Algomanía (Michael Clifford)

Zehn.

La extrañaba, la necesitaba e iba a lograr volver a estar con ella.

Estaba decidido, su temor lo mandaría a la mierda, él debía morir.

Hacia tiempo que se negaba asistir a la escuela, probablemente sus amigos ya lo habían olvidado, su padre, bueno, su padre no lo necesitaría mucho y su psicólogo, se podía ir a la mierda.

Usaría el método más famoso, o por lo menos él así lo consideraba.

Salío de su casa y consiguió unas pastillas y un par de cervezas.

Todo estaba listo, lo iba a hacer en la noche, así con más razón se iría a dormir.

Justo a las nueve en punto, Michael se sentó al filo de su cama, introdujo varias pastillas en su boca y las trago con cerveza. Después de repetir el mismo proceso hasta que las pastillas se terminaron sintió sus párpados pesados, se recostó y por última vez imaginó a Hayley.

—Hola de nuevo, Mike.