J:Aunque no lo creas, este es un tipo de baile muy popular, a las chicas les encanta.— dice con un tono pícaro.

R: Pues a mi no, ahora ¿me ayudas a incorporarme?— lo mire molesta y eso hizo que Jeremy obedeciera, aun así no me soltó— aun no me has dicho como se llama la cancion.

J: "vuelves", son unos de los temas cursis de Tyler— ambos reimos al unisono. Jeremy comenzó a moverse y conmigo junto a él, trataba de seguirle el paso pero era difícil— lo haces bien.— *Mentira* —  No se si deba preguntar o no, pero... ¿ahora me dirás el por qué llorabas?— me detuve en seco mirando a Jeremy, al parecer no se había creído mi escusa— tan solo quiero saber si puedo ayudar en algo.

R: Es algo que no es de tu incumbencia— digo fríamente mientras bajaba la mirada. No quería ser mala, pero ¿era necesario que mencione algo asi ahora?— será mejor que volvamos a limpiar — trate de desviar el tema. Solté las manos de Jeremy para nuevamente tomar el trapeador y comenzar a limpiar.

•••••••••

Las horas pasaron, y fueron las horas más incomodas de mi vida, Tyler tenía puras canciones románticas o nostálgicas. Aun así con eso terminamos de limpiar, la basura en las bolsas las quitaremos mañana, pero ahora... quería disculparme con Jeremy, no me había dirigido la palabra después de lo que había dicho y él  no era así, era raro que no este molestandome.

Que diablos pienso, es mejor irme de aquí, estoy cansada y tengo hambre, no comí en todo el día, la disculpas puede esperar.

Me dirigí a la puerta tomando el picaporte pero por alguna razón no se abría, volví a intentarlo esta vez con más fuerza y nada.

R: Mierda... ábrete maldita puerta — murmuro para mi misma aun intentando de abrirla.

J: Oye, así vas a arruinarlo, ¿Que es lo que pasa?— pregunta Jeremy a mis espaldas, al menos sentí un alivio cuando me hablo.

R: Es la puerta, no se abre—

J: Eso es porque no tienes fuerza— ruedo los ojos y dejo de intentar volteandome mirando a Jeremy.—inténtalo.— me hago a un lado.

El coloca su mano en el picaporte y me mira con una sonrisa de oreja a oreja, cuando tira de ella y no se abre, rápidamente su sonrisa desapareció para ser reemplazada por un ceño fruncido apartando su mirada de mi.
Luego de un rato de que intentara abrir la puerta, se dio por vencido.

R: ¿Quien es el que no tiene fuerza ahora?— digo divertida

J: Creo que la puerta está congelada, es imposible de abrir, todo por culpa de este maldito frio—  comento molesto— no quiero morir congelado.

R: No exageres, solo debemos esperar un poco a que baje la nevada y el picaporte se descongele— trate de calmarlo, nunca imagine que mis habilidades me jugaran en contra esta vez.— ¿tienes frio?

J: ¿Tu no? Ah verdad, tu no sientes nada— se alejo sentándose en una silla abrazando sus piernas.
Supongo que esta es mi oportunidad de disculparme, de todas formas estamos encerrados y no tengo de otra.

Me acerque colocando una silla a su lado poniéndome en la misma posición que él.

R: Jeremy... perdón por hablarte mal cuando querías ayudarme— solte sin más, me daba vergüenza mirarlo así que lleve mi vista a mis rodillas— Solo que no quería hablar de eso cuando la estaba pasando bien.

J: Es mi culpa por preguntar, no te preocupes está todo olvidado, quizás no querías recordar a tu ex—

R: ¿Ex? — *si pregunto que es, ¿sonará estúpido?*— No es eso... es algo diferente—

J: ¡Achus!— estornuda. Mi vista se dirigió hacía el notando que estaba temblando del frio.— maldito invierno.

R: Perdón...

J: ¿Por qué te disculpas?

R: por nada— digo rápido.
*ufff casi la cago* — te daré mi abrigo con eso--

J: No puedes, estan afuera—

Mierda, tiene razón, que se supone que haga entonces, aquí no hay nada.

Me surgió una idea algo incomoda, pero no hay de otra.
Mi temperatura es normal, no siento el frío, pero si lo abrazo quizás pueda mantenerlo tibio, o al menos eso quiero creer. Necesito aumentar mi temperatura si quiero calentarlo, pero eso sería arriesgado para mi, bueno, no importa, puedo librarme de eso después, en cambio él puede morir. Diablos, solo se que esto será incomodo.

Me levante de la silla, algo nerviosa y avergonzada a la vez, nunca había hecho esto antes, solo espero no piense mal.

R: ¡Oye! Siéntate bien— ordeno, pero Jeremy no me obedecía.— ¡Rapido!

J: Que quieres, hace mucho frio, si me siento bien, el poco calor que acumulo se ira.—

R: ¡¿SOLO HAZLO QUIERES?!— después de un rato Jeremy con las pocas ganas del mundo se sentó— Solo no pienses mal— tragué saliva para luego con toda la pena del mundo termine por sentarme en sus piernas abrazándolo ocultando mi rostro en su cuello.— te ayudare a entrar en calor.

J: Ah... n-no tienes porque hacer esto.— tartamudea

R: ¿No estoy caliente?— pregunto aferrándome más.

J: ¡No me hagas pensar mal! — suelta un suspiro demasiado audible— ¿como es posible que no tengas frio?. — sus brazos me rodearon y su mentón se apoyo en mi cabeza.—

R: Solo esperemos un poco más—

Un silencio incomodo inundo el lugar, yo sólo trataba de elevar mi temperatura, pero creo que ya llegué a mi límite.

J: Ro, hay algo que quiero darte— sus manos tomaron mis hombros alejándome un poco, lo suficiente paga intercambiar miradas— Se que no nos conocemos muy bien, pero...

R: No me pedirás matrimonio o si?— arqueo una ceja

J: Jajaja ya quisieras casarte con este papucho— se peina su  cabellera y yo no pude evitar reír ante aquello— pero no es eso— bajo su mano hurgando el bolsillo de su pantalón tomando algo que me resultaba muy familiar— Quiero darte este collar.

Mi sonrisa desaparecio al ver lo que Jeremy tenia en manos, ese era el collar de Naty, ¿como es que llegó a sus manos?

R: De donde lo sacaste — digo tomando el collar y quitándome encima de sus piernas.

J: Me lo dio el hijo de Sara... ¿hay algún problema con ese collar?— al fin lo tengo... podre ir a casa.

R: ¡Al contrario!— me tire encima de él, la felicidad me invadía de pies a cabeza— muchas gracias por el collar, al fin me iré...

J: ¡¿Que?! ¿Irte? Pero solo te di un collar—

Ahora si estoy frita...

R: Me refiero a que me iré feliz por tu regalo... osea, a dormir... bueno es difícil de explicar.— río falsamente mientras me quitaba de encima y colocaba el collar, necesitaba salir de aquí y entregarle esto a Naty.— bien, vamos!

Corri hasta la puerta abriéndola fácilmente, con el collar de Naty pude descongelar el picaporte y salir corriendo de ahí.
Me dirigía con prisa a la habitación de otoño, al fin podríamos irnos de aquí.
Cuando abrí la puerta de su alcoba ella no estaba ahí.

R: Donde diablos estas..., no pienso moverme de aqui hasta que vengas—me tire en su cama mirando al techo, no podría estar más feliz— ¿por qué tengo la sensación de que me olvido algo?


































L͜͡a͜͡s͜͡ E͜͡s͜͡t͜͡a͜͡c͜͡i͜͡o͜͡n͜͡e͜͡s͜͡Where stories live. Discover now