Solte un suspiro debido a aquella charla que me resultó interesante, solo espero que todo lo que hayamos hablado ahí sea solo una equivocación.

J: Vaya... ¿la niña aún no se fue a dormir?— pegue un salto del susto. Ese desde cuando estaba ahí.

R: Me asustaste idiota y no soy una niña para tu información, así que si me disculpas— .ignore por completo al idiota que se encontraba a mi lado y rápidamente me adentre a mi habitación. — maldito, quien se cree que es— coloque una mano en mi pecho, mi corazón aún latía como loco por aquel susto que me había dado.

No sabía que hacía afuera de mi habitación a esas horas, o será que ¿nuestras habitaciones están cerca?
No es momento para eso, necesito dormir.

●●●●●●●●●●●●●●●

Un horrible ruido suena en mi oído provocando que me sobresaltara y cayera de la cama golpeando mi cabeza. Me frote debido al dolor y al ver que ese ruido no paraba, abri mis ojos fulminando con la mirada al responsable de ello por haberme despertado de aquella manera.

R: Cual es tu maldito problema!!— le grito a Jeremy.

J: Mi problema es que tienes que ir a trabajar en dos hora y media — responde elevando las cejas — conozco a las chicas como tu, se demoran años en arreglarse y demás, así que te estoy haciendo un favor.

R: Las chicas como yo? — repito arqueando una ceja— a caso me perdi las partes en la que sabes quien soy?

J: Pareces ser una egocéntrica y malcriada niña— dice encogiéndose de hombros.

R: Que no lo soy! Y además no soy una niña— exclamo indignada.

Me levanté del suelo con dificultad por las sabanas ignorando a ese infeliz. Camine sin ganas hacia la ventana de la habitación corriendo las cortinas. *Aún es de noche*

R: Que hora se supone que es?!— pregunte sin dejar de mirar por la ventana.

J: Las cinco y media — responde calmado.

R: De la mañana?!!— respondo atónita

J: No, de la tarde— responde sarcástico.

Gire observándolo molesta, aún no se había aclarado el cielo y ese idiota ¿vino a despertarme a esta hora? ¿Acaso no sabe que la siesta es sagrada para uno y más para mi? Quien es capaz de contratar a un maldito enfermo que se atreve a despertarme a las cinco y media de la mañana y encima ¡Tirandome de la cama!.

R: No pienso ir a trabajar — digo entre cerrando mis ojos— Gracias a vos, me encuentro de mal humor y no es conveniente hacerme enfadar.

J: ¿No pienso ir a trabajar? ¿Cuantos años tienes? ¿Cinco? Y así dices que no eres una niña, eres demasiado inmadura.

¡Ahora era inmadura!

R: ¿Me estás diciendo inmadura a mi? ¡Tu eres el enfermo que me levanto con esa maldita alarma!

J: Pues este enfermo está a cargo, así que cuida tu tono niña — responde sonriendo con diversión.

Quiero borrarle esa sonrisa de la cara de un puñetazo.

R: No creí que sería posible llegar a  odiar a una persona antes de las veinticuatro horas.

Él ríe y procede a salir de la habitación cerrando la puerta a su paso.

~~~~

Luego de darme una ducha, que por suerte la habitación tenía, procedí a crear un poco de nieve y transformarlo en un cepillo de dientes para asear mi boca y luego vestirme con uno de los mamelucos y una camisa vieja que había en el armario, estaba completamente lista para comenzar el día. *Aunque para comenzarlo falte una hora* Era un martes y termine por levantarme con el pie izquierdo, en realidad no me levanté con ningún pie, pues me caí de la cama, pero es casi lo mismo.

Salí de la habitación llendo a las de Naty y Mika tocando sus puertas, pero no tenía respuesta alguna de ellas, supuse que seguirían durmiendo.
Así que solo camine sin rumbo por toda la mansión, hasta toparme con el imbecil de esta mañana.

J: ¿Ya terminaste de pasear? — elevo la voz haciendo que saltara del susto.

¡Estupido, mi corazón idiota!

R: Se te está haciendo costumbre el acabar con mi paciencia— dije entre dientes fulminandolo con la mirada.

J: Jajaja paciencia deberías de tenerla ahora — me paso un papel y una escoba que escondí de tras de él— ponte a limpiar las habitaciones que te marqué, después de 2 horas nos vemos en el salón y espero seas puntual Rose.

R: Soy Rocio tarado, al menos aprendete bien mi nombre— hice una pelota con aquel papel que me había dado demasiado furiosa y sin dudar se lo arroje dándole en la cabeza.

¡Vamos! ¡Amo mi puntería!

J: ¿Que crees que haces niña?— ahora él  tenía una expresión de molesto, al menos había logrado mi objetivo. — ¡Levanta eso y ponte a limpiar! — grito y sin más se fue.

   Tarado, tienes suerte de que tengo un buen autocontrol que perfeccione en la noche, sino ¡estarías muerto!

Agarre del papel que había arrojado, abriendolo y notando un mapa escrito en el, con 2 círculos apuntando a los lugares que supongo debería de ir.
Al voltear la hoja habia algo escrito

     Quiero limpia esas dos habitaciones ,no quiero ver ni un solo polvo en los muebles. Termina en dos horas y ve al salón de baile o sino mañana te daré el doble de trabajo y con menos tiempo.

Psdt: Tonta que lo lea.

Atte: Jeremy

R: IMBECIL! ¡Me las pagarás!














L͜͡a͜͡s͜͡ E͜͡s͜͡t͜͡a͜͡c͜͡i͜͡o͜͡n͜͡e͜͡s͜͡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora