Rubius y Willy volvieron a cruzar mirada más confundidos que antes, lo que me causó intriga, Willy era un experto en las mentiras, pero Rubius era el hombre más obvio de todos, sino fuese por esa mirada que me dirigió, llena de comprensión y frustración, me habría creído que aquellos dos idiotas me traicionaron. Había algo más y no me lo dirían frente a todos los presentes, eso estaba más que claro.

-Perdón Alexby, pero el día de la explosión me mantuve todo el día con Rubius, y a su vez con Merlon, eso lo puedes ir a preguntar a él directamente.

-Es verdad, nos ha pedido ayuda con una misión, muy estúpida por cierto...

Otra ronda de susurros se hizo presente, no me sorprendería el hecho de que todos estaban confundidos y Auron estresado con la idea de que era probable que el caso se alargara, a menos de que yo fuese culpable. Sinceramente me daba igual si me encerraban aun siendo inocente.

-Soy culpable -alce la voz lo mas que pude, los ojos de Alexby a mi lado se abrieron de par en par, me susurro lo idiota que era y el juez alzó una ceja preguntándose que me proponía.

-¿Eres gilipollas? -esa fue la voz de Rubius, molesto, si, pero seguro él junto a Willy encontrarían a los idiotas que me estaban culpando de un caso que ni estaba enterado de que había ocurrido.

-Si el acusado se menciona culpable, no hay más que pueda hacer, Fargan, lleva los cargos de intento de homicidio a civiles y atentado terrorista... Pero a pesar de lo mencionado, su culpabilidad queda en duda hasta que se encuentre al verdadero culpable, en ese caso, Fargan queda arrestado por dos meses y luego tendrá arresto domiciliario.

Ahora el silencio reinaba en la sala, ni siquiera Luzu era capaz de pronunciar palabra, seguro pensaba que mi caso era injusto.

-Encuentren al verdadero culpable, y nada de juzgar al idiota, se le ejecutará o expulsara del pueblo -ordenó el alcalde de Karmaland, durante toda la sesión se mantuvo en silencio al lado de su fiel compañero Mangel, la puerta fue abierta, el cuerpo del alto hombre interrumpió la luz que entraba en la sala dejando ver su brillante cabello naranja salir de ahí.

-El caso aún no se cierra, espero que encuentren algo de utilidad como Lolito lo ha dicho... Pueden retirarse todos. Alexby, lleva a Fargan a donde corresponde.

Deje mi cuerpo reposando sobre la silla escuchando como todos se marchaban a excepción de dos, Auron y Alexby, el más bajo de mantuvo a mi lado y el otro se retiro un instante a quitarse la ropa de aquel trabajo.

-Cerdo, si realmente eras tu... Vaya mierda, debiste invitarme -dijo con un tono divertido dando un suave golpe en mi hombro -aunque creo que hay algo que he visto que nos puede servir para sacarte más rápido del lío, aunque mi palabra no es tomada en cuenta en un juicio.

Sin esperar a que respondieramos se marcho de ahí dejándonos solos.

-Venga, que debo llevarte a la celda -se acercó el de cabello negro ayudando a levantarme de la silla pasando uno de mis brazos sobre su hombro, no tenía más opciones, ni mucho que hacer, me deje arrastrar por sus pasos. Nos detuvimos ante la puerta permitiendo acomodar mis alas para poder salir de ahí, el menor tuvo que pegar su cuerpo con el mío como lo hizo cuando me llevó ahí, malditas puertas pequeñas.

-Es verdad que tus alas son muy suaves -alzó la mano para tocar las plumas que estaban más cerca a su rostro.

-Y hay quienes sus alas son el doble de suaves que las mías, como un algodón -continuamos caminando por las calles rumbo a comisaría.

-Eso suena imposible.

-Es verdad, mi hermana pequeña es una de ellas, es mucho más común que las hembras tengan las alas mucho más suaves, pero también delicadas.

-Jamás me has contado nada de eso -alzó la vista, le dedique una sonrisa al ver la curiosidad que tenía sobre mí o mi raza.

-A nadie se lo había contado... Yo heredé la genética de mi padre -alce el ala que no estaba herida -el color café, negro y blanco característica de nostros, casi como los búhos. Otros tienen alas blancas, de un tono tan puro que parecen ángeles, pero sus alas son más delicadas. Unos pocos con alas negras, ellos suelen volar mucho más rápido y sus plumas son más delgadas y alargadas, pero sus alas son un poco más pequeñas, son más resistentes que el resto.

-Jamás había escuchado de algo así -en su voz se notaba la emoción -¿me podrías llevar algún día a ver tu pueblo?

-El mío lo dudo, es muy lejano y demasiado... Racistas con los humanos o de otras razas, se de un pueblo cercano, ahí podríamos ir algún día.

El resto de camino continúe explicando de cosas sobre mi aldea, las tradiciones y esas cosas, el menor parecía fascinado con todo, ni siquiera Willy había hecho esa cantidad de preguntas, quizá por el hecho de que él se quedó un par de días en mi pueblo, aunque dudo que le hayan explicado lo que yo le he mencionado a Alexby.

Al final del día me encontraba encerrado tras un montón de barrotes sentado en la única cama que de encontraba ahí logrando ver el cielo nocturno, el dolor de la herida continuaba constante, pero no aumentaba. Me acomode en la cama observando el techo de la celda cerrando poco a poco los ojos para poder dormir.

-pst -no abrí los ojos.

-pst -frunci el ceño pensando que era mentira lo que escuchaba -pst -no era casualidad, me senté en la cama y mire a donde los barrotes, ahí pude ver una mascara blanca con una extraña sonrisa.

-¿Qué leches?

-Sh, escucha, creemos saber quién te está inculpando, está misma noche W y yo vamos a buscar la guarida de esos guarros. Tendremos que encargarnos nosotros dos solos...

-¿Qué cojones piensan hacer?

-Aún lo vamos a evaluar... Se oscuro.

La mascara se levantó un poco mostrando la sonrisa de Rubius, sus colmillos estaban fuera, volvió a acomodar la mascara y se marcho rápidamente antes de que un guardia pasara por la calle.

Un nuevo camino (Willgan)Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora