Capitulo 2: Un mal presentimiento

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Capitulo 2: Un mal presentimiento




Una ciudad destrozada, gran cantidad de cadáveres por el suelo. Aurores, y miembros de la orden peleaban con todo lo que tenían contra las criaturas mágicas y los mortifagos que peleaban encarnecidamente. Lord Voldemort había vuelto al mundo mágico hace unos meses utilizando la sangre de Alexandra Potter la niña que vivió, y ahora planeaba algo distinto, necesitaba algo que le pudiera acercar a la joven que había sido la fuente de su destrucción, constantemente creaba batallas sin sentido, solo para divertirse con el sufrimiento ajeno. Por lo menos es la teoría que manejaba el  ministerio de magia, pero él siempre estaba más allá de dichas suposiciones.

Un hombre de capa raída peleaba hombro con hombro al lado de una mujer delgada de cabello corto café oscuro, con unos ojos preciosos de color verde claro, estaban siendo emboscados por un número impresionante de hombres lobos, no convertidos por la falta de luna llena y vampiros. El hombre temía por la mujer ya que él ya era un hombre lobo por lo que en dado caso de que alguno de esos atacantes lo rasguñaban, estaría a salvo, sin embargo ella no lo era, no estaba para nada a salvo

Angustiado en sus pensamientos se alivio al escuchar un crack que logro salvarlos, ya que ante los vampiros y hombres lobo, habían aparecido tres personas que comenzaron a luchar con valentía, los cinco se complementaron y pelearon hasta que al parecer había menor número de enemigos y les dio tiempo de respirar. Los tres magos eran James, Sirius y Marianne

— Remus ¿Cuales son las órdenes del profesor Dumbledore?

—Tenemos que sacarlo de aquí, Esta escondido por el momento, siendo protegido por Emilie y Dedalus, pero ya saben como es de carácter y tarde o temprano saldrá a pelear

—Tienes razón, entonces a trabajar— expreso Sirius viendo una bandilla de mortifagos que se les acercaban, y comenzó a pelar con una agilidad impresionante. A su lado espalda con espalda peleaba James Potter, un dúo impresionante, siempre muy activos, fuertes y ágiles, no podían contra ellos. Ellos no perdían, ni el sentido del humor en este tipo de situaciones.

—Sirius esto es divertido desde un punto de vista….Muy extraño

—Cornamenta no te presiones….Esto si es divertido, solo tenemos que jugárnosla y después cenaremos esa cosa que tanto le gusta a Alex— expreso Sirius sin preocupación en la voz

—Pizza, o algo así es lo que le gusta— agrego Marianne rodando los ojos por ver que aun no recordaba ese alimento a pesar de que llevaban años comiéndolo.

James clavo con maestría una navaja que siempre cargaba que estaba hecha de plata regalo  de Alex. Era extraño pero un día llegaron a vuelta de lechuza tres navajas de plata y se las regalo una a Sirius, James y Remus para que pelearán contra los licántropos, sin esperar a que ellos se negaran ella les dijo "Si piensan que me quedare tranquila mientras ustedes pelean, están locos. Hermione me dijo que así se mata a los hombres lobo, así que no protesten y callen..." Pateo el trasero de un mortifago que tropezó torpemente por un obstáculo, que había aparecido Sirius

—Ja, ja, ja, ja, ja, ja, ja, eso estuvo bueno Canuto

—Si, es cierto ja, ja, ja

Mientras ellos reían llego corriendo Remus

—Chicos los cubriremos vallan por el chico y hay que llevarlo a algún sitio seguro

—Lo llevaremos a casa, después de Hogwarts y Gringotts la mansión Black-Potter es la más segura

—Tienes razón Canuto. Vamos por el chico

Se hicieron camino para ir en su búsqueda pero en ese momento Marianne callo al suelo tropezando, un mortifago a su espalda la iba a atacar y Sirius se desapareció para llegar hasta su esposa, que estaba lejos de donde se encontraba James, una vez que se deshizo de ese mortifago y ayudo a levantarse a Marianne, grito a su amigo que lo miraba alternativamente a él y a la dirección en la que tenían que irse.

Potter y los poderes ocultosWhere stories live. Discover now