Capítulo 4: La Famosa-Hermosa-Eli.

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—Jamás debe alejarse de la persona a la que cuida— ruedo los ojos citando lo que dijo —¿Sabes?, en realidad la verdadera función de un guardaespaldas es quedarse siempre al lado de la persona a la que cuida, pero ir a donde esa persona vaya, lo que quiere decir que si yo no quiero ir a tu apartamento, tú te tienes que quedar aquí, pero como yo no soy cualquier persona entonces te dejaré ir solo porque soy muy buena— suelto una carcajada por mi propio sarcasmo y mi verdad y me siento de nuevo para agarrar mi teléfono, ya que no me deja ver la tele.

—Ash...— su voz tiene un tono cansado. Cómo si se rindió. Sonrío victoriosa.

—¿Hum?— me hago la interesada.

—No puedo dejarte ¿Ok?

—Desgraciadamente no— entro al Instagram y nunca lo miro.

—A menos que tú me prestes tu ropa, que dudo que me quede, tengo que buscar mis cosas.

—Y yo jamás te prohibí ir por tus cosas— y es la verdad.

—Eso ya lo sé.

—¿Y entonces?, ¿Algún problema?

—Tienes que ir conmigo, si tú papá se entera que te descuidé por media hora, me mata— lo miro y se sienta al lado mío agachando la cabeza hacia abajo poniendo sus manos en su nuca.

—No tiene porqué enterarse— apoyo el teléfono en la mesita que tengo en frente.

—No soy muy bueno guardando secretos, si lo veo voy a soltar la lengua.

Lo considero un momento. Sería muy mala si no lo acompaño. Sinceramente no tengo ningún problema en ir, solo que me encanta molestar a los demás y además no estaría nada mal ver por enésima vez "Nace una estrella". Ay, otro día será. O puede ser que hoy pero a la noche.

—Te tomas muy bien en serio tu trabajo ¿No?— toco su hombro y él se tensa un poco con mi tacto.

—Estoy debatiendo con la mujer que cuido si me acompaña o no a mí departamento, así que imagínate— me río bajo y me vuelvo a parar.

—Vamos reina del drama, estoy segura que mis faldas no te van— él gira la cabeza y me mira con una sonrisa de oreja a oreja.

Agarro mi celular y salgo después de Liam. Él cierra la puerta y vamos hacia el ascensor.

—No fue tan difícil convencerte— murmura cuando salimos de éste.

—¿Quieres que vuelva a entrar Liam?— amenazo y niega repetidamente —eso pensé.

Ésta vez si subo a su auto y él acelera llevándome a lo que supongo es su apartamento.

—¿A cuánto queda de aquí?— pregunto tirando de los hilitos de mi jean.

—A media hora— me mira un instante y vuelve a ver al frente.

—¿Puedo poner algo de música?

—Claro.

Conecto el Bluetooth a mi celular y busco otra de las playlist que me encantan.

—¿Hay algo más que te guste además de Queen?

—Guns N' Roses— esboza una sonrisa y me río como una demente —No me digas que no te gusta.

—¿Qué?— lo miro horrorizada —querido, yo nací en California, así como ellos, prácticamente es mi segunda banda favorita, los amo a Izzy y a Axl por Dios, no preguntes algo tan obvio.

—Tranquila princesa, aún no te conozco y hay personas que no le gustan Guns N' Roses.

—Personas que no saben lo que es música— replico.

El Miedo De Ashley #2Donde viven las historias. Descúbrelo ahora