00. Cuando Solía Ser Nada.

Începe de la început
                                    

Él odiaba saber que su cuerpo estaba sucio, aborrecía imaginar que los gérmenes la infectaban y la corroían. Así que, una vez vuelto a la habitación, se encargaba el mismo de curarla rehaciendo sus extremidades a un estado anterior. 

Así su impureza se desvanecía. 

Otras veces, sin embargo, venía con un propósito distinto a la habitación. No sabía por qué él, con aquellos ojos sedientos, venía por la noche, ni por qué le pedía que moviera el cuerpo en posturas extrañas, pero si lo hacía, debía de tener un motivo: al fin y al cabo, era su trabajo, su razón de ser.

Él era su amo

Ocasionalmente le pedía cerrar los ojos cuando iban a saldar deudas o ver personas que no necesitaba reconocer luego, pero no era tan necesario pedírselo. 

Siempre tenía los ojos cerrados, los que ardían por sentir la luz en ellos, siendo un defecto que de joven le resultó incomodo e incluso insoportable. Por lo tanto, ha memorizado cada pasillo de ese tormentoso laberinto, y todas sus salidas. 

Pero sobre todo por la noche, no se atrevía a cerrarlos por mucho tiempo, aunque le doliera por los focos del techo, solía ser temerosa con la idea de perderse en el sueño y no despertar nunca más. 

Su hermana podría desaparecer de su lado.

Y eso era algo que no podía permitir.

...

Siempre fantasea con algo que había dejado atrás hacía años:

Lágrimas.

...

Sintió que el sudor goteaba por su frente hasta la punta de su nariz. Lentamente se lo limpió con su dedo índice, que notó que estaba húmedo. Suspiró y volvió a apoyar la cabeza en la almohada. Quizá lo que sentía ahora en el pecho era frustración. 

Los preceptos le leían de vez en cuando libros de biología y química antes de dormir, no para mimarla y evitar que leyera por sí misma, sino para que su señor no se enterara.

Lo único que se le permitía eran cuentos de hadas, y libros de primaria un poco básicos, porque pensaba que era suficiente saber lo que necesitaba, y eso no incluía lo básico del cuerpo humano, como los estímulos involuntarios que disparan sus emociones y su cerebro.

No suele saber cómo se siente ni por qué su cuerpo se comporta de formas diferentes.

Su cara no respondía correctamente, lo que hacía difícil adivinar cuándo sentía dolor, y los médicos llegaron a pensar que se trataba de un defecto causado por numerosas operaciones reconstructivas, que acabaron por dañar su sensibilidad.

Al final comprendieron que, como no había visto las reacciones de la gente en distintas situaciones, no sabía cómo reaccionar ante ciertos estímulos.

Y le pasaba con el llanto: nunca lloraba, sólo lo hacía como consecuencia de su cuerpo.

Así que llegó un momento en el que se hizo muchas preguntas: ¿Es realmente defectuosa, le ha estado mintiendo su hermana todo este tiempo, llora realmente lágrimas de sangre por los poros de la cara en vez de por los ojos, se la puede considerar un ser humano como vemos en los libros de texto?

No, tal vez no lo necesite.

En algún momento se da cuenta de que es inútil darles tantas vueltas a estas preguntas.

Además, ha visto llorar a la pequeña niña, así que la respuesta vino sola. No hay duda de que su hermana llora por los ojos cuando siente emociones muy fuertes, y como ella ha evitado esos estímulos desde niña, nunca volverá a sentir esas emociones de la misma forma. No obstante, sigue preguntándose qué pasa por la cabeza de su hermana para que llore todos los días.

La Melodía Del Silencio | BNHAUnde poveștirile trăiesc. Descoperă acum