Marry me ;; Kooktae [os]

Parte única

—¡Ahí está él! —exclamó su padre en cuanto lo vio llegar, Taehyung se inclinó ante el rey como tanto le habían enseñado, después de todo seguía siendo de un reino mayor y tenía más poder que él. Él hombre le correspondió igualmente con una sonrisa en su picudo rostro ensombrecido por una abundante barba, Taehyung se sentó frente a su padre, aún extrañado por la situación.

—Ciertamente es un joven hermoso, Sunho. —Lo halagó el rey dirigiéndose a su padre, y él correspondió con una tímida sonrisa, su madre le sonrió igualmente, sabiendo muy bien de quién había sido heredada la belleza peculiar del príncipe.

—¿En qué es necesaria mi presencia, su alteza? —preguntó entonces, ya harto de tanta formalidad y palabrerío, esperaba que tanta vestimenta que llevaba encima valiera la pena. El padre de Taehyung tomó de su copa y sonrió en grande.

—Ya es sabido que el cuarto y quinto reino se han aliado al proponer a sus dos hijos en santo matrimonio, gracias a ello Gwangju y Gyeongsang un solo gran reino —El Rey Seungyo habló—.  Con su padre hemos discutido sobre formar una alianza con los dos reinos más importantes Busan y Daegu.

Taehyung frunció el ceño.

—El tiempo está avanzando querido Taehyung, no podemos quedarnos atrás, es necesario forjar un lazo entre las familias más influyentes. Después de la trágica muerte de la querida princesa del Primer Reino hemos tenido que apretarnos a los matrimonios forzados.

—Discúlpeme su alteza pero no estoy entendiendo —comentó Taehyung, fingiendo demencia pues sabía perfectamente a donde se estaba dirigiendo este tema de conversación.

—Tu padre me ha propuesto convertirte en el próximo rey consorte de la corona del segundo Gran Reino —El hombre sonrió en grande y levantó su copa—, mi hijo mayor no se opondrá a su casamiento si sabe que es por cuestiones reales, que el segundo y el tercer Gran Reino se unan traerá más paz a esta tierra— Le dio un largo trago a la copa—. Además es usted muy hermoso para ser rechazado.

Taehyung parpadeó incrédulo ante tal revelación, su propio padre ofreciendo su mano en sagrado matrimonio con un completo desconocido, era inaudito. Miró a su madre esperando que ella estuviera igual de desconcertada que él, pero ella tan solo le sonreía y asentía tensamente, como si esperara que Taehyung simplemente se emocionara por ser prometido a un completo desconocido.

Taehyung se podía llamar a sí mismo como un sinvergüenza, no seguía para nada las reglas e incluso su madre le reñía todo el tiempo por comportarse como un bárbaro* y no como un príncipe heredero. Algunas veces rechazaba las vestimentas tan delicadas que le obligaban a llevar para ponerse unas calzas y un camisón de caballero que él mismo confeccionaba. Y era precisamente por ese comportamiento que Taehyung se sentía traicionado por su padre, él no esperaba comprometerse de esa manera, él soñaba con una de esas historias de amor que le pedía al cuentacuentos que le cantara a escondidas de todos, cuando ya la mayoría se había ido a dormir y solo quedaba un rubio soñador que no le gustaba seguir los parámetros.

Se sintió usado de repente, estaba siendo comprometido con alguien por cuestiones meramente políticas. No por amor verdadero, como tanto le cantaban por las noches.

Sin embargo, Taehyung conocía su deber y sus modales así que aceptó sin oponerse demasiado ante las decisiones que había tomado su padre, sin siquiera consultarle si estaba cómodo al respecto.

—Serás rey muy pronto querido, son sacrificios que tendrás que cometer. —Le dijo su madre sentada cerca del fuego tejiendo una alforja*, cuando él expresó su descontento.

—Esto es un ultraje, madre ¿Comprometerme a un hombre que ni siquiera conozco? ¡Es el colmo! —Se quejó él, moviendo sus brazos con efusividad para demostrar su inquietud—. Yo no quiero casarme con él, madre ¿Podemos convencer a padre para que anule el compromiso?