•RUBEGETTA WEEK•

DIA 3 //PREPARACIÓN\\

Al acabar la fiesta Vegetta se dispuso a ver qué le habían robado, ya que sabía que sus amigos eran unas ratas.

Después de comprobar todo vio que solo le faltaba un ascensor, y eso le sorprendió.

-Pensaba que iban a robar más cosas- dijo Vegetta entrando a su casa con Rubius a su lado.

TIEMPO DESPUES

Ya han pasado dos meses desde que les contaron a todos que se iban a casar y finalmente acordaron en que la boda se celebrará el 1 de junio.

Vegetta estaba estresado ya que solo le quedaba una semana para preparar el lugar.

En estos últimos meses hicieron los trajes, contrataron al cura y acordaron la fecha.

Y sólo les quedaba una semana para preparar el lugar.
Como Rubius es cura se empeñó en que la misa se hiciera en la iglesia y la celebración en otro lugar, y como era uno de los novios el resto aceptó.

Vegetta llevaba casi una semana sin dormir para tenerlo todo preparado.

Habían acordado en celebrar la boda en el lugar en el que estuvo la casa de Mangel y Lolito, ya que era un lugar tranquilo y bonito.

Todos los héroes del pueblo estaban ayudando y colaborando en la preparación, algunos más que otros.

Vegetta daba las órdenes ya que ya tenía la idea en la mente, y Rubius le acompañaba.

-¿Donde colocamos esto?- preguntó Auron señalando algunas decoraciones que el de ojos morados había comprado.

Vegetta le señalo dos grandes árboles que tenían en medio el pequeño altar.

Auron y Fargan llevaron lo que había en la caja hacia los árboles para colocarlo.

Estaba a punto de hacerse de noche por lo que decidieron seguir el próximo día.

Cada uno se fue a su casa, Vegetta y Rubius se dirigieron hacia la casa de Rubén.

Al entrar se sentaron el se salón y Vegetta trató de explicarle a su prometido como quería que quedara al final el altar.

Pasaron los minutos y las horas y la pareja decidió ir a dormir.

Ambos subieron a la habitación y se durmieron.

A la mañana siguiente Vegetta despertó a Rubius, ya que tenían que estar en el lugar donde celebrarían su boda a las diez de la mañana.

Al llegar al lugar esperaron a resto y cuando llegaron continuaron montando todas las cosas que tenía Vegetta en la cabeza.

Cuando solo quedaban tres días para la boda ya lo tenían todo preparado. Vegetta había empezado a dormir mejor, ya que todo estaba saliendo perfecto.

El día de la boda se acercaba, solo quedaba un día, y los novios decidieron ir a cenar al restaurante.

Al llegar al lugar en el que cenarían, se sentaron en una mesa para dos y disfrutaron de su comida.

Acabaron de cenar y fueron a casa de Vegetta. Al llegar se sentaron en el salón, Vegetta hizo las palomitas y Rubius eligió la película está vez.

Vieron la película tranquilamente y se durmieron juntos en el sofá.

Rubius se despertó primero y se dirigió a la cocina para prepararle el desayuno a su pareja.

Vegetta se despertó, la casa estaba inundada en un delicioso olor a tostadas.
Se dirigió a la cocina para ver a su prometido.

Desayunaron y se dieron cuenta de que ese sería su último desayuno como novios.

Ese día era la boda...