Pureza de sangre.

XIV

Capítulo 14: Regreso.

Estaba con mis padres en la estación esperando la llegada del tren. Tendríamos una semana agitada, ya que estaban ayudando a la señora Malfoy a organizar una fiesta de navidad.

Ginny y yo estábamos igual que antes de todo, después de varias cartas llenas de incomodidad habíamos recuperado nuestra amistad, aún notaba como desviaba el tema cuando mis cartas contenían algo sobre los Slytherins, pero no la iba a presionar para que le agradaran.

Ron me había invitado a la madriguera para navidad, pero después de ver lo emocionados que estaban mis padres con la fiesta de navidad, no pude aceptar.

En cuanto el tren llegó, ví como comenzaban a bajar emocionados y apresurados muchos estudiantes que imaginé serían de primer año.

Después de un tiempo pude divisar a Pansy, Theodore y Zabini, no tuve tiempo para buscar a Malfoy porque sentí una mano en mi hombro.

—Oh Hermione, tenía tantas ganas de verte— era Molly, en cuanto me giré me abrazó ignorando por completo la presencia de mis padres— lamento mucho lo que ocurrió ese día en la madriguera, estábamos todos muy afectados todavía y pensé que tú familia tal vez podría prohibirte vernos, no sabía cómo enfrentarme a perder a alguien más— entendí que hacía referencia a Fred, así que solo le devolví el abrazo, debía reconocer que aún me dolía todo lo que había pasado, no es como que me hubieran dicho que no querían volver a saber de mí, pero muchas veces los actos son mucho peores que las palabras y con su indiferencia me habían demostrado mucho.

—También lo siento mucho, Hermione— el señor Weasley puso una mano en mi hombro en cuanto su esposa me soltó un poco— ¿Sabes que nuestra casa siempre estará abierta para ti, cierto?— quizás en otro momento hubiera pensado que sí sin dudarlo, pero ahora no lo sabía con certeza, a pesar de eso asentí.—Ron nos dijo que no vendrás en navidad.

—Sí, bueno, hay algunas cosas que tengo por hacer y...

—¡Hermione!— escuché esa voz que conocía tan bien y casi de inmediato sentí sus brazos alrededor de mi cuello— Me has hecho falta, lo siento tanto.

—Ginny— la abracé con el mismo entusiasmo, en cada carta se disculpaba unas diez veces por "haberse comportado como la peor escoria del mundo mágico" y con el tiempo me di cuenta de lo importante que era mi amistad con ella, estábamos dispuestas a darnos otra oportunidad, entendía que ella también estaba en una etapa estresante de su vida— también te he extrañado.—ella saludó a sus padres, la notaba un poco apagada y menos entusiasta, se esforzaba por disimularlo, pero no estaba bien.

Giré para buscar a Pansy, la localicé junto a mis padres con Theo y Daphne, a unos pasos estaba Malfoy tomado de la mano de Astoria.

Supuse que en el tiempo que habían estado en Hogwarts lograron resolver las cosas con las Greengrass y me alegraba por mi hermana.

—Fue un gusto verlos— abracé a los Weasley— pero tengo que ir a saludar a Pansy, intentaré ir a la madriguera uno de estos días con Harry.

En cuanto llegué junto a los Slytherins Daphne y Astoria dejaron de reír, pero lo ignoré, no tenían porqué aceptarme solo por ser melliza de Pansy.

—¡Hermione!— contra todo pronóstico la pelinegra me abrazó frente a todos los padres y estudiantes que nos miraban, no era algo común ver a Pansy Parkinson perder el papel de arrogancia.— ¡Merlín, he estado esperando toda la semana!

—Estoy muy feliz de verte, Pansy— nos separamos y me giré para ver a los demás— Hola Theo.

—¿Qué hay, comelibros?— revolvió un poco mi cabello, al poco tiempo me acostumbré al castaño, era alguien fácil de tratar y en extremo agradable.— ¿Has acabado ya con la biblioteca de tus padres o aún quedan libros sin leer?