🏹Capitulo 17

Começar do início
                                    

- Bien - dijo él con una sonrisa-. Porque el viaje hasta India será algo largo...

- ¿In-india? - apenas pudo articular-. ¿Viajaremos hasta India?

- Así es - la tomo por la cintura-. Dijiste que querías conocerlo.

- Eros... ¿Qué pasa si te cansas en el viaje? ¿O sí...

- No va a suceder nada, por eso ira un copiloto conmigo.

- Es increíble que vayamos a viajar a India - dijo con alegría-. Es la primera vez que subo a una cosa de esas - señaló dirigiéndose al jet.

- Bueno... conmigo estarás segura - contestó él dándole un beso en la comisura de los labios.

La pareja subió al interior del jet para emprender su viaje a su destino de luna de miel, después de pasar unos cuantos días se devolverían a Grecia para llevar a Marie a la casa. Los documentos estaban listos y sólo faltaba el visto bueno para hacer legal la adopción de la pequeña.

Isabella visualizó el paisaje que se dibujaba por los aires cuando el jet despegó. Compartió algunas sonrisas con su marido por el algunas partes del viaje que duro lo que pareció una eternidad, aunque el tiempo estipulado era alrededor de catorce horas la castaña lo sintió como si nunca fuese a terminar.

- Bella.... despierta - la removió de un lado a otro su marido mientras ella abría sus ojos lentamente.

- ¿Q- que? - articuló adormilada.

- Hemos llegado preciosa.

Ella le sonrió dándole su mano para después bajar del jet, la pareja se acercó a uno de los autos estacionados en la pista que los llevaría hasta el hotel en que se hospedarían.

Era la primera vez que veía algo tan precioso como aquel país, solo lo había podido ver por medio de imágenes en internet o en revistas de viaje que solía leer, ahora era un sueño hecho realidad.

- ¿Te gusta? - la pregunta de Eros la saco de sus pensamientos.

- Es bellísimo, quisiera ir a una de esas tiendas como el mercadillo de Grecia.

- Iremos, te prometo que iremos y compraremos muchas cosas de recuerdo.

Ella se apoyó en el hombro de él sonriendo. A pesar de que aún tenía miedo de que esa mujer estuviera suelta sin pagar el daño que había hecho, no dejaría que el miedo la atormentara, se concentraría en su amor por él y por Marie. Sólo eso importaba.

- El hotel es un poco viejo, pero me ha gustado la estructura espero no exista problema - dijo el griego.

- No me importa si es una casa, el lugar es precioso - respondió ella alegre.

El auto condujo hasta que los dejó en un hotel en específico de elección del griego. Isabella miró como una niña el lugar, se sentía como si hubiera viajado a otro mundo o estuviera en un cuento.

Tomó la mano de Eros y juntos entraron al hotel, habían algunas cuantas personas en la recepción compartiendo en familia y otras sólo e conversaban entre sí.

- Nos han dado una de las suites principales, tiene una bonita vista hacia el Taj Mahal. Mañana podemos ir y dar un paseo. Nuestro primer paseo como marido y mujer - dijo él mientras se alejaba de la recepción con las llaves en sus manos.

- ¿Podemos tomar algunas fotografías? Me gustaría armar un collage en la habitación con el viaje.

- Claro que si preciosa, podemos tomar las que tú quieras - la abrazó por la espalda mientras la llenaba de besos por todo el rostro-. Y podemos también comprar cosas para la habitación de Marie ¿Que te parece?

Eros Onde histórias criam vida. Descubra agora