.

Ella deshizo el abrazo, pero seguía con su brazo rodeando mi cintura, y yo abrazandosus hombros.

-¿Qué hay contigo?- preguntó de vuelta.

-Nada, sólo intentaba pasar el rato. Me aburren éstas fiestas...- dijo Klaus extendiendo un vaso a la rubia, y ella lo aceptó con una sonrisa.

-Quizás el aburrido seas tú.- respondió y se giró hacia mí.

Auch por Klaus, tú te hubieses sentido muy mal por él. Eres muy compasiva.

-Acabo de cruzarme con Maya. Me dijo que estaba intentando contigo pero que estás en la luna...- yo hice un gesto desinteresado.

-Sabes que soy colgado...-

-Si pero, es Maya Miller... siempre me dijiste que creías que era la chica perfecta.- sí lo dije.

-Todos lo creen.- apoyó Klaus.

-Lo es... es la chica que todos quieren.-

-Le gustas Fran, hablé con ella hace una semana y me lo confesó.- yo me sorprendí por eso, yo era alguien tan corriente.

-¿De verdad?-

-Pues si mi cielo. Y fui yo quién la animó a que te hablara, y ella ahora cree que no estás nada interesada en ella...-

¿Cómo no iba a ser Cass mi mejor amiga? Ella si que era la persona que más me quería y que más se preocupaba por mí... me hubiese encantado que yo te importara al menos un poco.

-Que mal...- mi tono sonó desinteresado, no me salía otra forma. Entonces Klaus me dio un golpe en el cabeza.

-¿Quieres dejar de golpearme?- le espeté molesto.

-Es que te lo mereces ¿te escuchas?- entonces tu hermana golpeó a Klaus. -¡Oye!-

-Nadie golpea a mi mejor amigo excepto yo.- dijo abrazando mi cintura.

-Golpeas fuerte mujer ¿Vas al gimnasio o qué?.-

-Tengo mucha práctica cargando bolsas y bolsas de cuando salgo de shopping...-

Reí sin poder evitarlo, porque era cierto. Y cuando ya no sabía cómo cargar tantas bolsas, estaba yo para prestar mis brazos y comprar con ella. Aquí entre nosotros, sabes que a mi me gusta ir de compras, hubiese sido lindo ir contigo. Aunque a tí mucho no te gustara, me hibiese encatado recorrer librerías a tu lado.

-¿Estás bien?- preguntó Cass.

-Lo estoy.-

Pero claro que no me creía. Sería pésima mejor amiga si se lo hibiese creído, además yo era muy mal mentiroso.

-Ella está aquí...- cuando tu hermana mencionó esas simples tres palabras, todo en mí se puso alerta.

Comencé a mirar hacia todos lados; intentando ver ese rostro angelical, ese cabello rizado y brilloso, esas simples pero hermosas prendas que usabas, y sobre todo ese brillo de inocencia y felicidad que irradiabas.

-¿Dónde?- le pregunté cuando Klaus se distrajo en una pequeña competencia de "¿Quién bebe más cerveza?" Si hibiese estado concentrado esa noche, de seguro hibiese participado y ganado.