EL CHAMAN DE SANTA CATALINA

PREVENCIÓN

Un día como cualquier otro, todo cambio, al mundo llego un virus que puso en peligro la vida de las personas, es el Covid 19, las autoridades de los estados del mundo tomaron decisiones sobre confinamientos, se contagia vía oral, por el tacto, aire, la gente siente miedo, la humanidad recibe como un escarmiento, aunque el ser humano es como el virus, destruye todo a su paso y son los runners el vehículo del mal de la muerte. Nació en China, recorrió el globo, llego a Argentina, al parque de Lomas y a la reserva de Santa Catalina.
Esta peligrosa secta, generadora de endorfinas lo dispersan a través del aire por el exceso de exhalación, en la ciudad de Buenos Aires te detienen si te ven con zapatillas Asics, calzas o relojes cuenta laps, en los barrios del conurbano los vecinos llaman al 911 si corres el colectivo, todo son cazarunners, nadie quiere el virus cerca, el pase a la clandestinidad de los corredores genera la paranoia de una ciudad que posee un parque de deportes y que se ve jaqueada por la enfermedad.
En Lomas de Zamora, los líderes de los teams runners hoy son los jinetes del apocalipsis, algunos con pergaminos otros con sellos de goma, da igual, causan el mismo terror, sus alumnos son émulos de los Walkind Dead, necesitan endorfinas, quieren comer y no hay lugar para que sus cuerpos levanten revoluciones para generarlas, el parque cerro, las calles están vigiladas, solo quedaba un lugar donde se puede y es la reserva de santa catalina, que es solo para entendidos del deporte y el riesgo.
Como una ciudad fantasma parecida a un desierto es una postal decorosa los aledaños del parque, los perros son los privilegiados, la gente se pregunta ¿Quién es Toribio Gutiérrez? El espíritu deportivo ya no era una virtud para la gente, las publicidades maquillaban el ocio con grasas trans y dulces al instante a través de las aplicaciones, era el momento de la revancha de los obesos, lo normal ya no era lo que conocías, lo normal era otra cosa.
La abstinencia enloquecía a los corredores, nadie declaraba lo que hacía, en forma simpática subían fotos a sus redes sociales, de entrenamientos home gym, pero eran mentiras, ingerían 5000 calorías por día y dormían la siesta, necesitaban endorfinas, sus cuerpos necesitaban placer, todo ya era nuevo, mientras espiaban a sus vecinos.
Un día de confinamiento como cualquiera, en forma oscura se acercan atletas a los perímetros de Llavallol, uno de ellos filtra en Instagram una foto del 1400, estaban entrenando, la imagen fue el disparador, las caras no asomaban, había lugar, arboles, campo, vacas y microclima ¿Quién es Toribio Gutiérrez? Los días corrían, 6 de la mañana, el movimiento de autos sobre Garibaldi adelantaba la concurrencia, pasaron los días los accidentes comenzaron.
La primera víctima que encontraron fue a Verónica Castro, una hermosa deportista de elite que tuvo su carrera inolvidable en el año 2014 ganando el 42 de Buenos Aires con un tiempo de 2:41 minutos seguida por la Nigeriana Malala Kunke en un final reñido.
Verónica no pudo soportar la abstinencia, se entrenaba sola en la calle de la reserva hasta que un día parece que realizo un fondo aeróbico entre el 600 por el bosque hasta llegar al campo recreativo municipal camino al centro comercial y apareció dentro de un aljibe abandonado que tiene 15 metros de profundidad, la descomposición de su cuerpo atrajo a los caninos policiales ordenado por la fiscalía en turno en la intensa búsqueda, a raíz de ello, recomendaban no asistir al bosque, los runners rebeldes continuaron yendo, los habitantes del campo de la reserva con la paranoia del contagio contrataron los servicios de un chaman del norte de Paraguay muy sanguinario que camuflado con los poderes que le brinda el ayahuasca logra repeler a todo intruso dentro del bosque a través de la disecación de cuerpos, las 'personas que viven dentro del perímetro son medias chucaras con ánimo belicoso, algunos relacionados con ritos de espíritus del otro mundo.
Entre los runners que asisten en la busca de sus dosis diarias, tapados en sus rostros y cabezas, se entrenan y se pierden entre los árboles, piensan que están protegidos pero alguien observa los pasos en forma sigilosa ellos no saben que el peligro los aguarda para el proceso de disecación de cuerpos, se sabe que, quien pudo resistirse a las fuerzas del chaman fue Cristian el corredor que a veces acompaña a las corredoras, en sus relatos al llegar a la guardia del Gandulfo pudo decir que un petiso lo ato junto a un árbol y un animal exótico tipo alien le comió el dedo del pie, el meñique y desde ahí comenzó a chuparle la sangre hasta que apareció un ruido entre los arboles parece que mirando los poderes del chaman, este pudo soltarse de las ataduras, escapar y ahí lo ven hoy, los vestigios disecados lucen en su rostro, aunque recuperando energías, esta historia recién comienza, deben desertar los atletas de ir para allí, ya que si continúan buscando sus drogas encontraran también el pase al fin de la vida... (continuará)