1

160 15 4
                                    

ENVIDIA


Despertarse y que lo primero que veas sea el trasero de tu hermano no es muy agradable que digamos, si fuera un niño pequeño tal vez lo sería, pero no, hablamos de un joven de 17 años con voz de hombre con pelo en el pecho.

—Mamá me ha dicho que te despierte, así que buenos Días— y se hecha un pedo en mi cara, buena manera de comenzar el día—si no te levantas rápido, volveré a echarme otro y se que no te gustara—dicho esto se fue de mi habitación dejándome sola.

Lo mejor en esta situación es que le haga caso, las amenazas sobre su trasero nunca son broma. Me levanto de mi cama y me dirijo al baño, me quito la pijama y empiezo a observar mi cuerpo.

Pues, gorda no estoy pero flaca tampoco, soy una combinación de ambas o simplemente normal, aunque la verdad no tengo mala forma, en mi opinión tengo una buena figura, aunque tal vez debería cortarme el cabello, tenerlo largo ya me empieza a aburrir.

No, contrólate, tu cabello largo esta bien.

Me lavo la cara y empiezo a cepillarme, salgo del baño aun en ropa interior y me dirijo a mi closet, escojo una camisa verde, un pantalón de color verde y unas zapatillas blancas.

Definitivamente no soy un icono de la moda pero hago lo mejor que puedo, me dirijo al baño nuevamente para peinarme, creo que me haré un peinado al estilo Ariana Grande, si, me gusta su estilo, ella debe de tener una muy buena vida.

Salgo del baño me posiciono al frente de mi espejo para verme una última vez, sonrío y asiento satisfecha con el resultado, tal vez no seré un icono de la moda pero hay que admitir que me veo bien.

Salgo de mi habitación y me dirijo a las escaleras, las bajó cuidadosamente, no quiero acabar como la última vez que baje, voy a la cocina y me encuentro con mi mama, mi padrastro y mi hermano acabando de desayunar, sin mi.

—¿Desayunan sin mi? que dolor tengo en mi  corazón— dramatizo y mi mama rueda los ojos.

—Si no tardaras tanto en arreglarte no tendríamos que desayunar sin ti—bufa mi padrastro.

Ay eso si me dolió.

—Harmony, no necesitas arreglarte tanto, aunque te vistas con una bolsa de basura te veras hermosa- dice mi madre, ella si sabe como subirme el autoestima—Ahora ten —me lanza un pan — Largo o llegaras tarde a la escuela— así como lo escuchan, me está echando de la casa.

Eso me recuerda que no he hecho mi mochila, asi que subo corriendo a mi habitación a ordenar rápidamente mis cosas y por supuesto que me echo algo de colonia.

por si me besa, por si me abraza y por si se pasa.

Ya quisiera que alguien se pasara conmigo, No, pensamientos impuros aléjense.

Corro a las escaleras y las bajó cuidadosamente de nuevo, la seguridad ante todo, aunque nunca me ha importado realmente.

Me despido de mama y de Fred y me dirijo a la puerta.

—Por cierto harmony recibiste un correo—Fred me avisa—¿te lo dejo en tu habitación?— ¿un correo para mi? !Ja¡ que loco.

—Hazlo por favor, gracias—cierro la puerta y empiezo a caminar, el camino a la escuela es algo corto, así que no es necesario usar un auto.

Mi hermano camina a mi lado, la caminata es silenciosa hasta que escuchamos el claxon de un auto, ambos volteamos, pude notar que era el auto de el mejor amigo de mi hermano, ni siquiera recuerdo su nombre pero se que es parte de los chicos populares de la escuela, también se que su familia tiene mucho dinero y por supuesto que lo demuestra comprándose ropa de marca y autos costosos.

SevenWhere stories live. Discover now