Capítulo 27

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Ron:

Kara se va con su padre. Y yo me quedo viéndola hasta que se pierde entre los pasillos.

—¿Y bien? —Riner me sorprende por la espalda —¿vas a decirme lo que ocurrió allá?

—Bueno, fue lo que el hombre dijo. Él y Kara solo buscaron una forma de hacer la alianza sin que tuvieran que casar a Kara con ese chico.

—El señor está muy molesto. Solo espero que no haga nada más allá de subir la voz — suspira exhausto —esto no salió como esperábamos. Solo nos queda esperar qué harán con nosotros. Por cierto, creo que alguien te está espiando. —señala discretamente hacia una esquina de la casa.

—Supongo que sí —camino hacia donde Riner me indicó. —¿qué ocurre?

—¡Ah! ¡N-no es nada! es solo que... —le lanzo una mirada cómplice —ya casi es hora de comer y... solo quería ver si el abuelo y tú estaban por ir.

—Mmm... sí, de todos modos no hay mucho que hacer ahora mismo —le digo levantando los hombros —¡oye abuelo! —Riner me mira —¡Anda, vamos a comer!

—Ten más respeto. ¿Cómo estás, pequeña Naly?

—Estoy bien —dice sonriendo.

—Ay, como envidio que no tengas que preocuparte por nada en estos momentos —suspira acariciando su cabeza. —¿en dónde está tu madre?

—Cocinando con Terry.

—Ya veo. Vamos pues.

Mi mente está dividida. Una parte está junto a Riner y Naly. Y la otra, intentando inútilmente estar junto a Kara.

Naly sale corriendo, adelantándose a nosotros.

—¿A dónde vas? —pregunta Riner.

—¡Iré a ayudar a mamá con la mesa para todos! ¡No tarden! —grita mientras se aleja.

—Está bien. Ten cuidado, no vayas a caer.

—¡No lo haré!

—De todos los que viven en este lugar, Naly es la más alegre y enérgica ¿no lo crees?

—Ah, sí.

—Y pensar que ella y su madre han pasado por tanto.

—¿De verdad? Dice que tiene un hermano que vendrá por ella algún día.

—Sí... —su voz suena sombría —eso es lo que le hemos hecho creer.

Toda mi atención se centra en Riner.

—Ah, ¿Qué?

—Fue hace 2 años. La madre de la señorita ya había muerto, y todo se había vuelto un caos. Entonces, Niko, el hermano mayor de Naly, salió en busca de una mejor vida para su familia. Pero no regresó, y "volveré por ti", fue lo último que le dijo a Naly.

—¿Qué le pasó?

—Recorriendo la ciudad de Lina en busca de algún trabajo, una carreta se salió de control, y Niko no pudo esquivarla. Alguien que lo conocía hizo llegar una carta a nosotros dándonos la noticia de que Niko había muerto a causa de un accidente.

—Niko era...

—Al igual que Naly, Niko era un omega. El padre de ambos, Laurence, los abandonó cuando Kanna estaba embarazada de Naly.

—Ya veo... —continuamos caminando. —y el padre de Naly...

—Es un omega. De seguro llamó tu atención el que Naly le dijera "mamá" a Kanna siendo una humana.

—Bueno, sí. Aunque no se ve mucho eso de donde vengo.

—No se ve mucho en ningún lugar. Pero pasó.

—¿Por qué no le dicen a Naly sobre su hermano?

—Porque tanto para Kanna como para mí nos pareció que sería demasiado difícil para ella decirle a una pequeña de cinco años que su único hermano había muerto.

—¿Y Kanna?

—Kanna mantuvo su sufrimiento a escondidas de Naly. Muchas veces fue a la biblioteca conmigo para llorar por su hijo. El señor le dio un tiempo para estar de luto, pero lo rechazó y le exigió que no se comentara el tema en frente de su hija. La señorita también está al tanto de la situación, e hizo todo lo que estuvo a su alcance para ayudarlas.

—Debió ser difícil para Kanna.

—Pero aun así trabaja duro para su hija, a pesar de que casi no tiene tiempo para ella. Pero Naly lo entiende.

Llegamos a la cocina. Naly colocó puesto para todos en la mesa, Kanna comienza a servir los platos, y Terry coloca una olla grande con la comida sobre la mesa.

—¡Ya está todo listo!

—Muy bien, Naly. —dice Kanna — ahora ve por los demás.

—¡Sí mamá! —sale corriendo.

—¡No corras, puedes...! —al parecer no la escucha —esta niña no cambia.

—Eso es bueno —dice Riner tomando asiento.

—Hola, Riner.

—A todos nos gusta la pequeña y alegre Naly ¿no es así Terry?

—Claro que sí —acaba colocando la última olla y se limpia las manos —ya está. Oye Rony ¿no piensas sentarte?

—Ah, sí, claro. —me siento. 

 

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Un lazo irrompible (Editado)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora