。⁠*゚⁠+~ 1 ~。⁠*゚⁠+

4.5K 196 30
                                    

Sus pies tocaron tierra firme después de horas en medio del mar.

Demonios, su columna dolía, apostaba que cada hueso de ella estaba fuera de su lugar, si eso resultará imposible.
Bastó solo un estiramiento para que un estruendoso ruido escapara, como si hubieran pisado mil ramas secas al mismo tiempo.

"El cambio es necesario" su mente repetía una y otra vez

¿Difícil?

Por supuesto que era difícil para ella,
Volteaba a los lados y no veía más que agua y unas pequeñas cabañas, la sociedad allá afuera estaría avanzando mientras que a ella le esperaban largos días en un lugar que parecía atrapado por el Tiempo.

Escocia, era mejor.
Su hogar era mejor.
Y ahora solo tenía...una simple casita en la costa que no hacía más que verse escalofriante cada que su vista se posaba en ella.

Incluso por dentro, sus paredes blancas y madera gris y poca vida entre sus paredes.

Sin embargo, apenas descansó la cabeza en la almohada de la cama, los brazos de Morfeo la arrullaron.

Estaba inquieta, se movía de un lado al otro provocando que sus ojos se abrieran.
¿Que hora era?, cuando llegó el día alumbraba y ahora su habitación estaba cubierta en nada más que oscuridad.

Su estómago gruñó, apenas si había probado bocado desde el día anterior y su estómago ahora gritaba por comida y su madre no había llegado.


Sus hambre fué mayor que las ganas de no salir, su abrigo apenas si le cubrió del fuerte frío que hacía afuera, incluso su aliento se podía ver en forma de humo cuando exhalaba.

¿En donde se encuentra algo que comer en Cairnholm?, nadie le había dado guía para ello.

Volteaba a ver a todas partes, sólo veía casas y el agua del infinito mar. Caminó sin rumbo fijo por la Isla esperando a encontrar Algo.

Durante el camino no había persona alguna, sin embargo, en algún lugar de aquella isla resaltó un lugar iluminado con luces amarillas, con ambiente viejo y abandonado que parecía ser un pub.

"El hoyo del sacerdote" según el tipo que atendió.
¡Que gran nombre para un lugar así!

Era la única persona ahí, lo cuál lo hacía aún más deprimente, Comió como si no hubiera un mañana y sólo veía la pequeña televisión que estaba en una esquina en donde transmitían un partido de béisbol.

Los fuertes truenos avisaban que una tormenta nocturna se aproximaba, hora de irse.

-ve con mucho cuidado -dijo el que parecía ser el dueño de el sitio

-¿Por qué?, ¿Sucede algo? -respondió extrañada

-la isla era muy segura, pero hace unos meses un chico extranjero desapareció sin dejar rastros ni testigos.
Jacob Portman, se llamaba aquel muchacho. Según su padre el estaba siempre en el viejo orfanato al otro lado de la isla.
tememos que haya un asesino suelto en las calles

-muchas gracias por informarme, lo tomaré en cuenta.

Lo mismo fué de regreso, caminar sin sentido alguno esperando que por arte de magia apareciera su casa frente a ella.

La suerte no estaba de su lado, pues al contrario terminó al pie de un lago en donde se reflejaba la gran casona que suponía era el orfanato abandonado, la vibra era extraña y aún más siendo de noche

You've reached the end of published parts.

⏰ Last updated: Dec 21, 2023 ⏰

Add this story to your Library to get notified about new parts!

The House |Enoch O'connor (En Edición)Where stories live. Discover now