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Desde el comienzo se sintió completamente fascinado como agobiado por Tulio.

Empezaron un noticiario bastante cutre evolucionando a él reconocido programa que era ahora, tanto el señor manguera como Tulio se regocijaban en dinero, el también lo haría, de no ser por su adicción con... Las Apuestas.

Fascinado por la personalidad y por su simple egocentrismo pero agobiado por su estupidez.

Tulio si que era un personaje.

Cada día desde el comienzo sintió como su mente solo se enfocaba en demostrar perfección ante tulio, aunque su curiosidad o sus simples problemas "cotidianos" le hicieran llegar a grandes problemas. O al menos a dar una mala imagen ante el, Tulio siempre se enfocó en demostrar esa perfección que le caracterizaba, y el quería demostrar lo mismo.

No quería ser un idiota ante el.

Aunque aveces ocurría al revés.

Siendo sinceros era más probable que Tulio cometiera un error a que bodoque lo hiciera.

Aun así, siempre quizo llamar su atención.

Por sobre todo.
Por sobre todos.

Era curioso el hecho de que cuando apenas iniciaba el noticiero sentía ese nerviosismo que le carcomia desde dentro, sentía como todo su estómago se hacía nudo y su garganta se cerraba.
Se lo adjudicó a un miedo a la pantalla. Pánico escénico.

No era eso.

Con el inicio de el segundo noticiero, tanto el como Juanin comenzaron anotar como Tulio crecía frente a sus ojos, ganándose el lugar de presentador.

Sentía una rabia al escuchar en las calles como docenas de mujeres hablaban de lo maravilloso que era aquel presentador

Creyó en celos a que el había ganado más popularidad.

No era eso.

Cuando empezó a salir con su novia, aquella chica de cabellos rosas de la cual nunca logró memorizar su nombre su estómago se revolvió, pidió que fuera una broma, un chascarro de el grisáceo.
Sintió como sus ojos se cristalizaban y se tornaba su visión borrosa.

Pensó en que quizás siendo tulio como era logró conseguir novia y el solo había conseguido mujeres interesadas con relaciónes fallidas.

No era eso.

Como última opción creyó en que quizás y solo quizás sentía algo de celos por su amigo.... Quizás por fama quizás por suerte quizás por algo más que no fuera amor.

Imploraba a cualquier ser divino que no fuera amor.
Imploraba con lágrimas en los ojos que su corazón no sintiera eso.

Aun con lágrimas en los ojos acudía con su guía espiritual, aunque este no le daba esperanzas.

"Aceptate conejo, Deja a tu corazón sentir, quien sea, no cierres tu alma o de lo contrario, cerraras tu vida, tu futuro "

Se sentia un más desafortunado que cuando Tormenta china perdía en el hipódromo.

Se sentía aún más fracasado.

Se sentía enamorado.

𝓒𝓱𝓮𝓻𝓻𝔂 _31minutos_Where stories live. Discover now