Por ti, el crepúsculo se entrega apasionado cada tarde en el otoño. Y la primavera, risueña viste de violetas el balcón de nuestro nido de amor.
Por ti, el canto de las aves entonan la promesa de amarte la vida entera: te quiero tanto hombre de las mil maneras...
Te quiero con el frío que me lleva a acunarme en las sábanas de tu piel blanca. Tus brazos haciendo de edredón, arropando mi pecho, uniendolo a tu corazón.
Te quiero con el calor del verano, que me desnuda de penas ante ti y engalana la entrega de sabernos nuestros, tú mío y yo, yo creada a tu medida y necesidad.
Por ti, el arcoiris brilla orgulloso con la lluvia de amor que por ti traigo en el corazón.
Es por ti, que estoy así, aquí...
Amy Beltrán
