Dhampiresa [Terminada]

VI

Eran pasada la media noche y estábamos afuera del club nocturno, tenía las letras "Fallen" en rojo luz led. Había una gran cantidad de gente esperando, los guardias de seguridad revisaban la lista y dejaban pasar, habían algunos que se colaban, pero al llegar con ellos no los dejaban pasar, algunos eran algo rebeldes y discutían con los guardias y estos sin remordimiento los sacaban a patadas.

—Será difícil entrar —habló Alice con una sonrisa en los labios, y todos reímos.

—Vamos —les dije, todos caminamos y nos pusimos en la fila, unos chicos se colocaron atrás de nosotros.

—Se les perdió el camino al cementerio —dijo uno haciendo reír a sus compañeros.

—En realidad me lo se perfectamente —esa fue Alice que se giro para mirarlo —. Puedo llevarte y dejarte en uno de mis sarcófago —él hombre no dejaba de ver sus ojos —. Es muy cómodo. Te encantará —le dijo en un susurro y este despertó como si hubiese estado en una ilusión, Alice le guiño el ojo y caminamos ya que la fila avanzaba, los tipos no siguieron molestando, no se que le habrá hecho Alice. Paramos frente al guardia de seguridad,nos miró de arriba a bajo con una ceja levantada.

—¿Sus nombres? —preguntó el hombre.

— Nuestros nombres no son necesarios. Mírame —le ordenó Lena, él hombre la miró —. Mis amigos y yo tenemos libre acceso a este club —él tipo estaba en un trance.

—¡Boris! —le grito su amigo, este salió del trance —. ¿Que sucede?

—Nada, nada —contestó —. La señorita y sus amigos pueden pasar —le dijo a su amigo y este nos dejó entrar.

Era el habiente típico de un club nocturno, las luces de neón, azules, rojas por todo el lugar, focos de colores en el techo que se movían de un lado a otro, estaba repleto, teníamos que pasar empujando un poco a algunos. Habían dos pistas de baile, estaban separadas por un telón transparente y estaba en altura, nos acercamos todos a la barra y pedimos cerveza para los cuatro.

—¿Creen que suceda algo? —pregunto Jasper, parecía ansioso.

—No sabemos, por eso estamos aquí —le contestó Lena.

—Debe de estar ansioso en ocupar su espada —le dije mirándolo de reojo.

—Si, es verdad —afirmó —. De todas las armas, la mía es la mejor, la más poderosa.

—Que sea de wolframio no la hace poderosa, sólo la hace efectiva para matar cualquier criatura —le dije.

—Mi espada esta hecha de wolframio puro —dijo —. En cambio la que ustedes usan, esta bañada en plata —nos dijo en un tono burlón. Si, usábamos armas de plata, bueno, bañadas en ellas, Jasper era el único que usaba una espada hecha por el material más duro del mundo, Wolframio con fragmentos de diamantes, era un arma muy antigua, herencia familiar. Por lo que sabía era que la familia de Carlisle venía de un legado de caballeros, de guerreros, así que la espada fue pasando de hijo en hijo, solo era una herencia para los varones, ¿que machista, no? —. Mi familia viene de un legado de guerreros —decía orgulloso.

—Ahora de un guerrero vanpiro —le dijo Alice para agrandar más su ego, Lena y yo pusimo los ojos en blanco.

—Deberíamos separarnos —sugerí.