Estoy maldito por amarte (hasta la tumba)

capítulo 7

Se necesitó todo en Jiang Cheng para luchar contra sus instintos de nadar hacia la superficie.
En cambio, se deja hundir más en esas aguas oscuras.
Jiang Cheng mira a su alrededor mientras se desplaza hacia el fondo y se da cuenta de que las sombras ya no lo seguían.
Hacía frío.
El agua está muy fría.
Jiang Cheng realmente no sabe qué más hacer, pero se dejó caer más abajo.
Jiang Cheng no tarda mucho en comenzar a hundirse más rápido. Puede sentir que el tirón se hace más fuerte cuanto más profundo va.
De repente, Jiang Cheng está siendo derribado nuevamente.
No tiene sentido luchar contra él, ya está demasiado lejos de la superficie para llegar a tiempo.
Jiang Cheng puede sentir que el agarre alrededor de su pie se hace más fuerte y el agua se mueve a su alrededor más rápido a medida que gana velocidad.
Jiang Cheng cierra los ojos y trata de combatir las náuseas provenientes de moverse tan rápido.
Realmente no quería morir ahogándose con su propio vómito.
Se está moviendo cada vez más rápido y justo cuando cree que se va a desmayar, Jiang Cheng puede sentir que el agua se desvanece mientras respira con dificultad para llenar sus pulmones nuevamente.
Pero el alivio del oxígeno no hace nada para aliviar a Jiang Cheng.
Porque Jiang Cheng ya no se está ahogando—
Está cayendo.
Jiang Cheng abre los ojos para ver nubes de color rojo oscuro que lo pasan mientras se desploma.
Está cayendo del cielo.
Jiang Cheng se vuelve al suelo y ve que se acerca muy rápidamente.
Si el lago no lo mataba ahogándose, el impacto de la caída definitivamente lo haría.
Frenéticamente alcanza a Zidian y suspira de alivio cuando se ilumina con sus chispas púrpuras.
Todavía puede usar su cultivo.
Jiang Cheng empuja todo el qi que tiene lentamente hacia abajo y deja que Zidian cambie a su forma de látigo.
Lo envuelve con fuerza alrededor de su muñeca y cuando los árboles comienzan a aparecer a la vista a medida que se acerca al suelo, lanza a Zidian para rodear una de las ramas.
Zidian tira de Jiang Cheng y él sabe que acaba de romperse la muñeca cuando el látigo se burla de la rama del árbol.
Sin embargo, eso no dura mucho, ya que la rama se rompe por la fuerza de la caída de Jiang Cheng y las otras ramas lo arrojan hasta que finalmente llega al suelo del bosque.
Jiang Cheng tiene que tumbarse allí por un momento y tomar profundas bocanadas de aire en el suelo del bosque.
No esta muerto. Tiene una muñeca rota y probablemente muchas costillas rotas y hematomas, pero ...
No esta muerto.
Jiang Cheng cierra los ojos y se concentra en su respiración y empujando el qi en sus heridas.
Cuando su pecho ya no se siente como si estuviera en llamas, Jiang Cheng no puede evitar que las risas broten.
Las risas se transforman en una risa total y Jiang Cheng se agarra el pecho para tratar de contenerlo.
Sigue vivo.
 

 
Jiang Cheng logra levantarse del suelo después de un par de horas y comienza a observar su entorno.
Espera, tal vez esté muerto.
Jiang Cheng se encuentra rodeado de árboles negros con enormes ramas retorcidas.
Pero lo que más desconcierta a Jiang Cheng no son los giros antinaturales de esos árboles.
Es el hecho de que las hojas, la hierba y todo lo que se suponía que era verde era de un rojo oscuro y profundo.
Mira hacia el cielo del que acababa de caer. Solo ve nubes en distintos tonos de rojo.
¿Qué carajo?
(Tienes que dejar de pensar tan alto. Es más difícil desconectarte ya que estás aquí ahora)
Jiang Cheng se da la vuelta para tratar de encontrar de dónde vino esa voz, pero cuando no encuentra a nadie alrededor, rápidamente se da cuenta:
Lo está escuchando en su cabeza.
(Vaya, tenemos uno inteligente. Se da cuenta rápidamente)
Jiang Cheng no puede reconocer la voz, pero puede decir que es masculina y un poco áspera. Está luchando contra el impulso de arrancarse el cabello cuando una voz más suave, pero aún masculina, también se une.
(Fa Cong, podrías ser un poco más amable. Probablemente ya esté abrumado)
Jiang Cheng definitivamente se está volviendo loco.
Él murió. Él está muerto. Esto no es real. Esto no está sucediendo.
Otra voz se une, esta vez con un tono femenino agudo.
(Han Guo dices eso como si no le hubieras dado pena por él diciendo joder hace un rato)
Jiang Cheng tiene que encontrar un árbol en el que apoyarse y dejar que su cuerpo se deslice por él.
Esa suave voz masculina vuelve a su cabeza.
(Bueno, ¿cómo se suponía que íbamos a saber que la matriz mental aparecería en sus brazos así Ju Lian? ¿Qué hay de ti y tus pequeños mensajes? ¿De verdad tenías que ser todo misterioso al respecto?)
Jiang Cheng está cerrando los ojos y murmurando todas las oraciones que conoce en voz baja. La voz ronca reaparece.
(Guarda tus quejas para más tarde Han Guo. El niño está empezando a enloquecer. Escucha, niño, esto también es extraño para nosotros. Esto no ha sucedido antes y estamos tratando de resolverlo también. ¿Dónde estás? ¿Ves algún edificio?)
Jiang Cheng sale de sus oraciones y comienza a mirar con cautela a su alrededor. Puede vislumbrar un edificio sobre los árboles.
Pero, ¿cómo diablos se suponía que iba a decirles eso?
Esa voz más suave vuelve a su mente.
(¡Lenguaje! Te juro que los humanos no conocen ningún otro tipo de palabras)
Ju Lian es el que responde esta vez.
(Han Guo. Ahora no es el puto momento. Chico, ya tienes lo básico. Solo busca en tu mente y siente la matriz. Aprenderás a apagarlo y encenderlo eventualmente).
Jiang Cheng respira hondo y trata de llegar a sí mismo.
(Creo que veo un edificio sobre los árboles).
Jiang Cheng ve una enorme llamarada iluminar el cielo desde ese edificio.
Puede reconocer que la siguiente voz pertenecía a Fa Cong.
(¿Viste a ese chico? Ahí es donde estamos. Intenta ir allí).
Jiang Cheng definitivamente no quería ir al edificio donde estaban las tres personas que de repente podían hablar con él mentalmente.
Han Guo es el siguiente en responder.
(Bueno, eso es un poco grosero. ¿Preferirías estar atrapado en el bosque en el inframundo como un ser humano vivo por mucho más tiempo? No podemos garantizar cuánto tiempo no atraerás atención no deseada parado allí).
Jiang Cheng ya quiere apagar esta estupidez en su cabeza.
¿Inframundo? ¿Ser humano vivo? ¿Atención no deseada? ¿Qué diablos está pasando?
Intenta de nuevo acercarse a la matriz.
(Bien. Estaré allí en un momento)