--La determinación es una de las cualidades del guerrero, ¿no es así?--

Las 6 personas que expectaban tal escena asintieron, menos la castaña quien soltó un gruñido.

--Díganme, mi Consejo de Guerra...- prosiguió, --¿creen que se merezca una segunda oportunidad?--

--Afirmativo, su majestad.-- contestaron al unísono.

--Me niego-- la rubia dejó caer su espada.

--Diana, serás tú quien la pruebe de nuevo-- ordenó la Reina.

--Como lo ordene, su majestad.--

--¿Esto es lo que tú quieres?-- le preguntó Alice a la niña.

--E-Esto...-- bajó la mirada, --esto es para lo que nací...--

Su hermana apartó la mirada y comenzó a alejarse. Se detuvo justo al lado de su madre, mirando hacia adelante, no la miraba, pero sabía que tenía el ceño fruncido.

--¿Te haces llamar madre?-- preguntó. No obtuvo respuesta, escupió sangre a sus pies, los presentes soltaron suspiros de asombro e indignación a tal falta de respeto, --¿ves lo que has metido en su cabeza? No sabe lo que es bueno para ella...--

--Ella sabe lo que tiene que hacer.--

--¡Porque lo único que le enseñas es a pelear!-- contraatacó con enojo. --¡Lo único que nos enseñaste es a pelear! ¡Si no pudiste tener a un varón no tienes porqué hacerle esto a una niña!.--

--Tienes razón, Alicen...-- soltó y cerró los ojos, --creo que haber tenido varones, me hubiera sido más útil.--

--Al paso que vas-- le miró.
La Reina alzó la mirada con orgullo.
--Al paso que vas, ella también acabará odiándote.--

--¡Alice, no te atrevas a hablarle así a su majestad!--

--Más te vale cerrar tu maldita boca mujer incompetente, estoy cansada de tí, si ella pasa esta prueba tú te vas por el caño.--

--Pero Princesa Alice...-- habló un hombre pelinegro.

--Líder Gunther, con todo respeto, me retiro, no puedo estar más en este lugar, y tú...-- miró de nuevo a su madre, --sólo espero que no te odie, cuando le cuentes la verdad.--

"La verdad..."

"La verdad..."

"La verdad..."

"¿De qué estaba hablando?"

--¡Oye!--

--¿Hmm?...-- preguntó parpadeando, para después fijar sus ojos en la rubia que estaba a su lado.

--Estás muy distraída, ¿te sucede algo?-- preguntó. --¿Acaso es un chico? ¿un pretendiente? ¿te acostaste con alguien?--

--Whitney, tu pendiente se acaba de caer en tu café-- respondió ocultando su molestia.

--¡Oh! ¡Mi pendiente de rubí!-- tomó la taza de café y corrió lejos del lugar.

--Ya era hora-- soltó otra chica que estaba sentada en la misma mesa que la de ojos claros.

"Odio II" ▪Nanatsu no Taizai▪Where stories live. Discover now