love song ➳ nohyuck

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¡love song!
lsh-cherrypig

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Una vez las clases dieron fin, el grupo de siete chicos se despidió en la salida de la gran institución donde estudiaban, asegurándose que se verían al siguiente día con unas sonrisas.

A diferencia de sus amigos, DongHyuck prefería ir a su casa caminando. Disfrutaba de los rayos del sol golpeando su rostro mientras tarareaba cualquier canción proveniente de sus audífonos, una linda sonrisa estaría plasmada en su rostro todo el camino.

Pero no siempre el clima estaría de acuerdo con sus planes.

Un puchero se formó en sus labios al ver que el cielo estaba completamente nublado, pero no le quedó otra opción más que caminar rápidamente. Si no se apresuraba, seguramente comenzaría a llover y él no traía nada consigo para poder cubrirse.

Colocó la capucha de su chaqueta de manera correcta y caminó silenciosamente por las calles, sin prestar demasiado atención a la canción que sonaba en ese instante.

Empezaba a creer que eso que decían sus amigos sobre que "tus cambios de emociones van acorde al ambiente" era cierto.

— ¡DongHyuck! -volteó cuando escuchó una voz algo lejana.

A unos cuantos metros divisó una muy conocida cabellera rubia, sintiendo un inexplicable sentimiento recorrer su pecho y generando que sus manos temblaran mientras lo veía acercarse cada vez más.

— Hola, hyung. -dijo en un susurro en cuanto el mayor llegó a su lado.- ¿Tus padres no venían a buscarte hoy?

— Llamaron a último minuto diciendo que no podrían. -un leve puchero abarcó sus labios y de manera violenta miles de mariposas invadieron el interior de DongHyuck.

No puedo detener este sentimiento.

— Bueno, -su voz salió algo temblorosa, así que carraspeó.- agradece que al menos no irás solo.

DongHyuck contuvo un gritito cuando Jeno le sonrió, de esa forma tan característica de él que causaba que sus ojos se volvieron dos media lunas.

Cuando sonríes mientras me miras siento que mi corazón cae de rodillas.

Y a partir de ahí, se encaminaron por las calles de Seúl, muy ensimisdados en la conversación que llevaban como para notar la gente a su alrededor y todo lo que ocurría. Si fuera posible, JaeMin estaría detrás de ellos bailando y ni siquiera lo notarían.

El menor frunció su ceño cuando una gota recorrió su mano derecha, alzando su vista al cielo comprobó que, efectivamente, había comenzado a llover cuando unas tres gotas más cayeron en su rostro. Escuchó la suave risa de Jeno a su lado.

— Parece que ha comenzado a llover. -habló el rubio y llevó su bolso hasta el pecho, rebuscando ahí quién sabe qué.