Epílogo

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Era la madrugada del dos de septiembre cuando se escuchó varios lobos aullar en Ottery St.Catchpole

Era un aullido lastimero pues la que su madre había llamado maldita estaba muerta, la única leona en una manada de lobos había muerto para salvar a su hija la cual también en forma de lobo aullaba junto a los demás lobos

Dos lobos adultos lloraban de dolor junto a dos mujeres y un pequeño lobo le daba apoyo a la pequeña loba de pelaje color arena

El más destrozado ahí era Remus Lupin, su amada, la leona que domo al lobo, había muerto en sus brazos sin el poder hacer nada por evitarlo

Los magos del ministerio que se acababan de ir le habían dicho que estuviera tranquilo, que el asesino de su amada había sido atrapado, pero ese no era ningún consuelo, nada lo sería...

En cuanto había dejado de latir el corazón de Akasha Argea tal y como todos en su familia, ella se había transformado pero no en lobo pues ella no lo era, ella era una leona entre lobos, ella paso a su forma de leona, no tenía heridas pues su cuerpo las había cerrado pero una maldición que nadie conocía, la misma que mató a su padre, la mató a ella

La enterraron ahí en el bosque en su forma de leona, una leona de color de la arena que tenía un pequeño bulto en su panza al que nadie le dio importancia pues era casi imperceptible

En cuanto salió el sol todos se dirigieron a la casa que había sido de Akasha y Remus

Entraron y vieron el último lugar en el que había estado, la cocina aún llevaba su huella pues Akasha era un desastre al momento de organizarse

En una olla ahí ya fría estaba una sopa que había hecho antes de que llegaran los mortifagos

Su familia la calentó y comieron lo último que Akasha les había dejado sin saberlo

La pequeña Alda sentándose en el sillón favorito de su madre se sacó la mochila y buscó la carta que le había dejado para su padre

Estaba segura que sería bueno dársela, era lo último que le quedaba de ella a fin de cuentas, y estaba segura que era su madre la que debía decirle de su hermano a su padre y no ella

- Papi, mamá me dejó esto cuando me hizo escapar - dijo la pequeña extendiéndole la carta que su padre que estaba ahí sentado en la sala con los demás Argea

- Gracias cariño, quieres que la lea en voz alta? - dijo Remus limpiándose las últimas lágrimas que se le habían escapado

- Si papi, quiero saber que escribió mami - dijo la pequeña Alda

Remus Lupin aclarando un poco su voz abrió el sobre y sacó la carta que su amada le había dejado

"Mi querido Remus, estoy segura que si lees esto es porque algo me pasó.
Rem no olvides que te amo, un lobo, un Argea solo tiene un amor en su vida, ese eres y siempre serás tu, pero no dejes que eso te detenga a ti, cuando te sientas listo encuentra a alguien a quien ames y te pueda amar tal y como eres, no dejes que nada te detenga, no dejes de trabajar, conseguí hacer la poción mata lobos y la dejé en una caja en la habitación, usalo para seguir trabajando

Dile a mi hermano Aeneas que cuide a mi pequeña Alda mientras trabajas, así el podrá entrenarla a la par de Tristan, ella también había empezado a entrenar y es muy habil

Dila a mi pequeña que no olvide todo lo que James le enseño, tiene que ser feliz y libre siempre, debe ser feliz con los que la hacen feliz

Lamento no haberte dicho esto antes, quise decírtelo, pero no encontré el momento indicado, estoy embarazada Remus, y si estas leyendo esto así, es porque no pudimos conocerle y lo siento tanto...

Cuidense mucho, que esto realmente aún no a terminado, te amo Rem"

Aquella carta había hecho llorar a todos, pues para Remus además de haber muerto su amada habia muerto su pequeño hijo no nato

Para Alda no solo había muerto su madre sino también su hermano

Y nadie pudo evitarlo, nadie pudo hacer nada

Esa misma tarde Remus había sido llamado para un trabajo lejos, por lo que Alda se fue con su tío con la promesa de que su padre en cuanto volviera la buscaría y pasarían todo el tiempo posible juntos

Cuando Albus Dumbledore se enteró de la muerte de Akasha Argea supo que ahí empezaba la única profecía que le había escuchado de joven

"El peligro descansa para hacerse más fuerte

El amor y la obsesión de los lobos son peligrosos y más junto a la maldad que provoca guerras

Para vencer se necesita probar las fuerzas del elegido y darle herramientas

Subestimar al enemigo será la perdición del mundo"

Supo Albus Dumbledore entonces que aquella profecía al igual que la de Sybill Trewloney debían ser tomadas muy en cuenta

Esto aún no había terminado, apenas acababa de empezar

³ Una Leona entre Lobos (Remus Lupin)Where stories live. Discover now