Capítulo 1

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-Hey Jude, don’t make it bad, take a sad song and make it better. Remember to let her into your heart, then you can start to make it better –empecé a cantarle dulcemente a mi preciosa hija. La miré y sonreí al ver que esa pequeña persona que sostenía en mis brazos era mía.

¿Cómo describir la sensación al coger a tu hijo en brazos? Es imposible, porque no hay nada más tierno y más precioso que eso. 

Entonces oí como la puerta de la habitación se abría detrás, pero no me preocupaba porque sabía quién era. Me giré un poco y lo confirmé. Allí estaba Dean, apoyado en la puerta.

-La habitación ya está lista –me informó- he sacado algunas cosas pero lo demás no lo he tocado.

Giré un poco la cabeza, para mirar hacia al lado, así le daba a entender que le había oído. Él caminó lentamente hacia mí y se agachó a mi lado, nos miramos y después a nuestra hija.

Me acarició la mejilla suavemente y yo cerré los ojos para sentirlo más. Entonces cogió a la pequeña en brazos y se levantó, yo también me levanté.

-Ve a dormir.. –hizo una pausa- yo la acostaré.

Y sin decir una sola palabra salí de la habitación y fui a la nuestra para dormir, tal y como había dicho Dean, pero ambos sabíamos que eso no pasaría porque llevaba mucho tiempo sin poder dormir bien.. no después de lo que pasó.

Cuando salía del baño que teníamos en nuestra habitación entraba Dean por la puerta. Cruzamos las miradas un par de segundos y cada uno volvimos a lo nuestro. Yo me senté en mi lado de la cama y me quedé parada mientras esperaba a que él se metiera también en la cama.

-Sam ha llamado antes, tiene una pista para encontrar a Kevin. Mañana iremos a verle si te parece bien –me miró esperando una respuesta.

-Sí, iremos –dije yo sin muchos ánimos.

Dean asintió con la cabeza y me besó en los labios antes de irnos a dormir pero yo ni siquiera reaccioné. Estaba demasiado afectada.

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-La última vez que hablamos con Kevin estaba traduciendo la piedra para cerrar las puertas del Infierno. Entonces he pensado en quien querría esa piedra más que nadie –dijo Sam apoyándose en la mesa donde habían documentos y un mapa.

-Crowley –dijo Dean.

-Exacto –afirmó Sam.

-Esa piedra debe contener toda la información sobre el Infierno y Crowley la quiere para que no se le acabe el espectáculo.

-He hecho algunas llamadas y he conseguido localizar a Crowley. Ayer le vieron entrar en este almacén –lo señaló Sam en el mapa- con una chica joven.

-¿Sabes quién es?

-No, pero debe ser alguien importante –dijo Sam.

-Crowley está cogiendo a todos los profetas –dije yo.

Ambos me miraron sorprendidos porque no era muy normal que yo hablara, no des de hace un mes.

-Tiene sentido –dijo Sam asintiendo mientras pensaba- ¡Claro! ¿Y si Kevin no puede traducir la tabla? ¿Y qué pasa si no es el único?

-Ya, ¿pero como sabemos con seguridad que estamos en lo cierto?

-Los ángeles tienen memorizados todos los nombres de los profetas.

Entonces todos nos acordamos de Castiel. Después de que Dean y yo fuéramos al Purgatorio, Cas nos encontró y fue a buscarnos pero algo falló y no pudimos salir de allí. Nos buscamos otra manera pero.. él no lo consiguió.

-¿Pero a quién podemos decírselo?

-Yo paso de ángeles –apuntó Dean- son unos cabrones con alas. No podemos confiar en ellos. Tenemos que hacerlo nosotros.

-Esta tarde iremos al almacén –me mordí el labio y salí de allí.

NARRADOR EXTERNO

Después de que ella saliera de allí sin decir nada más, los hermanos se quedaron hablando.

-¿Cómo lo lleváis? –preguntó Sam.

Dean le miró y respiró. No dijo nada pero ya se daba a entender que no muy bien.

-Dean yo.. –intentó hablar pero su hermano le cortó.

-No Sam –le detuvo- Ya sé que lo sientes y también que te sientes culpable pero repetirlo no va a arreglarlo.

Esta vez Dean parecía algo cabreado, pero era normal después de todo. Sam se calló.

-¿Sabes algo de Abaddon? –volvió a intentar entablar conversación.

-No –respondió firmemente.

-Quizás Crowley nos pueda decir algo, quizás la odie tanto como nosotros.

Dean le escuchó pero no abrió la boca para hablar y se fue de allí despidiéndose con la mano.

‘Las cicatrices nos recuerdan donde hemos estado, pero no dictan nuestro destino’

Pues aquí esta el primer capítulo de la tercera temporada! Como veis han cambiado muchas cosas y quizás algunas no las comprendais aún, pero tranquilas que todo se sabrá. A partir de ahora en algunos capítulos también os pondré algunas de mis canciones favoritas y quizás a vosotras tambien os gusten. Votad y comentad para mas*-* Deciros tambien que tengo otra novela con dos chicas mas y que es sobre Dean, la novela se llama Battlefield.

Darker than black [Dean Winchester y tu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora