1.5 (Continuación)

13.7K 936 1.4K
                                    

Abría los ojos lentamente y divisé unas paredes blancas, definitivamente no era mi cuarto, ni el cielo o el infierno, me encontraba en la sala de emergencia de un hospital.

-¡Oh! Al fin despierta señora Ackerman, soy el Dr. Grisha Jaeger.
-Dr. ¿Cómo llegué aquí?
-Su esposo, el señor Ackerman la trajo, y gracias a Dios que la trajo a tiempo, pudimos hacerle un lavado de estómago y ya se encuentra bien, aún así me gustaría mantenerla en observación por un tiempo más. Su esposo se encuentra en la sala de espera, le diré que puede pasar a verla.

El Dr. Jaeger salió de la habitación y luego de un momento escuché la puerta abrirse nuevamente, mientras alguien se acercaba a mi cama, pero no quise mirar, mi cabeza estaba baja y mi mirada en el piso.

El aire se respiraba pesado.

-¿Por qué?
-¿Por qué no?
-¿crees que así es como se solucionan las cosas?
-No lo sé, quizá debí acostarme con el primer hombre que se me pusiera en frente, quizá esa sería una mejor manera.

Levi no dijo nada, se mantuvo en silencio mientras me miraba con pesar.
-¿Por qué fuiste a buscarme?
-Petra me dijo que habías estado en la casa, así que decidí buscarte para hablar, cuando llegué te encontré en el piso, casi muerta.
-Levi yo...(suspira pesadamente) ¿por qué?, te fuiste y no fui detrás de ti porque pensé que necesitabas tiempo, y como no volviste yo fui por ti, quería arreglar las cosas.
-No había nada que pudieses hacer (...), ambos estábamos mal, por eso decidí irme
-¿y meterte con Petra?
-No planee esto, solo ocurrió, estaba pasando por un mal momento y ella se mantuvo siempre a mi lado.
-¡¿y yo que?! ¡¿Crees que no la pase mal todo este tiempo!? ¡¿Acaso crees que no sufrí tanto como tú?!

Empezaba a llorar mientras le reclamaba y le gritaba ¡¿Cómo era esto posible?!
Yo también la había pasado mal, pero pensé que nuestra separación era un momento de sanación individual, al menos yo pensé así, pero él ¡se sanaba en las sabanas de una cama junto con otra mujer! ¡Mientras yo lloraba y maldecía al mundo y a mi misma sin nadie que me consolara! ¡Él estaba con otra! ¡¿Quién era el malo de la historia?!

Después de tanto gritar casi me quedé sin aire, respiraba pesado, me había desahogado.
Levi suspiró, cerró los ojos y se dirigió a la puerta.
-Voy a traerte algo de té.

Al salir me quedé sola en la habitación, mientras limpiaba mis lágrimas y un ligero dolor de cabeza me atormentaba ¿Qué iba hacer ahora?
Tras un rato Levi regresó, se la pasó todo ese día conmigo, incluso si no hablamos más, jamás me abandonó, hasta que llegó la noche, se marchó y a la mañana siguiente no lo volví a ver.
-Sra. Ackerman, ¿Quiere que llame un taxi por usted?
-Se lo agradezco Dr. Jaeger, pero está bien, yo lo pediré.
-Sé que no debo meterme en la vida de mis pacientes, pero Sra.Ackerman al verla puedo contemplar el dolor de sus ojos, él por qué el intento de suicidio, usted aún es una mujer muy joven, recuerde que esta vida es corta, usted es una mujer demasiado fuerte, manténgase fuerte, no se dé por vencida y siga adelante.

Las palabras de Dr. Jaeger me alivio una pizca el corazón, me hizo sentir aliviada, agradecí enormemente antes de marcharme.

Un solo día en el hospital me bastó para darme cuenta que no quería volver a ese lugar, tampoco volvería a darme por vencida nunca, incluso si tendría que hacerlo sola, debía continuar sola, Levi ya empezó una nueva vida, sigue adelante, yo tampoco me puedo quedar atrás, y aunque admito que siento un poco de rencor aún así no puedo odiarlo del todo.

Al llegar a casa, mientras entraba la llave escuché un ruido de al lado, tendría nuevos vecinos, una gran noticia porque iba a empezar de nuevo.

Al entrar miré todo el lugar, estaba justo como lo recordaba, suspiré antes de cambiar de ropa, me puse mi ropa de mendiga y me propuse limpiar, cambiar las cosas del lugar, tirar las cosas viejas al sótano, otras a la basura, empezar de nuevo y llevar las mejores cosas en mi corazón.

Levi Ackerman escenarios Where stories live. Discover now