27. "Nadie perdió a nadie".

Comenzar desde el principio
                                    

-¿Qué? ¿Ver The Big Bang Theory? -bromeé mientras inclinaba un poco la cabeza hacía arriba para poder mirarlo, pero solo conseguí ver la parte baja de su mandibula y no pude evitar fijarme en lo perfectamente marcada que se encontraba. Ahora la podía ver completamente ya que hoy no se había puesto su chaqueta con capucha, no sabía si lo había hecho a propósito o solo se le había olvidado pero, sinceramente, a mi me encantaba así. No encontraba nada que no me guste de él. ¿No era eso algo aterrador? todas las personas tienen alguna imperfección. En cambio Ian...

-No -dijo y soltó una pequeña risita que chocó contra mi cabello-, estar contigo.

Tragué saliva.

-¿Si? -pregunté casi sin querer, pero no fué hasta que lo dije que me dí cuenta de lo tonta que sonaba. Seguía con esta idea, de que esto era demaciado bueno para ser verdad, pero lo disfrutaba de todas formas.

Él miró hacia abajo, hacia a mi.

-Si, desde ese día en el kiosco del Instituto- me sorprendió bastante, no voy a mentir.

-Todavía recuerdas ese día -balbuceé torpemente sin poder ocultar mi sorpresa.

Él sonrió, aunque juntó las cejas un poco y me apretó más contra sí mismo.

-Claro -dijo-. ¿Como no lo haría? tú fuiste la primera chica en tratarme indiferente y en acercarte a mi, no porque fuera famoso -dijo la palabra con notable asco y sarcasmo-, sino porque solo querías comprar algo y eras demaciado impaciente y vaga como para hacer la cola -sonreí un poco- Ni siquiera sé como dejé que Roland me arrastrara hasta allí para conseguirle comida mientras estaba castigado, nunca voy al kiosco -hizo una mueca- pero supongo que ese día valió la pena.

Podía sentir mis mejillas de un tono más rosado al normal, pero en cambio dije:

-Eres un sentimental -mientras corría mi mirada hacia Sheldon otra vez. Pero una gran sonrisa se coló en mis labios, una que era imposible retener aunque quisiera y pude ver de reojo una de Ian también.

-Es lo que me has hecho-dijo en tono acusador pero los dos sabiamos que era solo una broma.

-¿Lo que yo te he hecho? Por favor, sentimental- dije con un tono de burla, arqueando las cejas, Ian sonrió brevemente cuando dije el apodo. Suspiré porque yo me sentía igual a él.

-Aunque yo tampoco puedo decir nada- canturreé sin una total intención de que me escuche. Pero sin embargo lo hizo, y me dirigió una sonrisa, que yo devolví sonrojandome solo porque él se había quedado más tiempo mirandome que las otras veces.

Ahora el mediodía se había convertido en tarde, una tarde que transcurrió bástante tranquila. Ian y yo apenas nos habíamos movido de nuestra posición ya que si uno salía de la posición, no pasaba demaciado tiempo para que volvieramos a esta, pero a medida que las horas iban pasando yo me ponía más nerviosa porque ya iban a ser las seis y sabía que mis padres no tardarían en llegar, siempre llegaban más temprano cuando tenían problemas y ahora había ocurrido un gran problema  y yo no había encendido mi celular en todo el día. Seguro me matarán por todo esto. Y no hablaba solo de mis padres en ese punto, también me refería a Ethan, Kay y Brooke.

-¿Quieres que me quede? -había dicho Ian al verme observar el reloj de la pared cada dos minutos- sé que no será exactamente un alivio para tus padres verme, pero al menos puedo intentar hablar con ellos...

No le había dicho a Ian que la razón por la cual peleé con mis padres, ya que aunque fué por un poco de todo, él era la razón que predominaba.

Tenía que decirselo, lo sabía.

Pero temía como iría a reaccionar.

-No, yo...puedo manejarlo -le dije pareciendo segura, pero él al parecer seguía indeciso- estaré bien, tranquilo.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Feb 28, 2015 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Bad boy.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora