Capítulo 1. La nueva capitana.

6.4K 434 116
                                    

—Ella es la capitana de el catorceavo escuadrón de protección, Natsuki Iwakura —explicó Yamamoto.

La chica sólo se quedó en su lugar, recorriendo la habitación con su mirada, y observando a cada capitán. Unohana la miro con una sonrisa, y fue la primera en hablar.

—Oh, Natsuki, soy la capitana de la cuarta división, Retsu Unohana —se presentó, inclinando un poco su cuerpo, haciendo una leve reverencia—. No sé si me recordarás.

—Nunca te olvidaría, Unohana-san —respondió la chica con una sonrisa.

—Bueno, bueno, ¿nos podrías decir cual es tu Zanpaku-tō? —preguntó sin más el capitán Kurotsuchi, interesado en el tema.

—¡Claro! Su nombre es Jigoku no Hana [N/A: Flor Infernal, según el traductor de Google.] —comenzó la pequeña—. Es una de las más poderosas del elemento fuego —les explicó Natsuki, mostrando su Zanpaku-tō a todos los presentes.

Mas calló un detalle, aunque no extrañó al capitán Kurotsuchi, puesto que él ya sabía que aquella ave majestuosa estaba encerrada en la misteriosa Zanpaku-tō de la muchacha.

—Ah, interesante. ¿Me la prestas un momento? Sólo quiero verla, no le haré nada —dijo, sonriendo de forma inocente.

Cuando dijo esto, Hitsugaya miró a Kurotsuchi con el ceño fruncido, y luego a Natsuki. Ésta, que miraba al capitán, notó la mirada de Tōshirō, y lo observó. El muchacho, sonrojado, desvío la mirada. Iwakura sólo le sonrió levemente.

—Eh... —Devolvió la mirada a Kurotsuchi, y un poco desconfiada se la otorgó—. Claro. Aquí tiene.

—Vaya. Se nota con sólo mirarla que es muy poderosa —dijo, con una expresión de asombro en su rostro.

Algún día lograría examinar a fondo la espada, cada detalle, sin importar qué.

—Porque lo es —afirmó Natsuki sonriendo.

—Tu arma es muy buena. Debes cuidarla mucho, ¿o me equivoco?

—Sí, bastante. Me ha salvado de muchos aprietos —aseguró la muchacha.

Aunque también la haya metido en muchos conflictos y probablemente...

Y así, el científico le devolvió su arma.

—Bueno, ya que les presenté a la capitana, es el turno de la vice capitana —anunció Yamamoto—. Puedes pasar —dijo en dirección a la puerta, logrando que todos los presentes dirigieran su mirada a ésta.

—Uh, yo... —No tardó en entrar una chica, claramente de aspecto tímido—. Soy Hikari Tatsuno. ¡Es un gran honor para mi tener este rango, y poder trabajar con tan grandes shinigamis! —Se inclinó, con un leve rubor en sus mofletes.

—Eh, Tatsuno, no es necesario que te comportes así, descuida —dijo el capitán Kyoraku.

—Si usted lo dice. —Reincorporó su cuerpo, avergonzada.

Natsuki estaba examinando a Byakuya, quien se la hacía una persona muy conocida. Juraba haberlo visto anteriormente.

Ese chico se me hace demasiado conocido —pensó para sus adentros.

Después de meditarlo un poco, abrió sus ojos como platos.

—¿Qué ocurre, Iwakura? —preguntó con curiosidad Kenpachi.

—Él se me hace muy conocido. —Señaló a Byakuya, achinando sus ojos—. ¡Ya sé! —habló de repente—. ¡Tú eres Byakuya Kuchiki, mi primo!

Éste la miró, la examinó por un momento y luego abrió los ojos como platos, pero sin dejar de fruncir el ceño.

— ¿Qué? ¿Primos? Vaya, qué sorpresa... —pensó confundido Tōshirō.

—Natsuki... creía que no te volvería a ver... Haz crecido mucho —comenzó, sin muchos ánimos de hablar, una pequeña charla con su prima.

—Tch, lo mismo te digo. No sabía que te convertiste en capitán. —Siguió la charla algo molesta.

—Qué sorpresa, ¿no? —Sonrió como siempre Ukitake.

—Tienes razón —o tal vez, no—, pero, aquí termina la reunión, pueden retirarse —les dio permiso Yamamoto.

Y así todos se retiraron de la sala, menos Byakuya, el cuál fue detenido por Natsuki, quien lo miraba, notoriamente, molesta. Quería respuestas, y pronto.

—Nunca me dijiste que eras parte del Gotei trece... Digo, catorce —reclamó la chica.

El chico la miro, de la misma manera y luego sonrió levemente.

—¿No era obvio? —preguntó con orgullo.

—Nunca cambias... primito —regañó negando con la cabeza.

—Ya lo sabes, ahora, tengo que irme... —Y así partió fuera del lugar, evitando un tema que no quería tocar por nada en el mundo.

Pero fue detenido.

—¡Oye, espera!

Byakuya se dio media vuelta para observarla de frente.

—¿Dónde esta mi primita Rukia?—preguntó con su radiante sonrisa, y un brillo en sus ojos, actuando cual niña pequeña.

—Creo que en su escuadrón, el trece. Si no está ahí, ponte a buscarla tú misma.

—Gracias, Byaku.

Y usó el shunpo para ir en busca de Rukia.

—Tch... Ella tampoco a cambiado, sigue siendo la misma niña infantil.

Pero ni uno de los dos se dio cuenta que un muchacho de baja estatura escucho su conversación.

—Qu... ¿Qué es esta sensación?—pensó Hitsugaya, sonrojado—. Mejor voy a mi oficina, conociendo a Matsumoto no terminó  mi papeleo y se pasó todo este tiempo bebiendo sake...

✎。

La nueva capitana (Toshiro Hitsugaya)Where stories live. Discover now